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Versos
sobre
Hormiguitas
Juan Moisés de la Serna
Editorial Tektime
2020
“Versos sobre Hormiguitas”
Escrito por Juan Moisés de la Serna
1ª edición: marzo 2020
© Juan Moisés de la Serna, 2020
© Ediciones Tektime, 2020
Todos los derechos reservados
Distribuido por Tektime
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Prólogo
Un día de lluvia hacía
y no podía salir
en el hormiguero estaba
y yo pasé por allí.
Sentada en aquel banco
me puse a descansar
y de pronto en el zapato
me la vine a encontrar.
La miré con atención
algo de ella me extrañó
y al volver a mirar
la hormiga me sonrió.
¡No me lo podía creer!
estaría yo soñando
pero lo volvió a hacer
y se quedó esperando.
AMOR
Dedicado a mis padres
Contenido
1. LA HORMIGUITA SONRISITAS7
2. DOS HORMIGUITAS AMIGAS13
3. LA HORMIGUITA VOLADORA17
4. UNA HORMIGUITA VIAJERA26
5. LA HORMIGUITA COSTIPADA32
6. LA HORMIGUITA FRIOLERA37
7. LA HORMIGUITA DORMILONA42
8. LA HORMIGUITA SALTARINA47
9. UNA HORMIGUITA HAMBRIENTA50
10. OTRA HORMIGUITA FRIOLERA55
11. LA HORMIGUITA NAVEGANTE59
12. LA HORMIGUITA PRUDENTE65
13. DOS HORMIGUITAS AMIGAS74
14. LAS HORMIGUITAS REVUELTAS80
15. LA HORMIGUITA EMPAPADA82
16. LA HORMIGUITA Y EL GATO85
17. LA HORMIGUITA INVENTORA92
18. LA HORMIGUITA VOLADORA96
19. LA HORMIGUITA CURIOSA98
1. LA HORMIGUITA SONRISITAS
Un día de lluvia hacía
y no podía salir
en el hormiguero estaba
y yo pasé por allí.
Sentada en aquel banco
me puse a descansar
y de pronto en el zapato
me la vine a encontrar.
La miré con atención
algo de ella me extrañó
y al volver a mirar
la hormiga me sonrió.
¡No me lo podía creer!
estaría yo soñando
pero lo volvió a hacer
y se quedó esperando.
Muy quietecita estaba
en lo alto del zapato
y yo allí la miraba
y así pasé un buen rato.
Estando ya más tranquila
con el dedo la cogí
y me la puse en la mano
y yo también sonreí.
―¡No me vayas a aplastar!
―al pronto yo escuché
no me lo podía creer
y muy fija la miré.
―Sí, es que tú eres grande
y hasta me puedes matar
y yo que soy pequeñita
sólo quiero pasear.
―¿Es cierto estás hablando?
pues te puedo escuchar
estate aquí tranquila
que no te voy a dañar.
»Pero dime cómo es
que tú me puedes hablar
las hormiguitas no hablan
seguro que no es real.
―Mira si quieres te digo
algo para que tú sepas
pero mejor ven conmigo
y obtendrás más respuesta.
»Pues veo que eres curiosa
y te quieres enterar
por qué una hormiga habla
y te lo quiero mostrar.
Con ella sobre mi mano
hacia allí me dirigí
donde ella me indicaba
ahora te lo digo a ti.
El aspersor se paró
el agua ya no caía
y de llover ya dejó
eso la hormiga creía.
―Ahora verás salir
a todas mis hermanitas
que van a buscar comida
y se ponen en filita.
Yo miré atentamente
donde ella me indicaba
y al pronto apareció
una así asomaba.
Salió con mucho cuidado
lentamente apareció
y fuera del agujero
y a otra le precedió.
Al ratito eran muchas
las que allí se veían
y una