Jesús Martínez García

Dolores y gozos de San José


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      JESÚS MARTÍNEZ GARCÍA

      DOLORES Y GOZOS DE SAN JOSÉ

      Cuarta edición

      EDICIONES RIALP

      MADRID

      © 2000 by JESÚS MARTÍNEZ GARCÍA

      © 2021 by EDICIONES RIALP, S.A.,

      Manuel Uribe 13-15, 28033 Madrid

      (www.rialp.com))

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      Fotocomposición: MT Color & Diseño, S.L.

      Fotomecánica: Margen, S.L.

      Realización ePub: produccioneditorial.com

      ISBN (edición impresa): 978-84-321-5387-7

      ISBN (edición digital): 978-84-321-5388-4

      ÍNDICE

       PORTADA

       PORTADA INTERIOR

       CRÉDITOS

       DOLORES Y GOZOS DE SAN JOSÉ

       Primer Dolor y Gozo

       Segundo Dolor y Gozo

       Tercer Dolor y Gozo

       Cuarto Dolor y Gozo

       Quinto Dolor y Gozo

       Sexto Dolor y Gozo

       Séptimo Dolor y Gozo

       AUTOR

      Torreciudad es un lugar de la provincia de Huesca donde se venera desde antiguo a la Madre de Dios. En 1975 se construyó allí un Santuario Mariano, demostración de la fe y del amor que san Josemaría Escrivá de Balaguer tenía a la Virgen, y de la fe de sus hijos del Opus Dei que secundaron su deseo. Por un costado de la explanada que recibe a los peregrinos desciende un camino empedrado que baja a la Ermita . Y en ese camino se encuentran —guarecidas del viento por una hilera de pinos y litaneros— las representaciones de los Dolores y Gozos de San José que en este librito se ofrecen para medicación.

      Necesitamos silencio interior y exterior que nos permitan el diálogo con Dios y con los santos, y a eso tiende esca popular devoción. Los Dolores y Gozos se pueden meditar, uno a uno, durante los siete domingos que preceden al 19 de marzo, o bien se puede hacer el ejercicio completo recorriendo las catorce escenas.

      Lo que importa es que contemplemos a aquél que, después de María —y junto a Ella—, ha sido quien ha estado más unido a Jesús en esta tierra; de él aprenderemos muchas cosas para nuestra propia vida, y en especial la disponibilidad para dedicarnos a las cosas que se refieren al servicio de Dios.

      Dios cuenca con los hombres y las mujeres para realizar la redención en la historia, pero necesita que ellos se confíen plenamente en Él y pongan a su servicio rodo lo suyo: su libertad, su iniciativa, codas sus capacidades. San Josemaría —que tenía esa experiencia— impulsó a muchas personas a dedicar sus más nobles energías —roda su vida— a esta tarea de la santidad y el apostolado. Porque a cada uno le llama Dios en las circunstancias normales de su existencia.

      Estas virtudes las aprenderemos considerando sus Dolores y Gozos. Lo podemos hacer cada uno por nuestra cuenta en cualquier lugar; pero también podemos acercarnos a Torreciudad. A veces es necesario dejar por un momento el ritmo diario y ver desde lejos —en un clima de silencio y oración— nuestra propia vida para aprender a darle el sentido que Dios quiere; porque también a nosotros Dios quiere confiarnos cosas grandes.

      El sol se refleja en el agua del lago que rodea la Ermita. La brisa que sube acaricia carrascas y mueve hojas de árboles. Y en el viento ascienden vencejos hacia los recios perfiles del Santuario, observando, en una y mil vueltas, ese trabajo compuesto de ladrillos y de amor para Dios y para su Madre.

      A mitad de ladera —como contrafuertes-— se encuentran estas escenas ingenuas de quien nos puede enseñar tantas cosas. Quizá, amigo lector, quieras hacer algún día el ejercicio de los Dolores y Gozos de San José en el camino de la Ermita de Torreciudad.

      * * *

      Al comienzo de cada uno de los siete Dolores y Gozos ponemos el ejercicio tradicional del venerable