Leadership in Western Law”. American Journal of Comparative Law 42, (1994): 195; Wolfgang Wiegand, “Americanization of Law: Reception or Convergence?”, en Legal Culture and the Legal Profession, editado por Lawrence M. Friedman y Harry N. Scheiber (Boulder: Westview Press, 1996), 137.
44Evans-Prichard, History of Anthropological Thought; Rubiés, “Hugo Grotius’s Dissertation”; Peters y Schwenke, “Comparative Law beyond Post-Modernism”; David y Brierley, Major Legal Systems.
45David y Brierley, Major Legal Systems; Esquirol, “The Fictions of Latin American Law”; Demleitner, “Combating Legal Ethnocentrism”; Bonilla Maldonado, “La economía política”; Sacco, “Legal Formants”, 8; Rubiés, “Hugo Grotius’s Dissertation”.
46Frankenberg, “Critical Comparisons”, 412-413; Zweigert y Kötz, An Introduction to Comparative Law, 52-62.
47Véanse por ejemplo: Hugo Grotius, On the Origin of the Native Races of America, traducido por Edmund Goldsmid (Londres: Bibliotheca Curiosa, 1884); y Hugo Grotius, Commentary on the Law of Prize and Booty (Indianapolis: Liberty Fund, 2006).
48Barón de Montesquieu, El espíritu de las leyes, traducido al español por Siro García del Mazo (Madrid: Librería general de Victoriano Suárez, 1906).
49Frederick Pollock, “The History of Comparative Jurisprudence”. Journal of the Society of Comparative Legislation 5, n.° 1 (1903): 74, 83: “[Montesquieu] es el gran precursor de la investigación histórica y comparada moderna. Si dudamos en llamarlo el fundador, es solo porque ni sus materiales ni sus métodos de ejecución fueron los adecuados para hacer justicia a sus ideas”. [...] Frederick Pollock, “The History of Comparative Jurisprudence”. Journal of the Society of Comparative Legislation 5, n.° 1 (1903): 74, 83: “[Montesquieu] es el gran precursor de la investigación histórica y comparada moderna. Si dudamos en llamarlo el fundador, es solo porque ni sus materiales ni sus métodos de ejecución fueron los adecuados para hacer justicia a sus ideas”. Otto Kahn Freund, “On Uses and Misuses of Comparative Law”. The Modern Law Review 37, n.° 1 (1974): 6: “[Montesquieu es] el primero de todos los abogados comparatistas”. Harold C. Gutteridge, Comparative Law: An Introduction to the Comparative Method of Legal Study and Research (Cambridge: Cambridge University Press, 1949), 12; Annelise Riles, Introducción a Rethinking the Masters of Comparative Law (Oxford: Hart Publishing, 2001), 2: “Cada uno de los ensayos en este volumen enfrenta estas preguntas haciendo referencia a la vida y obra de una figura ejemplar de un momento particular en la disciplina [el derecho comparado]. Estos incluyen su prehistoria (Bodin, Montesquieu) [...]”. William W Park y Thomas W Walsh, “The Uses of Comparative Arbitration Law”. Arbitration International 24, n.° 4 (2008): 615: “El padre del derecho comparado moderno, Charles-Louis de Secondat (más conocido como Montesquieu, autor de De l’esprit des lois) alguna vez sugirió [...]”. Heike Hung, “Should We Compare Laws or Cultures?”. Bergen Journal of Criminal Law and Criminal Justice 5, n.° 1 (2017): 3: “Aunque Montesquieu, uno de los padres fundadores del derecho comparado, había allanado el camino para tales consideraciones [...]”. Lorenzo Zucca, “Montesquieu, Methodological Pluralism and Comparative Constitutional Law”. European Constitutional Law Review (2009): 481-500, 481: “El derecho constitucional comparado moderno comienza en Esfahan, la antigua capital de Irán [.] [donde tiene lugar parte de Las cartas persas]”. Shrabana Chattopadhyay, “Scope of Comparative Constitutional Law in Legal Studies”. Commonwealth Law Review Journal 5, (2019): 428: “Actualmente, Montesquieu es considerado como el ‘padre’ del derecho comparado”. Michel Rosenfeld y András Sajó, Introducción a The Oxford Handbook of Comparative Constitutional Law (Oxford: Oxford University Press, 2012), 3: “El empirismo de Montesquieu en el Espíritu de las leyes es quizás el ejemplo más notorio de comparación histórica; continua la tradición de usar materiales comparados para generar conclusiones normativas, en este caso, culminando con el establecimiento de los fundamentos del constitucionalismo moderno”. Roberto Scarciglia, “A Brief History of Legal Comparison: A Lesson from the Ancient to Post-Modern Times”. Beijing Law Review 6, n.° 4 (2015): 302: “Sin embargo, Charles de Secondat, barón de Montesquieu (1689-1755) fue el primero en hacer girar el punto de vista comparado hacia una perspectiva externa. L’Esprit des Lois, editado en Ginebra en 1748, y luego traducido y reeditado en varias ocasiones, ejerció una influencia considerable en Europa y los Estados Unidos. Este libro fue ‘indiscutiblemente, un momento decisivo, si no el momento decisivo, en la historia del derecho comparado’”. La conexión entre los hechos sociales y la geografía, así como el uso del método comparativo por parte de Montesquieu, se ha entendido como un hecho fundamental para el surgimiento de la sociología y el derecho comparado. Ran Hirschl, “Montesquieu and the Renaissance of Comparative Public Law”, en Montesquieu and his Legacy, editado por Rebecca Kingston (Nueva York: SUNY Press, 2009): “La publicación del monumental El espíritu de las leyes de Montesquieu (1748) es, sin lugar a dudas, un momento decisivo, si no el momento decisivo, en la historia del derecho comparado. El enfoque fundacional de Montesquieu de desentrañar los vínculos entre el derecho y la sociedad en todas las culturas ha inspirado una impresionante tradición de investigación comparativa. También ha generado una genealogía curiosamente diferente en las ciencias sociales y en la investigación jurídica”. Launay, “Montesquieu: The Specter”, 22-23: “Emile Durkheim, en su disertación en latín de 1893 sobre la contribución de Montesquieu al surgimiento de las ciencias sociales, afirmó que ‘fue él quien, en El espíritu de las leyes, estableció los principios de la nueva ciencia [la sociología]’. Este punto de vista, que Montesquieu no fue simplemente un precursor, sino literalmente el fundador de la sociología moderna, ha sido repetido una y otra vez, especialmente por Louis Althusser, Raymond Aron y E. E. Evans-Pritchard. Los aspectos sociológicos del libro son enumerados sistemáticamente por Evans-Pritchard: ‘[...] la insistencia en el estudio científico y comparativo de la sociedad, el uso de datos de tantas sociedades como sea posible; la inclusión de sociedades primitivas como ejemplos de ciertos tipos de sistemas sociales; la necesidad de comenzar con una clasificación o taxonomía de las sociedades que esté basada en criterios significativos [.] la idea de interconsistencia entre hechos sociales (sistemas sociales), [la idea de] que cualquier hecho social solo puede entenderse por referencia a otros hechos sociales y otras condiciones ambientales, como parte de un todo complejo; y la idea de que esta interconsistencia es de tipo funcional’”. David y Brierley, Major Legal Systems, 4: “Siguiendo a Montesquieu (1689-1755), a quien se ha llamado (no sin exagerar) el padre del derecho comparado, se puso de moda en el siglo XIX, a la luz de la teoría darwiniana y las ideas del progreso comunes en esa época, trazar vastos cuadros históricofilosóficos de la evolución del derecho”. David S. Clark, “History of Comparative Law and Society”, en Comparative Law and Society, editado por David S. Clark (Cheltenham: Edward Elgar Publishing, 2012), 12: “Además de la contribución de Montesquieu al derecho comparado, los académicos sociolegales también lo ven a menudo como el padre de su disciplina”. Suzanne Corcoran, “Comparative Corporate Law Research Methodology”. Canberra Law Review 3, (1996): 54: “Montesquieu es generalmente considerado como el padre del derecho comparado”. William Twinning, “Globalisation and Legal Scholarship”, (documento utilizado en la Montesquieu Lecture, 2009), 59: “Montesquieu, precursor de la sociología del derecho y del relativismo cultural [...]”. Brian C. J. Singer, Montesquieu and the Discovery of the Social (Londres: Palgrave Macmillan, 2013), XV: “En el intento por comprender el descubrimiento de lo social, este trabajo se centra en De l’Espnt des lois de Montesquieu. No soy el primero en afirmar que Montesquieu es el primer sociólogo, científico social o teórico social. Hay una larga lista de autores, en su mayoría franceses, que han hecho esta afirmación, incluidas figuras tan dispares como Émile Durkheim, Louis Althusser y Raymond Aron”. Balázs Fekete, “The Unknown Montesquieu. An Essay on Montesquieu’s Intellectual Background”. Iustum Aequum Salutare 1, (2009): 151-159, 152: “Por último, debe mencionarse que el derecho comparado también reconoce a Montesquieu como uno de sus predecesores más importantes. Aunque Montesquieu no creó una teoría comparativa coherente, hizo un uso revolucionario del método comparativo.