vasco creada a partir de las confluencias de Podemos con otros partidos minoritarios vascos. Con once diputados, se convirtió en la tercera fuerza en el Parlamento en 2016.
Retos actuales
Después de que ETA anunciara el fin de la lucha armada en octubre de 2011, la coalición independentista vasca Amaiur entró con fuerza en el Parlamento español tras las elecciones legislativas de noviembre de 2011 (7 escaños). Ya durante las elecciones municipales de mayo, la izquierda independentista había sorprendido al convertirse en la segunda fuerza política del País Vasco.
Este éxito se vio refrendado también en la política vasca; EH Bildu, heredera de Amaiur, se convirtió en la segunda formación por número de diputados en el Parlamento tras las elecciones de 2016. Este regreso notable de la izquierda abertzale ha supuesto un nuevo rumbo en la política vasca.
En las últimas elecciones generales, redujo su número de diputados a cinco.
El fin de ETA ha dado un vuelco importante a la política, economía y sociedad vascas, que han conseguido los mayores logros desde la implantación de la democracia.
Economía
Principales recursos
Hasta principios del siglo XX, es la única región de industria pesada de España, pero la crisis de los años 1980 lleva a la región a la reconversión industrial y al desmantelamiento de las emblemáticas plantas siderúrgicas. La construcción del museo Guggenheim en una antigua fábrica siderúrgica es el símbolo de esta nueva etapa.
Tras un breve tiempo de incertidumbre, el País Vasco ha logrado convertirse en una de las regiones más ricas de Europa y en la quinta economía del país, y en la segunda comunidad autónoma más rica en términos de PIB per cápita. Su PIB se sitúa en el 140 % de la media de la Unión Europea. Varias grandes empresas cotizadas del Ibex 35 tienen su sede social en el País Vasco, especialmente Iberdrola (electricidad y gas), primer productor mundial de energía eólica, BBVA, segundo grupo bancario de España y América Latina, y Gamesa, segundo fabricante europeo de aerogeneradores. Además, el País Vasco es la primera comunidad autónoma en porcentaje de gasto en actividades de I + D.
La decadencia de la industria, que actualmente supone el 24 % del PIB vasco, se ha visto compensada por el crecimiento de los servicios de alto valor añadido (científicos, técnicos...), que suponen casi el 58 % del PIB.
El sector primario, aunque ha perdido fuerza (1,2 % del PIB), sigue siendo próspero en el ámbito de la pesca, actividad tradicional del País Vasco. Pero es el sector de los servicios, con más del 60 % del PIB vasco, el que genera más riqueza.
Importancia del turismo
La enorme importancia de la industria del turismo en la economía nacional hace tiempo que se ha hecho evidente para todos. España es el segundo país más visitado del mundo, después de Francia, pero el primero en términos de ingresos económicos vinculados a dicha industria. Sin embargo, el turismo en el País Vasco se desarrolló más tarde que en el resto del país. Se basa en un turismo ecológico, cultural, gastronómico y vinícola, que atrae principalmente al turismo nacional.
En el desarrollo del turismo vasco hay que destacar dos factores de vital importancia: la apertura del Museo Guggenheim en 1997 y el final de la violencia terrorista de ETA en 2011. Otro factor importante está relacionado con la calidad de la gastronomía de la región, que cuenta con 24 establecimientos premiados con estrella Michelín, cuatro de ellos con la máxima puntuación: Martín Berasategui, Pedro Subijana, Juan Mari Arzak y Eneko Atxa.
Los dos principales retos de las instituciones vascas en materia de turismo son la potenciación de los mercados internacionales (el 71 % de los turistas que visitan el País Vasco provienen del resto de Estaña) y, muy especialmente, la derivación del turismo hacia las tierras del interior: se calcula que actualmente un 27 % de los turistas visita el interior de la comunidad, mientras que las tres capitales provinciales son, con diferencia, los principales destinos. A esto último contribuye el destacable papel que tienen aquí el turismo de negocios y de eventos culturales.
Retos actuales
El País Vasco es una de las comunidades autónomas que registra la tasa de desempleo más baja, con un 9,1 % (datos de 2020) de desempleados, frente a una media del 13,8 % en toda España. No obstante, tras la pandemia del Covid19, la creación de empleo y el retorno a la senda del crecimiento económico siguen siendo los principales retos actuales. Pero, el problema principal de la economía vasca radica en el envejecimiento de la población, un problema común al resto del país, pero que aquí se ve más acentuado.
Población e idiomas
Población
En las últimas décadas, la evolución demográfica del País Vasco ha seguido unos patrones similares a los del conjunto del país: un estancamiento debido a una muy baja natalidad y un crecimiento vegetativo (natalidad-mortalidad) negativo. Esta situación general ha apuntado tendencias al alza en periodos de mayor crecimiento económico gracias a la llegada de inmigrantes (aunque en el norte de España las cifras no han sido muy altas), pero también ha incluido periodos de recesión demográfica durante las etapas de crisis económica, con movimientos de emigración hacia las grandes ciudades del país o hacia otros países europeos. En cualquier caso, este estancamiento está conformando en los últimos años una sociedad cada vez más envejecida, aunque la población inmigrante tiene a compensar este desequilibrio.