DJ Cat en la Discoteca. Max Marshall

música latía en la Palma de Late night club, Antonio, un determinado musical de gato, bailaban con alegría desenfrenada, junto con los gritos de la multitud. Sus movimientos eran llenos de pasión, y su espíritu se elevó entre las melodías que le rodeaban. Sin embargo, el destino tenía otros planes para nuestro valiente amigo felino.

      De repente, una voz familiar cortar a través de la música-fue la áspera bulldog guardia de Aser. Reconocimiento brilló en Aser los ojos cuando vio a Antonio de nuevo, el mismo gato que había expulsado del club anterior. Con un gruñido de desaprobación, Asher se acercó a Antonio y, sin dudarlo un segundo, le agarró por el cuello y lo llevó a cabo en el club de nuevo.

      Antonio del corazón se hundió como él se encontró de nuevo en la acera, el sonido de la música desvaneciendo en la distancia detrás de él. Desalentado, pero no derrotado, él vio que las puertas del club de cierre, cierre con él de nuevo. Una chispa de determinación brilló en sus ojos de esmeraldas, como él silenciosamente se comprometió a demostrar su valía y de volver un día a la Palma Beats club nocturno.

      Con el corazón en un puño, Antonio dejó el club y en su camino de regreso a casa, patas llevarlo con una solemne marcha. A pesar del revés, un fuego ardía dentro de él, alimentando su determinación para mostrar al mundo su verdadero talento y amor por la música. Mientras caminaba, le susurró a sí mismo y a cualquiera que quisiera escucharlo, que promete un regreso triunfal a su club, donde todo el mundo estaría de honor y le aplaudo.

      Capítulo 5: El deseo de volver al club

      Antonio volvía a casa, con la mente llena de los ritmos pausados de música de la Palma Beats club nocturno. A pesar de ser expulsado una vez más, una nueva determinación floreció en el musical de cat. En el fondo, él sabía que su lugar era en este club, con el baile de los visitantes y por compartir su amor de la música con todo el mundo.

      Acostado en su cómoda cama, rodeado por el silencio de la noche, Antonio considera que su siguiente paso. El pensamiento de que él no iba a ser admitidos en el club debido a las duras guardias pesaba sobre él. Pero entonces, una chispa de inspiración encendió en él – ¿y si él podía crear música a sí mismo? Lo que si que podría convertirse en un DJ y crear melodías que iba a hacer bailar a todos, incluso a sí mismo?

      Impulsado por la determinación, Antonio decidió aprender el arte de hacer música y DJ habilidades. Su gran felino de la audiencia, atentos a cada nota y batir, servirá como una guía para él en este nuevo proyecto. Se imaginó creación de pistas que resuenan en el alma de todos los que escuchaban, los llevo a la pista de baile en un hipnotizante trance.

      La idea lleno de Antonio con un nuevo sentido de la emoción y propósito. Se imaginó a sí mismo de pie detrás de las cajas de resonancia y de hilado de melodías que encendería una discoteca con energía y pasión. El gato del corazón latir al ritmo de sus sueños, le empuja hacia un futuro donde él podría no sólo de la danza a la música, sino también a su creador.

      Cuando los primeros rayos del amanecer penetrado en la ventana, Antonio cayó en un sueño tranquilo, con la mente llena de visiones de un viaje musical a la espera de su desarrollo. Con un ardiente deseo de escribir música para discotecas, el intrépido gato fijado su interés en nuevos horizontes, listo para perseguir sus sueños con la firme determinación.

      Capítulo 6: La Escuela De Música

      A la mañana siguiente, el sol teñía el cielo de oro como Antonio ansiosamente se dirigió a la escuela de música. Su corazón latía en la anticipación, llena de promesas de aprendizaje y crecimiento. Cuando llegó, las puertas de la escuela estaban abiertas, invitando a él en el mundo de descubrimiento musical.

      La emoción burbujea dentro de él como entró, el aire zumbando con el susurro de los instrumentos y el eco de las melodías que aún no había nacido. Antonio llegó primero, sus ojos se ampliaron con sorpresa cuando vio la gran sala de música. Él trató de asimilar cada uno de los bits de conocimiento tan pronto como sea posible, tratando de comenzar su camino de convertirse en un maestro.

      Fue en este momento que una cálida y suave voz lo llamó:

      – Hola, soy Sofía, su maestro. Parece que usted no puede esperar para empezar! El resto de los alumnos llegarán pronto, pero por ahora vamos a explorar el mundo de la música juntos.

      Sofía tomó Antonio alrededor de la escuela, que le presentó a las diversas herramientas y explicar la magia detrás de cada uno de ellos. Antonio miraba con mucha atención como otros músicos comenzaron a filtrarse en el aula, cada uno con su propio instrumento y una chispa de la pasión en sus ojos.

      En el primer día, Antonio eligió para observar y absorber, absorber la sinfonía de sonidos y gráciles movimientos de sus compañeros de clase mientras se juega. Escuchó atentamente, el estudio de cómo sus dedos bailaban sobre las cadenas, las claves y los trastes, y las emociones que se derrama con cada nota.