ha ayudado al vicepresidente de una empresa a conseguir que su gente escuche, apoye y ejecute adecuadamente sus planes. Lo guiaron para que admitiera en el consejo de administración que debía asumir toda la responsabilidad de los problemas que se presentaban en su departamento.
Después de que el vicepresidente ha puesto su ego y su agenda personal a un lado, fue capaz de ver lo que estaba mal en el panorama. Esto lo guió a elaborar una lista de medidas correctivas para que ya no hubiera problemas con la ejecución. Aunque hubo momentos en los que volvió a estar a la defensiva, el hecho de mantener la mirada en los objetivos le hizo volver rápidamente a la extrema propiedad.
No hay malos equipos, solo malos líderes
Конец ознакомительного фрагмента.
Текст предоставлен ООО «ЛитРес».
Прочитайте эту книгу целиком, купив полную легальную версию на ЛитРес.
Безопасно оплатить книгу можно банковской картой Visa, MasterCard, Maestro, со счета мобильного телефона, с платежного терминала, в салоне МТС или Связной, через PayPal, WebMoney, Яндекс.Деньги, QIWI Кошелек, бонусными картами или другим удобным Вам способом.