que fuimos convocados para participar en la guerra, hasta nuestro regreso, seguramente nos hubiera sido menos trabajoso y más rápido de realizar. Pensamos que esto solo nos traería el recuerdo de lo hecho y con quienes lo hicimos. Nuestra intención ha sido describir lo que hicimos, pero además nos hemos esforzado para proporcionar la información, que consideramos necesaria, para poder comprender de la mejor forma posible, los hechos ocurridos antes, durante y después de la guerra.
Nuestra tarea está también orientada a proporcionarles a los camaradas VGM, a sus familiares, a los militares, y al lector en general, una descripción lo mejor documentada posible respecto de ciertos aspectos históricos y hechos ocurridos, que consideramos muy importantes, para que dicho trabajo pueda ser utilizado de manera confiable, en las charlas, conversaciones, exposiciones, etc., que alguien pudiese tener en el ámbito que fuere.
Desarrollar este trabajo no ha sido tarea fácil, tuvimos que recurrir a muchos documentos oficiales, públicos y también reservados; se tuvieron en cuenta los testimonios escritos de VGM fallecidos y por supuesto el relato verbal y escrito de quienes están vivos y participaron. Hubo que confrontar dichos documentos y comentarios, para acercarnos con el mayor grado de certeza a la verdad. En el aspecto militar, en virtud del tiempo transcurrido, fue necesario consultar, con oficiales, suboficiales y soldados, diferentes versiones de un mismo hecho, para poder dilucidarlos, y hacer un esfuerzo para recordar muchas tareas y participantes. Deseamos aclarar que hay camaradas VGM a quienes se les solicitó no solo participar en la confección, sino que aportaran también algún relato o comentario escrito para ser agregado. Los que aquí figuran son los que quisieron hacerlo y lógicamente comprendemos que quienes no participaron habrán tenido sus válidas razones personales.
Con relación a la participación de nuestra Compañía en la guerra, es posible que alguien o una fracción militar integrante de esta haya realizado una tarea o producido un hecho, y que no figure aquí. Si se omitió algún hecho o se dejó de mencionar a alguien, lo hicimos solo por desconocimiento y sin ninguna otra intención. La decisión de comenzar a escribir este libro fue difundida con la mayor amplitud posible, hace aproximadamente 3 años. Para poder concretar la tarea, al principio nos convocamos muchos, y luego solo quedamos unos pocos; los que participamos, hemos tratado de hacerlo con la mayor dedicación y seriedad posibles.
La estructura de este libro contiene, en la parte militar, el relato y los comentarios de quienes participaron en la guerra, y en cuanto a los distintos aspectos tratados en los ámbitos político, económico, psicosocial y cultural, contiene información y comentarios obtenidos de diversas fuentes de información, las que fueron seleccionadas por considerarlas lo suficientemente confiables. En la idea de facilitarle al lector una mejor comprensión, hemos agrupado lo escrito de acuerdo a lo siguiente: la Parte I, referida a “El contexto histórico político del conflicto. La guerra y los apoyos Recibidos. La Parte II, referida a “La Compañía de Ingenieros de Combate 601. Su actuación, el olvido y los veteranos de guerra”. Y la Parte III, referida a “Lo acontecido después de la guerra y la actualidad”.
Esperamos que este libro pueda satisfacer las expectativas de nuestros camaradas VGM y de cualquier otro lector, que aspire a tener una visión más amplia y un enfoque distinto sobre algunos aspectos de la guerra y del importante y siempre vigente conflicto por la soberanía de nuestras islas Malvinas, Georgias y Sándwich del Sur y de sus respectivos espacios marítimos circundantes.
PARTE I
EL CONTEXTO HISTÓRICO POLÍTICO DEL CONFLICTO. LA GUERRA Y LOS APOYOS RECIBIDOS
CAPÍTULO I
RESEÑA HISTÓRICA DE MALVINAS
Mantener viva la memoria y la reivindicación legítima e irrenunciable de nuestros derechos soberanos sobre las islas Malvinas e islas del Atlántico Sur es tarea y responsabilidad de todos.
Por ello también, además de lo expresado, esta premisa es una motivación importante para escribir nuestro libro.
No pretendemos efectuar un análisis profundo de los fundamentos que avalan nuestros derechos sobre las Islas, porque no es el motivo principal de nuestro trabajo, pero sí queremos difundir a modo de síntesis dichos fundamentos, para que el lector simplemente los recuerde y tenga también una fuente y referencias fidedignas, cuando desee consultar aspectos esenciales que están muy bien documentados.
El pasado es vital para conocer, entender, interpretar y resignificar Malvinas. El reclamo soberano argentino se basa en antecedentes históricos, políticos, geográficos y legales, absolutamente sólidos e irrefutables. Ellos avalan nuestro posicionamiento frente a la comunidad internacional y los reclamos que durante décadas se han realizado y se realizan en organismos supranacionales como la Organización de las Naciones Unidas y la Organización de Estados Americanos, entre otros.
La importancia geopolítica, económica y estratégica de las islas es evidente, como también lo son nuestros derechos legítimos sobre ellas. Por eso la Cuestión Malvinas no debe abordarse con una mirada solo al pasado sino, fundamentalmente, hacia el futuro. Malvinas y las islas del Atlántico Sur constituyen enclaves marítimos estratégicos para la Argentina y no deben ser consideradas ajenas al territorio nacional.
Si alguien se interesa por profundizar la historia de nuestros derechos, entre las muchas publicaciones existentes, recomendamos el trabajo realizado por la Comisión Especial que desarrolló de manera oficial la Compilación islas Malvinas, por encargo del Senado de la Nación.
Dicha compilación en su parte inicial expresa lo siguiente: Documentos históricos de la soberanía argentina: períodos colonial y nacional: “porque entendemos que es desde este, nuestro presente, que debemos asumir la responsabilidad de mantener vivo el reclamo, de realizar todos los aportes que estén a nuestro alcance y de generar herramientas para que la sociedad argentina conozca y los elementos que sustentan la soberanía sobre las islas Malvinas. Es necesario mantener viva la Memoria de Malvinas en las escuelas, en los medios de comunicación, en lo cotidiano. Este creemos que fue el objetivo final de dicha recopilación, la que incluye cartas, oficios, notas, comunicaciones, relatos de viajes, informes, fragmentos de diarios personales, reales cédulas, leyes, decretos, nombramientos, proclamas, planes de colonización, mapas y planos, conservados en el principal repositorio del país”.
Desde el instrumento por el cual Louis Antoine de Bougainville restituyó al rey de España, Carlos III, las islas que nombró y que había ocupado ilegalmente; el nombramiento de Felipe Ruiz Puente como primer gobernador; la expulsión de los ingleses a principios de la década de 1770; el estado de la colonia durante la administración española y los viajes de exploración; hasta la toma de posesión del archipiélago, en nombre del gobierno de las Provincias Unidas del Río de la Plata, por David Jewett; la llegada del gobernador Pablo Areguatí; el decreto del 10 de junio de 1829, instituyendo la Comandancia Política y Militar de Malvinas; los planes de colonización de Luis Vernet y su proclama al tomar posesión del cargo; el parcial del diario de su esposa, María Sáenz; el ataque de la corbeta de guerra norteamericana Lexington; y, finalmente, la usurpación inglesa, documentada en la intimación del comandante de la corbeta S. M. B Clío, John James Onslow, junto al relato de los hechos que ocurrieron en esos primeros días de enero de 1833.
Asimismo, se incorporan una serie de cartas inéditas recuperadas para el Patrimonio Cultural e Histórico de la Nación, entre el entonces gobernador de Buenos Aires y quien estaba a cargo de la Gobernación de Malvinas, constituyéndose estas en un elemento más del corpus documental que sustenta el reclamo soberano.
La primera de ellas escrita en Buenos Aires, el 18 de febrero de 1767, redactada por el gobernador de Buenos Aires Francisco de Bucareli y Ursúa a Felipe Ruiz Puente, primer gobernador de las islas Malvinas. En ella se consigna el envío de ocho prisioneros “a ración, y sin sueldo” como mano de obra para la flamante gobernación de Malvinas, creada cuatro meses antes por orden de Carlos III. La segunda escrita en Malvinas el 25 de abril de 1767. Carta dirigida por el gobernador de las islas, Felipe Ruiz Puente al gobernador de Buenos Aires Francisco de Bucareli y Ursúa. En ella, se explica la necesidad de levantar una capilla en Malvinas “para todo el pueblo”, pues solo se cuenta con una muy precaria, con una imagen de San Luis (debe tenerse en cuenta que Puerto Soledad