todavía estaba en sus comienzos. La interpretación onírica había de ser un recurso auxiliar que permitiera analizar psicológicamente las neurosis; desde entonces la comprensión profundizada de éstas repercutió a su vez sobre la concepción del sueño. La teoría misma de la interpretación onírica ha seguido desarrollándose en un sentido que no fue destacado suficientemente en la primera edición de este libro, pues gracias a la propia experiencia, como a los trabajos W. Stekel y de otros, pude prestar una consideración más justa a la amplitud e importancia del simbolismo en el sueño, o más bien en el pensamiento inconsciente. De tal manera, en el curso de estos años se han acumulado muchas cosas que exigían ser consideradas. He tratado de tener en cuenta estas novedades mediante múltiples agregados al texto e inclusión de notas al pie. Si estas adiciones amenazan romper algunas veces el marco de la exposición, o si en ciertas partes no fue posible llevar el texto primitivo al nivel de nuestros actuales conocimientos, ruego se considere benévolamente tales faltas del libro, ya que sólo son consecuencias e índices del acelerado desarrollo que actualmente sigue nuestra ciencia.
También me atrevo a predecir en qué sentidos se apartarán de éstas las futuras ediciones de La interpretación de los sueños -siempre que resulten necesarias-. Por un lado habrán de perseguir una vinculación más estrecha con el rico material de la poesía, del mito, los usos del lenguaje y el folklore; por otro, tratarán las relaciones del sueño con la neurosis y los trastornos mentales, aún más detenidamente de lo que aquí fue posible.
El señor Otto Rank me ha prestado grandes servicios en la selección de los agregados y ha tomado a su exclusivo cargo la corrección de las pruebas de imprenta. Tanto él como muchos otros que contribuyeron con colaboraciones y rectificaciones comprometen mi gratitud.
Viena, primavera de 1911.
PRÓLOGO A LA CUARTA EDICIÓN
(1914)
El año pasado (1913) el doctor A. A. Brill, de Nueva York, concluyó la traducción inglesa de este libro (The interpretation of dreams, G. Allen & Co., Londres).
En esta ocasión el doctor Otto Rank no sólo se encargó de las correcciones, sino que también aportó al texto dos contribuciones propias (apéndice del capítulo VI).
Viena, junio de 1914.
PRÓLOGO A LA QUINTA EDICIÓN
(1918)
El interés por La interpretación de los sueños tampoco ha decrecido durante la guerra mundial, planteando la necesidad de una nueva edición aun antes de que terminara aquella. Sin embargo, en esta edición no se pudo considerar plenamente la nueva literatura ulterior a 1914, pues, en lo que a la extranjera se refiere, ni siquiera llegó a conocimiento mío o del doctor Rank.
Una traducción húngara por los doctores Hollós y Ferenczi está próxima a su publicación. En mi Introducción al psicoanálisis, editada en 1916-17 por H. Heller, de Viena, la segunda parte, que comprende once conferencias, está dedicad a exponer el sueño de manera más elemental y en conexión más íntima con la teoría de las neurosis. En su conjunto estas conferencias constituyen un resumen de La interpretación de los sueños, aunque en determinados puntos presenten una conexión aún más minuciosa.
No pude decidirme a efectuar una reelaboración concienzuda de este libro, que si bien lo elevaría al nivel de nuestras concepciones psicoanalíticas actuales, destruiría, en cambio, su peculiaridad histórica. Creo que en su existencia de casi dos decenios ha quedado cumplida su misión.
Budapest-Steinbruch, julio de 1918.
PRÓLOGO A LA SEXTA EDICIÓN
(1921)
Las dificultades que actualmente aquejan a las empresas editoriales tuvieron por consecuencia que esta nueva edición se retardara mucho más de lo que habría correspondido a la demanda y que por vez primera sea publicada como reimpresión fiel de la precedente. Tan sólo el índice bibliográfico, al final del volumen, ha sido completado y ampliado por el doctor O. Rank.
Mi presunción de que este libro habría cumplido su misión en casi dos decenios de existencia, no ha sido, pues, confirmada. Podría decir más bien que tiene una nueva misión que cumplir. Así como antes se trataba de ofrecer algunas nociones sobre la esencia del sueño, ahora no es menos importante contrarrestar los tenaces errores de interpretación a que están expuestas dichas nociones.
Viena, abril de 1921.
PRÓLOGO A LA OCTAVA EDICIÓN
(1929)
En el lapso que media entre la última, séptima edición de este libro (1922), y la presente revisión, fueron editadas mis Obras completas por el Internationaler Psichoanalytischer Verlag, de Viena. En éstas el segundo tomo contiene el texto restablecido de la primera edición, mientras que todas las adiciones ulteriores están reunidas en el tercer tomo. En cambio, las traducciones aparecidas mientras tanto se ajustan a las publicaciones independientes de este libro, cabiendo mencionar la francesa, de I. Meyerson, publicada en 1926 con el título La Science des Rêves, por la Bibliothèque de Philosophie Contemporaine; la sueca (Drömtydning), efectuada en 1927 por John Landquist, y la castellana de Luis López Ballesteros y de Torres, que constituye los tomos VI y VII de las Obras completas. La traducción húngara, cuya inminente publicación anuncié ya en 1918, aún no ha aparecido.
También en la presente revisión de La interpretación de los sueños he tratado la obra esencialmente como documento histórico, introduciendo tan sólo aquellas modificaciones que me parecían imprescindibles para aclaramiento y la profundización de mis propias opiniones. De acuerdo con esta posición, he abandonado definitivamente el propósito de incluir en este libro la bibliografía aparecida desde su primera edición, excluyendo, pues, las secciones correspondientes que contenían las ediciones anteriores. Además, faltan aquí los dos trabajos «Sueño y poesía» y «Sueño y mito» que el doctor Otto Rank aportó a las ediciones precedentes.
Viena, diciembre de 1929.
PRÓLOGO A LA TERCERA EDICIÓN INGLESA DE «LA INTERPRETACIÓN DE LOS SUEÑOS»
(1931)
En el año 1909 G. Stanley Hall me invitó a la Universidad de Clark, en Worcester, para que pronunciara allí mis primeras conferencias sobre psicoanálisis. El mismo año el doctor Brill publicó la primera de sus traducciones de obras mías, que al poco tiempo había de ser seguida por otras. Si el psicoanálisis desempeña hoy un papel en la vida intelectual de Estados Unidos o si está destinado a desempeñarlo en el futuro, gran parte del mérito deberá atribuirse a ésta y las demás actividades del doctor Brill.
Su primera traducción de La interpretación de los sueños apareció en 1913. Mucho ha ocurrido desde entonces en el mundo y mucho han cambiado nuestros conceptos acerca de las neurosis. Este libro, empero, con su nueva contribución a la psicología, que tanto sorprendió al mundo cuando fue publicado (1900), sigue subsistiendo sin modificaciones esenciales. Aún insisto en afirmar que contiene el más valioso de los descubrimientos que he tenido la fortuna de realizar. Una intuición como ésta el destino puede depararla sólo una vez en la vida de un hombre.
FREUD.
Viena, 15 de marzo de 1931.
PRIMERA PARTE
~LOS SUEÑOS~
1900 [1901]
I
En tiempos que podemos llamar precientíficos, la explicación de los sueños era para los hombres cosa corriente. Lo que de ellos recordaban al despertar era interpretado como una manifestación benigna u hostil de poderes supraterrenos, demoníacos o divinos. Con el florecimiento de la disciplina intelectual de las ciencias físicas, toda esta significativa mitología