subcomisario de policía, Ed Nolan. Estoy a cargo de la recapitulación de los hechos aquí. Por favor, pasen adelante.
Él las condujo hacia el interior, y Chloe descubrió que la casa era más grande de lo que aparentaba desde fuera. El vestíbulo era casi del mismo tamaño que la sala de estar del apartamento de Chloe y los techos tenían una altura de casi tres metros y medio por encima de sus cabezas. Parecía que nadie vivía allí hacía mucho tiempo, eso le daba a Chloe una mala espina.
–Entonces, ¿qué ha pasado aquí? ―preguntó Chloe―. Todo lo que nos han dicho es que debemos verificar si está conectado con un caso del año pasado.
–¿Qué caso sería ese? ―preguntó Nolan.
–Tres muertes por estrangulación a unos ocho kilómetros de aquí ―contestó Rhodes―. Las víctimas fueron todas mujeres de entre cuarenta y sesenta años
–Sí, creo que podremos descartar la conexión fácilmente.
–¿Por qué lo dice? ―preguntó Chloe.
–Obviamente, el cuerpo ya no está aquí, pero puedo mostrarles las fotografías. La causa de muerte de la señora Fairchild no fue estrangulamiento, a pesar de que también fue estrangulada. Lo más probable es que la causa haya sido el corte en su garganta… Pero es un corte extraño que nunca he visto antes.
Él las condujo hasta la cocina y tomó una carpeta que se encontraba sobre la barra. La usó para señalar las escaleras mientras decía―: La limpiadora de la casa descubrió el cuerpo en el dormitorio principal del segundo piso. Ella subió mientras el fregadero del cuarto de servicio se llenaba de agua. Obviamente, se distrajo bastante al encontrar el cuerpo y el agua del fregadero se desbordó.
–Echémosle un vistazo al cuarto ―dijo Chloe.
Nolan asintió y tomó la delantera. Mientras caminaban por la casa, Chloe percibió que todo estaba impecable, o la limpiadora era increíblemente buena o su trabajo en la casa de los Fairchild simplemente era mantener la casa limpia.
El vestíbulo del segundo piso era tan impresionante como el del primer piso. Había una biblioteca empotrada en la pared al final del pasillo. A lo largo del vestíbulo, se encontraban cuatro habitaciones, dos de las cuales eran dormitorios, la tercera era un baño secundario y la cuarta era una oficina.
Nolan las condujo hacia el dormitorio principal. Aunque el cuerpo claramente ya no estaba en la escena, Chloe vio que nadie había quitado las sábanas desde el asesinato.
–¿Esta habitación está exactamente igual desde que fue descubierto el cuerpo? ―preguntó Chloe.
–Lo único que han movido fue el cuerpo ―confirmó Nolan.
–¿Podría explicarnos todos los detalles?
Él lo hizo mientras Chloe inspeccionaba la habitación con Rhodes. Ella escuchó cada detalle, tratando de imaginarse cómo había sucedido todo, cómo habían transcurrido los acontecimientos en el dormitorio en el que se encontraba.
–Rosa Ramírez, la limpiadora, descubrió el cuerpo cerca de las once y media de la mañana. La policía llegó a la escena del crimen justo antes del mediodía. Yo fui parte del primer grupo que respondió a la llamada, así que pude ver todo lo que se encuentra en este archivo con mis propios ojos. A Jessie Fairchild le cortaron la garganta, pero fue de una manera muy extraña y perturbadora. Aunque sí creemos que hubo un estrangulamiento, creemos que el corte en la garganta fue hecho con un gran anillo de diamante.
–¿Está seguro de ello?
–Sí. Los forenses lo confirmaron ayer a última hora. Estaba cubierto de sangre y las líneas irregulares del corte coinciden con el diamante. Si les sirve de algo, el marido no está seguro si el anillo le pertenecía a su esposa.
–Un momento ―dijo Rhodes―. No es posible que un anillo de diamantes pueda ser lo suficientemente grande como para hacer un corte tan profundo.
–Nosotros pensamos lo mismo ―dijo Nolan―. Pero el ángulo del corte permitió que llegara a una arteria vital y también perforó la tráquea.
–¿Hay algún móvil? ―preguntó Chloe.
–Al principio asumimos que fue una allanamiento de morada o un robo. Estoy seguro de que han percibido que este lugar está repleto de cosas valiosas―. Él apuntó hacia el vestidor que estaba del lado izquierdo de la habitación y añadió―: Hay una cantidad obscena de joyas allí. Cuando hablamos con el marido, él señaló un collar que valía cerca de treinta mil dólares. Y ni siquiera estaba en una caja fuerte. El collar estaba dentro de una vieja caja de joyas. También hay dos coches en el garaje, uno de ellos vale lo mismo que tres años de mi salario. Hay una gran piscina en el patio trasero y un jacuzzi. Me quedó corto si digo que los Fairchild estaban nadando en dinero. Y como ellos son nuevos en el vecindario, asumimos que se trataba de un robo. Pero no hemos encontrado evidencia de ello.
–¿Se llevaron algo? ―preguntó Chloe.
–Le pedimos al esposo que echara un vistazo, pero no sirvió de nada. Él dijo que no se daba cuenta si algo faltaba. Claro que estaba bastante perturbado por el hecho de que su esposa había sido asesinada recientemente, así que no sabemos qué tan profunda fue su búsqueda…
–Usted ha dicho que piensa que sufrió algún tipo de estrangulamiento ―dijo Rhodes―. ¿Sabe con qué pudo haber sido estrangulada?
–No lo sabemos con certeza, pero creemos que fue con una estola de zorro, algo como una bufanda de piel de zorro. Lo encontramos escondido detrás de la cama. Los forenses dijeron que están bastantes seguro de que ambos extremos recientemente han sido estirados y agarrados con fuerza. El marido tampoco recuerda la última vez que la vio usando algo así.
–¿Qué puede decirnos sobre los Fairchild? ―preguntó Chloe mientras se acercaba a la cama para mirar más de cerca las manchas de sangre seca en las sábanas.
–Eran nuevos en el pueblo. Se habían mudado hacía cinco semanas. Aún hay algunas cajas en el garaje sin desempacar. Mark, el esposo, es un banquero importante… Trabaja con algo de finanzas y acciones. Jessie Fairchild trabajaba con redes sociales… Era una especie de influencer de celebridades de poca monta. Se ocupaba de cosas como Instagram y Facebook. Antes vivían en Boston… El marido dijo que se mudaron porque se habían cansado de los atascos de la gran ciudad.
–¿Dónde está el esposo ahora? ―preguntó Chloe.
–Fue a una cabaña en las montañas con su hermano. De hecho, se fue esta mañana. Él está destrozado. Cada uno acepta la muerte de la forma que puede, lo sé. Pero este hombre… Lo vi derrumbarse y apagarse. Fue de lo más horrible que he visto
–Me imagino que no encontraron ninguna huella dactilar, ¿no? ―preguntó Chloe.
–Ninguna. Lo que sí encontramos fue una hebra de cabello en la estola de zorro. Era de color rubio, y Jessie Fairchild era morocha. La están analizando mientras hablamos. Deberíamos tener los resultados pronto.
Chloe se tomó un segundo para procesar toda la información. Como había un gran indicador de un tipo de estrangulamiento, no podía descartar la conexión con los asesinato del año pasado. Pero el corte con el anillo de diamantes le hacía creer que esto se trataba de algo nuevo, de algo diferente. Tomó la carpeta y casi la abre en el acto para comenzar a analizarla.
–Ha dicho que usted estaba a cargo de atar los cabos sueltos, ¿verdad?
–Sí.
–¿Podemos seguirlo hasta su precinto? Quisiera montar una estación de trabajo allí.
–¿Entonces creen que está relacionado con las estrangulaciones del año pasado? ―preguntó Nolan. Era evidente que no se lo esperaba.
–No lo sé ―dijo Chloe―. Pero lo que sé es que una mujer fue asesinada en su propia casa y que actualmente no hay ningún sospechoso. Así que pongámonos a trabajar.
Nolan sonrió ante su actitud positiva. Asintió con la cabeza y se dirigió hacia la puerta del dormitorio para salir al pasillo y dijo―: