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Figura 2.7.Dimensiones de la portería adaptadas a las características morfofuncionales de los jóvenes practicantes.
La reducción del espacio de juego y la mayor aproximación de los jugadores favorece un tipo de juego en el que prevalecen las acciones basadas en la velocidad de reacción, desplazamiento y de ejecución, capacidad motora de primordial importancia en el desarrollo de esta categoría de edad. Por otro lado, facilita la ejecución de cambios de orientación, pases en profundidad, cruces, remates desde fuera del área y exploración de los espacios vacíos.
En este tipo de juego, los jugadores contactan un mayor número de veces y durante mucho más tiempo con el balón, lo que facilita un mejor aprendizaje de las habilidades técnicas a través de continuas recepciones, conducciones de balón, pases, remates y de todo tipo de destrezas relacionadas con el fútbol.
Las menores dimensiones del terreno de juego de fútbol 7 (60 × 50 metros), en comparación con las del fútbol 11 (100 × 60 metros), hacen que el “espacio de responsabilidad” por jugador (el área de espacio de juego que se divide por el número total de jugadores) sea mayor en el fútbol 11 (546 m2) que en el fútbol 7 (428 m2), lo que hace que las situaciones sean menos complejas en el fútbol 7.
Además, para los mismos autores, si a las grandes dimensiones del terreno de juego, en el fútbol 11, añadimos el elevado número de jugadores que el atleta tiene que controlar al mismo tiempo (fútbol 11 = 22 y fútbol 7 = 14), constatamos una mayor complejidad en este tipo de práctica competitiva en relación con el fútbol 7, porque siempre se le exige al jugador una actitud táctica permanente, para la correcta decisión inmediata y la consiguiente respuesta motora, con o sin balón.
La reducción del terreno de juego y la consecuente proximidad de los jugadores facilita, además, los apoyos mutuos y las ayudas recíprocas, que aliadas a la reducción del número de jugadores permite una más ajustada lectura del juego, mejorando las capacidades perceptivas de los jóvenes jugadores y posibilitando la toma de decisiones más correctas.
El fútbol, jugado en un campo con dimensiones reducidas, proporciona un mayor número de situaciones de alternancia defensa/ataque, con la participación de todos los jugadores, a través de un gran número de vivencias en situaciones defensivas y ofensivas y favoreciendo la polivalencia de las funciones.
El fútbol 7 proporciona un mayor número de acciones cerca de las porterías, remates, cruces, pases, tiros a portería y un consecuente aumento del número de goles.
La reducción del terreno de juego y del número de jugadores en el fútbol 7 obliga a que los jugadores menos hábiles participen activamente en el juego, exigiendo, además, una constante capacidad de concentración mental por parte de todos los jugadores.
Respecto a la carencia de instalaciones deportivas, el fútbol 7 va a permitir que haya un mejor aprovechamiento de las mismas pues facilita la realización de dos partidos simultáneamente (en un campo de fútbol 11, figura 2.8) y la posibilidad de enseñanza/aprendizaje a un mayor número de jóvenes.
Figura 2.8.
En síntesis, podemos comparar cuáles son las principales ventajas del fútbol 7 y los mayores inconvenientes del fútbol 11 (tabla 2.1), así como sus implicaciones en el proceso de formación del joven futbolista.
Tabla 2.1.Análisis comparativo entre las ventajas del fútbol 7 y los inconvenientes del fútbol 11
| Componentes | Fútbol 7. Ventajas | Fútbol 11. Inconvenientes |
| Física | •Adaptado a las capacidades motoras del joven:–favorece el desarrollo de la velocidad–favorece la ejecución de cambios de orientación, pases largos–dimensiones de la portería adaptadas a la estructura del portero | •Desadaptado a las capacidades motoras del joven:–escaso desarrollo de la resistencia de velocidad para ejecutar largos sprints–poca potencia para la ejecución de pases y remates de larga distancia–baja estatura e insuficiente potencia de salto del portero, en relación con las grandes dimensiones de la portería |
| Técnica | •Mayor número de contactos con el balón y durante períodos más largos de tiempo•Favorece la ejecución más correcta de las habilidades técnicas (pase, recepción, remate...) | •Pocos contactos con el balón•Grandes distancias a vencer que contribuyen a una insuficiente ejecución de las diferentes habilidades técnicas |
| Táctica | •Un gran alternancia de situaciones de defensa/ataque•Participación de todos los jugadores en situaciones defensivas y ofensivas.•Polivalencia en las funciones•Facilita los apoyos y las ayudas recíprocas en el juego colectivo•Permite una mejor observación del espacio de juego, en virtud de la mayor proximidad entre los jugadores, exigiendo una constante concentración mental en el juego•Gran número de acciones junto a las porterías•Menor “espacio de responsabilidad” por jugador (428 m2), mejorando las capacidades perceptivas y posibilitando la toma de decisiones más correcta | •Poca alternancia de situaciones de defensa/ataque•No todos los jugadores participan en el ataque y la defensa.•Especialización demasiado precoz por “puestos”•Facilita la aglomeración alrededor del balón•Gran número de jugadores, lo que imposibilita que cada jugador tenga una visión amplia de las situaciones de juego•Las grandes distancias entre los compañeros dificultan el juego colectivo y disminuyen la capacidad de atención en el juego•Pocas acciones junto a las porterías•Un mayor “espacio de responsabilidad” por jugador (546 m2), que exige una más elevada capacidad para cubrirlo mental y físicamente |
| Psicológica | •Juego más motivante por:–mayor número de contactos con el balón y durante más tiempo–participación de todos los jugadores en las diversas acciones de juego–mayor facilidad en la obtención de gol•En el caso específico del portero, más seguridad y confianza en sus capacidades | •Juego menos motivante por:–menor número de contactos con el balón–reducida participación de algunos jugadores, principalmente de los más pequeños y de los menos habilidosos–mayor dificultad para obtener gol•Inseguridad en el portero, debido a las dimensiones desajustadas de la portería |
¿QUÉ CONCLUSIONES PODEMOS EXTRAER?
En función de las ideas anteriormente expuestas, en síntesis podemos concluir:
•El fútbol 7 es la forma de juego que mejor se adapta a las características del joven futbolista.
•El fútbol 7 es el juego que mejor respeta las fases de desarrollo morfológico (altura, peso) y funcional (muscular, orgánico, cognitivo) del joven atleta.
•El fútbol 7 es el juego más enriquecedor, desde el punto de vista de las habilidades técnicas, gracias a un mayor número de contactos con el balón y a un mayor tiempo de posesión del balón.
•El fútbol 7 es el juego que aporta mejor bagaje táctico, por el constante y diversificado número de situaciones que proporciona, exigiendo tomas de decisiones más correctas y reclamando una actitud táctica permanente.
•El fútbol 7 es, desde el punto de vista psicológico, la forma de juego que más motiva a los jóvenes, por estar más adaptada a sus características morfológicas y funcionales, por una mayor frecuencia del contacto con el balón y por inducir más posibilidades de crear situaciones de gol.
Desde el punto de vista pedagógico-didáctico, el fútbol 7 es el tipo de juego que presenta un mayor potencial de aprendizaje para los jóvenes de categoría de edad de 8/12 años.
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