desaparecerá algún día la impresión que experimento de separación entre Dios y yo. Mientras tanto, la fe ha de servir como la senda hacia el centro de mi vida.
13 de FEBRERO
NO PODEMOS LOGRAR LA SOBRIEDAD SÓLO CON EL PENSAMIENTO
Al hombre o a la mujer intelectualmente autosuficientes, muchos A.A. les pueden decir: “Sí, éramos como tú — nos pasábamos de listos… Creíamos que podíamos flotar por encima del resto de la humanidad debido únicamente a nuestra capacidad cerebral”.
COMO LO VE BILL, p. 60
Ni el más brillante cerebro puede defendernos contra la enfermedad del alcoholismo. No puedo lograr mi sobriedad con el solo poder de mi pensamiento. Trato de tener presente que la inteligencia es un atributo dado por Dios que puedo aprovechar — una felicidad, como tener dotes para el baile o el dibujo o la carpintería. No hace que yo sea mejor que otra persona, y no es un instrumento de recuperación en que se pueda confiar mucho, porque es un poder superior a mí mismo el que me devolverá el sano juicio — y no un alto cociente de inteligencia ni un título de la universidad.
14 de FEBRERO
ESPERANZAS Y EXIGENCIAS
Graba en la conciencia de cada individuo el hecho de que se puede poner bien a pesar de cualquier otra persona. La única condición es que confíe en Dios, y haga una limpieza de su interior.
ALCOHÓLICOS ANÓNIMOS, p. 98
En nuestras reuniones a menudo tratamos del tema de las esperanzas. No tiene nada de malo esperar progresos de mí mismo, buenas cosas de la vida o buen trato por parte de otra gente. Lo malo está en dejar que mis esperanzas se conviertan en exigencias. No lograré ser lo que quiero ser, y las situaciones se desarrollarán de tal manera que no me complacerán, porque la gente de vez en cuando me fallará. La única pregunta es: “¿Qué voy a hacer al respecto?” ¿Sumirme en la ira o en la lástima de mí mismo? ¿Vengarme y hacer que la situación vaya de mal en peor? O, ¿confiaré en el poder de Dios para traerme bendiciones a los líos en los que me encuentre? ¿Le preguntaré a qué debo dedicarme a aprender? ¿Sigo haciendo las debidas cosas que yo sé hacer, sea lo que sea? ¿Me tomo la molestia de compartir mi fe y mis bendiciones con otras personas?
15 de FEBRERO
PONERSE EN ACCIÓN
¿Son estas promesas extravagantes? No lo creemos. Están cumpliéndose entre nosotros — a veces rápidamente, a veces lentamente, pero siempre se realizarán si trabajamos para obtenerlas.
ALCOHÓLICOS ANÓNIMOS, p. 84
Una de las cosas más importantes que A.A. me ha dado, además de mi liberación de la bebida, es la capacidad para actuar “apropiadamente”. Dice que las promesas siempre se realizarán si trabajo para obtenerlas. Soñar con ellas, discutir sobre ellas, predicar acerca de ellas, fingirlas, simplemente no da resultados. Seguiré siendo un borracho seco, miserable y racionalizador. Poniéndome en acción y trabajando en los Doce Pasos en todos mis asuntos, tendré una vida que ni en mis sueños dorados me hubiera podido imaginar.
16 de FEBRERO
EL COMPROMISO
La comprensión es la clave de las actitudes y los principios correctos, y las acciones correctas son la clave del buen vivir …
DOCE PASOS Y DOCE TRADICIONES, p. 122
Llegó un momento en mi programa de recuperación en que la tercera línea de la Oración de la Serenidad —“la sabiduría para reconocer la diferencia”— quedó impresa indeleblemente en mi mente. Desde aquel momento, tenía que enfrentarme con esta conciencia de que todas mis acciones, todas mis palabras y todos mis pensamientos estaban dentro o fuera de los principios del programa. Ya no podía ampararme en las racionalizaciones ni en la locura de mi enfermedad. La única línea de acción que tenía abierta, si iba a llegar a una vida feliz para mí mismo (y para mis seres queridos) era la de obligarme a mí mismo a hacer un esfuerzo para comprometerme y ser disciplinado y responsable.
17 de FEBRERO
EL AMOR EN SUS OJOS
Algunos de nosotros no queremos creer en Dios, otros no podemos creer, y hay otros que, aunque creen en Dios, no confían en que Él haga este milagro.
DOCE PASOS Y DOCE TRADICIONES, p. 23
Los cambios que yo veía en la gente nueva que llegaba a la Comunidad eran lo que me ayudaba a perder mis temores y transformar mi actitud negativa en positiva. Podía ver el amor en sus ojos y estaba impresionado por la gran importancia que para ellos tenía su sobriedad de “Un Día a la Vez”. Honradamente habían considerado el Segundo Paso y llegaron a creer que un poder superior a ellos mismos estaba devolviéndoles el sano juicio. Esto me infundía fe en la Comunidad y la esperanza de que podría funcionar para mí también. Llegué a darme cuenta de que Dios era un Dios bondadoso y no aquel Dios castigador a quien había temido antes de unirme a A.A. Además, me di cuenta de que Él había estado conmigo en todas esas ocasiones que estuve en dificultades antes de llegar a A.A. Hoy yo sé que fue Él quien me condujo a A.A. y que yo soy un milagro.
18 de FEBRERO
CADA UNO SIGUE SU PROPIO CAMINO
… lo único que tuvimos que hacer fue tomar el simple juego de instrumentos espirituales que ponían en nuestras manos.
ALCOHÓLICOS ANÓNIMOS, p. 25
Mi primer intento con los Pasos fue por obligación y necesidad, lo cual resultó en un profundo sentimiento de desconsuelo al frente de esos adverbios: inmediatamente; completamente; humildemente; directamente; y solamente. Yo consideraba afortunado a Bill W. por haber tenido esa grande y aun sensacional experiencia espiritual. A medida que pasaba el tiempo yo tendría que descubrir que el sendero que yo seguía, era el mío propio. Después de unas pocas veinticuatro horas en la Comunidad de A.A., gracias principalmente al compartimiento de los miembros en las reuniones, llegué a entender que todos encuentran poco a poco su propio ritmo para navegar por los Pasos. Progresivamente, trato de vivir de acuerdo a estos principios sugeridos. Como resultado de estos Pasos, hoy día puedo decir que mi actitud frente a la vida, la gente y hacia cualquier cosa que tenga que ver con Dios ha sido transformada y mejorada.
19 de FEBRERO
NO SOY DIFERENTE
Al principio, pasaron cuatro años antes de que A.A. llevara la sobriedad permanente tan solo a una mujer alcohólica. Como los del alto fondo, las mujeres también decían que eran diferentes… El borracho de los barrios perdidos decía que era diferente y lo mismo decían los artistas, los profesionales, los ricos, los pobres, la gente religiosa, los agnósticos, los indios, los esquimales, los soldados veteranos y los presos…hoy en día, todos ellos hablan de lo mucho que nos parecemos todos los alcohólicos cuando reconocemos que hemos llegado a la hora de la verdad.
COMO LO VE BILL, p. 24
Yo no puedo considerarme diferente en A.A.; si lo hago me aíslo de otros y del contacto con mi Poder Superior. Si me siento aislado en A.A., no es culpa de los otros. Es algo que yo he creado por sentirme de algún modo “diferente”. Hoy practico ser simplemente un alcohólico más en la Comunidad mundial de Alcohólicos Anónimos.
20 de FEBRERO
EL DON DE LA RISA
Al llegar a este punto, su padrino se suele reír.
DOCE PASOS Y DOCE TRADICIONES, p. 23
Antes de empezar mi recuperación del alcoholismo, la risa era uno de los sonidos más penosos que conocía. Yo nunca me reía y cualquiera que se riera me parecía que se estaba riendo de mí. Mi ira y la lástima que tenía de mí mismo me privaban de los placeres más sencillos y de la alegría del corazón. Al llegar al fin de mis días de bebedor,