y, sobre todo, coherencia, para optimizar de este modo los pocos recursos de que habitualmente se dispone, pudiendo desarrollar un programa de prioridades que, según las necesidades puntuales y las características propias de la institución museística, dé pie a coexistir diversas opciones pero tomando una como eje vertebrador del conjunto. Albert Esteve es profesor en la Escuela Superior de Diseño y Oficios Artísticos de Valencia. Ha sido promotor y responsable de un buen número de talleres didácticos que se han llevado a cabo en diferentes instituciones museísticas valencianas.
El propósito del texto de la profesora Lidón Beltrán Mir es aportar algunas razones que inciten a desarrollar proyectos de educación artística en centros de arte contemporáneo, por considerar que estos espacios son, en el momento actual, lugares idóneos para una pedagogía reconstruccionista a través del arte (así llamada por Ana Mae Barbosa y otros educadores). Para ello se remite a ciertos conceptos que han ido sucediéndose, o superponiéndose, en la historia de la educación artística, y los confronta con las miradas que nos aportan las nuevas concepciones educativas, la revisión de eternos conceptos en torno al arte y las tendencias de la nueva museología –con una especial atención a los centros de arte contemporáneo– con el fin de poder apuntar hacia posibles salidas alternativas superando la visión pesimista que nos puede haber transmitido la problemática de la propia área de educación artística y los déficits socioculturales que nos aquejan. Lidón Beltrán Mir estudió pintura en la Escuela Superior de Bellas Artes de Valencia (19731975). Agregada y catedrática de Bachillerato. Fue coordinadora nacional del Área Artística del MEC (1984-85). Doctora en Bellas Artes por la Universidad de Salamanca (1988), es titular de universidad en la Facultad de Bellas Artes de Salamanca desde 1989. Entre sus líneas de investigación actuales destacan: Aptitudes artísticas en centros de arte contemporáneo y Recursos para un aprendizaje significativo a través del arte.
El texto que nos propone Pepe Romero titulado «Instrumentos para elaborar la estructura de una comunicación de arte contemporáneo. Las conferencias dinámicas del IVAM» parte de su ya dilatada experiencia como orientador en visitas guiadas a algunas de las exposiciones organizadas en el IVAM (Instituto Valenciano de Arte Moderno). Partiendo de una metáfora extraída de una escena de la película Smoke, basada en una historia de Paul Auster, el autor nos ilustra sobre ciertos aspectos relacionados con la percepción en la experiencia estética. En primer lugar, que una mirada atenta (que implica gran esfuerzo y actividad por nuestra parte) es difícil e inusual, ya que tanto la visita a los museos como a las galerías está llena de «contaminaciones y de ruido». También se incide en aspectos como la iluminación en las salas, ya que constituye un elemento que repercutirá en la percepción de la obra, teniendo en cuenta que pocas veces se plantea la creación de una atmósfera especial que ayude a separar ese ámbito perceptivo de la sala respecto del exterior. Con todo ello, en palabras del autor, «la suposición de la existencia de una fuerte impregnación estética y de un intenso diálogo con la obra plástica expuesta que suspenda el tiempo en un paréntesis en el que se olvida el acontecer cotidiano, es prácticamente una utopía que muestra el grado de autismo de nuestra sociedad». A partir de aquí, se nos sugiere que «comprender» ha de ser el primer paso en el proceso de comunicación entre la obra y el receptor, y para darlo es necesario una disposición activa por parte de este último. Una serie de referencias a autores a las cuales se integra un conjunto de situaciones expositivas y visitas comentadas por el propio autor nos acercan a su visión de este hecho de comprensión y goce estético. Pepe Romero es profesor en la Facultad de Bellas Artes de la Universitat Politècnica de València.
En opinión de Juan Carlos Arañó, la educación artística de nuestra época debe ir dirigida a que las personas sean capaces de afrontar con mayores posibilidades y garantías las evoluciones y progresos humanos. Su propuesta parte del rechazo a una educación artística basada únicamente en enfoques expresivos, productivos e instrumentales. Según Arañó, la educación artística ha de partir de una idea de arte amplia y general, inscrita en contenidos de cultura y, sobretodo, fundamentada en una valoración sobre el proceso que da lugar al hecho artístico. Del mismo modo que podemos afirmar desde posiciones tradicionales que una persona está educada artísticamente cuando es capaz de expresar cualquier idea o pensamiento por medio de un procedimiento plástico o utilizando cualquier instrumento. En nuestra época, en la educación artística que reafirmamos, sería la persona capaz de comprender los fenómenos culturales (y especialmente los artísticos) que ocurrieron o suceden en su cultura y, por extensión y aplicación, estaría capacitada para afrontar la comprensión de otros fenómenos que suceden en el ámbito de esa cultura y también los de otras culturas. Juan Carlos Arañó es profesor e investigador en la Universidad de Sevilla, catedrático de educación artística en la Facultat de Bellas Artes.
En el texto de Ricard Huerta «Museo tipográfico urbano. La ciudad como un paisaje de letras» se nos propone la apertura del espacio museable hacia ámbitos o referentes próximos, más cercanos a las historias cotidianas del profesorado y del alumnado. A la prospección del espacio urbano como fuente de análisis, en consonancia con las perspectivas que ofrece la cultura visual, desde una vertiente más crítica y alentadora de lecturas nuevas. Teniendo en cuenta que tradicionalmente el espacio del museo ha creado una serie de expectativas e imposiciones entre los públicos más diversos, debido a su concepto espacial, la posibilidad de abrir el campo de acción a otros espacios genera nuevos intereses. La institución museística impone un encorsetamiento en numerosos aspectos, que en ocasiones la convierten en espacio inexpugnable para ciertos públicos. La observación y el aprovechamiento del espacio público como entidad museable, es decir, como portador de significados, pueden servir para desarrollar estrategias educativas, ubicándonos en un espacio abierto, cotidiano, próximo, exento de un mecanismo demasiado rígido o de unos límites impuestos. Se propone aquí la posibilidad de visitar la ciudad observando y analizando los elementos gráficos que atraen nuestro interés, especialmente los símbolos alfabéticos y las composiciones con letras que vemos en vallas, anuncios, tiendas, rótulos, grafitis, letreros, pantallas, señales y otros artefactos visuales, tanto si son publicitarios como de otra índole.
Esperamos con este volumen atender algunos de los intereses que se están generando desde las nuevas instancias museísticas, ya que resulta evidente el aumento que se ha verificado en las últimas décadas de espacios dedicados al arte, auténticos escaparates culturales de las políticas institucionales. Asumimos nuestra aportación como un elemento que enriquece el actual panorama editorial dedicado a la gestión y promoción de los centros de arte. Desde nuestra visión universitaria, y conscientes de la necesidad que se está generando entre los nuevos públicos, así como en relación a la oferta de servicios culturales, pretendemos ofrecer una reflexión y un análisis válidos para generar novedosos elementos de tensión que ayuden a elaborar discursos educativos mucho más acordes con la realidad. Es un trabajo que asumimos con la responsabilidad que ello supone y, desde luego, con la coherencia que merece.
Queremos agradecer asimismo tanto a Publicacions de la Universitat de València (PUV) como al Museu Valencià de la Il·lustració i de la Modernitat (MuVIM) la coedición de este volumen, iniciando una nueva línea de colaboración.
RICARD HUERTA Y ROMÀ DE LA CALLE
PRIMERA PARTE
SÍNTOMAS DE VITALIDAD, ESPACIOS EN CONSTRUCCIÓN E ICONOS MUTABLES
MUSEOS Y EDUCADORES: PERSPECTIVAS Y RETOS DE FUTURO
Roser Juanola y Anna Colomer
Universitat de Girona
En los últimos años, debido a las nuevas creaciones de museos y centros de interpretación, han proliferado las propuestas formativas dedicadas al ámbito de la educación en el museo, ya sea con cursos de master, postgrado o especialización, que han visto la luz por primera vez o se han consolidado en los últimos tiempos. Todas estas propuestas tienen en común dos aspectos: en primer lugar, la voluntad de dar relevancia a la función educativa del museo, fomentando su desarrollo; y en segundo lugar, la formación y profesionalización de los educadores de museos. En todas las propuestas formuladas –con no poca razón o motivo– se considera que sólo con la consolidación de estos dos objetivos se conseguirá que los educadores dejen de ser tomados como unos semiprofesionales