G. Gregory Haff

Principios del entrenamiento de la fuerza y del acondicionamiento físico NSCA (Color)


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       Los propioceptores son receptores sensitivos especializados que proporcionan al sistema nervioso central información necesaria para mantener el tono muscular y ejecutar movimientos complejos y coordinados.

       La propiocepción

      Los propioceptores son receptores sensitivos especializados, localizados en articulaciones, músculos y tendones. Como estos receptores son sensibles a la presión y a la tensión, transmiten información sobre la dinámica de los músculos a las partes conscientes y subconscientes del sistema nervioso central. El cerebro recibe así información sobre el sentido cinestésico y discrimina conscientemente la posición de partes del cuerpo respecto a la gravedad. Sin embargo, la mayor parte de esta información propioceptiva se procesa a niveles subconscientes de modo que no tenemos que dedicar actividad consciente alguna a mantener una postura o posición de partes del cuerpo.

       La producción de fuerza de un músculo varía con el cambio en la frecuencia de activación de unidades motoras individuales o con el cambio en el número de unidades motoras activadas.

       Husos musculares

      Los husos musculares son propioceptores compuestos por varias fibras musculares modificadas y envueltas en una vaina de tejido conjuntivo (figura 1.9). Estas fibras modificadas, llamadas fibras intrafusales, cursan paralelas a las fibras extrafusales normales. Los husos musculares proporcionan información sobre la longitud del músculo y el ritmo del cambio de longitud. Cuando el músculo se elonga, los husos se estiran. Esta deformación activa la neurona sensitiva del huso, que envía un impulso a la médula espinal, donde se sinapsa (se conecta) con motoneuronas. Esto causa la activación de motoneuronas que inervan el mismo músculo. Los husos, por tanto, indican el grado en que se debe activar el músculo para superar una resistencia. A medida que aumenta la carga, el músculo se estira más y la participación de los husos musculares produce una mayor activación del músculo. Los músculos que ejecutan movimientos precisos cuentan con muchos husos por unidad de masa para garantizar el control exacto de su actividad contráctil. Un ejemplo sencillo de actividad de los husos musculares es el reflejo rotuliano. La aplicación de un golpe seco sobre el tendón del grupo de músculos extensores de la rodilla —debajo de la rótula— causa la extensión de las fibras de los husos musculares. Esto provoca la activación de las fibras musculares extrafusales del mismo músculo.

       ¿Cómo pueden los atletas mejorar la producción de fuerza?

      •Incorporar fases de entrenamiento que empleen cargas más pesadas con el fin de mejorar el reclutamiento neuronal.

      •Aumentar el área transversal de los músculos implicados en la actividad deseada.

      •Practicar ejercicios con múltiples articulaciones y diversos músculos que se puedan ejecutar con acciones explosivas para mejorar al máximo el reclutamiento de fibras musculares de contracción rápida.

      Se produce un reflejo rotuliano mientras las fibras se acortan de manera activa. Esto, a su vez, acorta las fibras intrafusales e interrumpe su descarga.

       Órganos tendinosos de Golgi

      Los órganos tendinosos de Golgi (OTG) son propioceptores localizados en los tendones cerca de la unión miotendinosa, y adoptan series, es decir, se insertan de un extremo a otro con fibras musculares extrafusales (figura 1.10). Los órganos tendinosos de Golgi se activan cuando se estira el tendón que se inserta en un músculo activo. A medida que aumenta la tensión en el músculo, aumenta la descarga de los OTG. La neurona sensitiva de los OTG se sinapsa con una interneurona inhibidora de la médula espinal, que a su vez se sinapsa e inhibe una motoneurona que sirve al mismo músculo. El resultado es una reducción de la tensión en el músculo y el tendón. Por tanto, mientras que los husos facilitan la activación del músculo, la entrada neural de los OTG inhibe la activación del músculo.

      Se cree que el proceso inhibidor de los OTG proporciona un mecanismo protector contra el desarrollo excesivo de tensión. El efecto de los OTG, por tanto, es mínimo si las fuerzas son reducidas, aunque, cuando se aplica una carga muy pesada sobre el músculo, la inhibición refleja mediada por los OTG provoca que el músculo se relaje. La capacidad de la corteza motora para desactivar esta inhibición tal vez sea una de las adaptaciones fundamentales al entrenamiento con grandes resistencias.

      El papel principal del sistema cardiovascular es transportar nutrientes y eliminar desechos metabólicos al tiempo que mantiene el entorno de todas las funciones corporales. El sistema cardiovascular desempeña papeles clave en la regulación del sistema ácido-básico, los líquidos y la temperatura, así como otras muchas funciones fisiológicas. Esta sección describe la anatomía y fisiología del corazón y los vasos sanguíneos.

       El corazón

      El corazón es un órgano muscular compuesto por dos bombas interconectadas pero diferenciadas; el hemicardio derecho bombea sangre a través de los pulmones, y el hemicardio izquierdo bombea sangre al resto del cuerpo. Cada bomba cuenta con dos cavidades: una aurícula y un ventrículo (figura 1.11). Las aurículas derecha e izquierda desaguan sangre en los ventrículos derecho e izquierdo. Los ventrículos derecho e izquierdo generan la principal fuerza para impulsar sangre por la circulación pulmonar y periférica, respectivamente (13).

       Las