Operaciones básicas y procesos automáticos de fabricación mecánica. FMEE0108
variables que interactúan para lograr el fin último: el producto.
3. Documentación técnica
Para llevar a cabo el proceso de fabricación y poder realizar los trabajos correctamente y llegar al producto final requerido, es necesario tener la información adecuada. Dicha información llegará al operario en forma de documentación técnica.
La documentación técnica debe recoger todo el material, es decir, la información que el operario necesitará para el desarrollo del producto. Deberá contener las características del producto, sobre su fabricación, su montaje o su preparación.
La documentación técnica del producto y del proceso estará compuesta por:
1 Planos del producto, mecanismo o pieza.
2 Tipo de producto.
3 Especificaciones técnicas requeridas: calidad, materiales, tratamiento, fabricación.
4 Costo requerido.
5 Cantidad a fabricar.
6 Proceso de fabricación.
Por otro lado, existe otra documentación técnica que podrá ser elaborada una vez conocida la documentación anterior:
1 En el caso de producciones por lotes, esta documentación será la hoja de ruta.
2 En el caso de producciones en serie, esta documentación será la hoja de proceso y la hoja de operaciones.
Hay que destacar que, en el caso de industrias continuas, no se suelen utilizar ni las hojas de operaciones ni las hojas de ruta, porque se llevan a cabo procesos continuos con instalaciones fijas determinadas. En estos casos, lo que se suelen utilizar son hojas de instrucciones de trabajo o diagramas de flujo de materiales.
No se debe olvidar que la documentación puede variar en función del tipo de proceso o del tipo de producción que se vaya a llevar a cabo y que dicha documentación debe adaptarse a tal fin lo máximo posible. Por este motivo, antes de nada, es aconsejable llevar a cabo un proceso tentativo, que consiste en preparar una planilla de proceso.
Por último, destacar que es conveniente y muy útil realizar un seguimiento del trabajo y que este quede reflejado a través de la documentación adecuada, que muestre el control del proceso. Dicho control se debe llevar a cabo a través del control de las piezas, realizándolo al inicio de cada turno, controlando los cambios de herramienta, la puesta a punto de las máquinas y herramientas, etc. Toda acción relevante quedará reflejada así como el momento de finalización de cada tarea que se vaya terminando y dando por cerrada o concluida.
Recuerde
La documentación técnica debe recoger toda la información necesaria para que el operario pueda desarrollar su trabajo: características del producto, de su fabricación, montaje y preparación.
A continuación, se entrará en más detalle en algunos de estos documentos para conocer en profundidad los más relevantes.
3.1. Planos constructivos
Los planos, en general, plasman la tridimensionalidad de los objetos a escala y en dos dimensiones. Lo consiguen mediante la descomposición de los cuerpos en vistas de los distintos planos y mediante vistas en perspectiva de los objetos.
Cuando se trate de un objeto o pieza simple que esté compuesta únicamente por un elemento, será suficiente con el plano de dicha pieza. Sin embargo, cuando se trate de un mecanismo o una pieza compleja, compuesta por varios elementos, será necesario el apoyo de un plano de conjunto y de planos de despiece.
Planos de conjunto
Los planos de conjunto permiten conocer el entorno de cada pieza y la forma de construir el elemento o mecanismo final a partir de elementos básicos, proporcionando una idea general sobre su constitución. Permiten conocer la posición de montaje o emplazamiento de cada pieza dentro del elemento final.
Nota
Los planos de conjunto son los más adecuados para conocer la posición de montaje y de trabajo de cada pieza dentro del conjunto final.
En los planos de conjunto se representa el mecanismo o máquina con todas las piezas que lo forman montadas y ubicadas en su posición de trabajo, proporcionando una visión y conocimiento de las relaciones existentes entre las diferentes piezas que componen el conjunto y dando una imagen real del mecanismo proyectado. Será necesario utilizar tantas vistas y secciones como sea preciso para que sea posible la identificación de cada una de las piezas que forman el conjunto, así como su posición de montaje.
Generalmente, los dibujos de conjunto se representarán en sistema diédrico, pero, a veces, cuando van a ser presentados a personas no muy cualificadas o simplemente se realizan para su presentación en folletos informativos, es posible representarlos en una perspectiva estallada o explosionada.
Recuerde
El conjunto debe ser representado en su posición de trabajo o utilización.
Marcas
Cada pieza deberá llevar una indicación mediante un número de marca. Dicha marca sirve para diferenciar cada elemento y reflejarlo en el cajetín de forma ordenada para que no lleve a equívoco. Estas referencias o marcas hay que realizarlas conforme a la norma UNE 1-100-83 (ISO 6433). Dicha normativa fija unas reglas generales sobre cómo disponer y representar las referencias que señalan los distintos elementos o piezas que componen un conjunto.
Nota
Para dotar de una mayor claridad al dibujo, en los planos de conjunto solo se incluirán cotas imprescindibles para su montaje y cotas totales para dar una idea de la dimensión del conjunto.
A continuación, se destacan algunas de estas reglas generales, pero no todas, puesto que el operario únicamente debe saber interpretar estos planos, pero normalmente no los va a elaborar él:
Las referencias pertenecientes a un mismo dibujo deben ser del mismo tipo y distinguirse claramente de otras indicaciones que aparezcan en el plano.
Las referencias o números de marca deben atribuirse de forma sucesiva a cada uno de los elementos del conjunto, deben ir colocadas fuera del dibujo y lo mejor es que se dispongan en el sentido del recorrido de las agujas del reloj.
A la hora de numerar las piezas o subconjuntos en el plano de conjunto, las referencias han de seguir un orden lógico. Por ejemplo, se pueden ordenar o numerar siguiendo el orden de montaje o por orden de importancia.
Nota
Un subconjunto es un conjunto que pertenece a otro conjunto. Es decir, un conjunto puede estar formado por piezas (elementos simples) y subconjuntos (partes que, a su vez, se componen de varios elementos). Por lo tanto, en el caso de existir subconjuntos, será necesaria la utilización de planos complementarios que representen esos subconjuntos y sus elementos.