padres y compañeros es un esfuerzo para asegurarnos de que si aquellos que deseamos no nos responden de manera ideal, es porque ellos están enfermos, no porque nosotros no seamos interesantes»11.
Más allá del miedo al narcisismo, echemos otro vistazo a Trump, un hombre que «parece ser sumamente consciente del hecho de que siempre está actuando. Se mueve a través de la vida como un hombre que sabe que siempre lo están observando». Esta cita previa a las elecciones ha sido tomada de una pieza de junio de 2016 aparecida en The Atlantic llamada «La mente de Donald Trump»12. Allí se le describe como «desconcertante»: «una extroversión exagerada combinada con un bajo nivel de afabilidad». La lista de sus características es impresionante. Se le describe como «impulsado por una dinamo, inquieto, incapaz de quedarse estático, sin necesidad de dormir muchas horas». Una característica cardinal de la alta extroversión es la búsqueda de recompensa sin descanso. Impulsado por la actividad de los circuitos de dopamina en el cerebro, los actores altamente extrovertidos son impulsados a perseguir experiencias emocionales positivas. «La ira puede alimentar la malicia, pero también puede motivar el dominio social, alimentando el deseo de ganar la adoración de los demás… la ira está en el núcleo del carisma de Trump… dominado por la extroversión exuberante, la teatralidad constante y el deseo de trascender como celebridad», que nunca piensa dos veces sobre el daño colateral que dejará atrás.
Las personas altamente narcisistas atraen la atención hacia sí mismas. La auto-referencia repetida y desordenada es una característica distintiva de su personalidad. Con el tiempo, las personas se molestan, si no se enfurecen, por su egocentrismo. Cuando los narcisistas comienzan a decepcionar a aquellos a quienes alguna vez deslumbraron, su descenso puede ser especialmente precipitado. Todavía hay verdad hoy en el proverbio antiguo: «El orgullo precede a la caída». El mundo está saturado de una sensación de peligro y una necesidad de fortaleza. No se puede confiar en el mundo. En esta arena brutal, el héroe exitoso es el feroz combatiente que lucha para ganar. ¿Está preocupado por las fantasías de que el mundo se está acabando debido al egoísmo de los demás? «¿Quién es realmente Donald Trump? ¿Qué hay detrás de la máscara del actor? Puedo discernir poco más que motivaciones narcisistas y una narrativa personal complementaria sobre ganar a cualquier precio. Es como si Trump hubiera invertido tanto de sí mismo en desarrollar y perfeccionar su papel socialmente dominante que ya no le queda nada para crear una historia significativa para su vida o para la nación. Siempre es Donald Trump interpretando a Donald Trump, luchando para ganar, pero sin saber por qué»13.
¿Dónde podríamos encontrar el punto de partida para la filosofía del descrédito hoy en día? ¿Debemos buscar un seguimiento secular de la crítica de la religión? ¿Qué es el ateísmo dentro del contexto de la información? ¿Cuál es nuestro tótem y cuál el tabú? La multiplicidad de fuentes y puntos de vista, una vez celebrada como «diversidad de opinión», ahora está llegando a su «punto cero» nihilista. En lugar de una acumulación de significado que conduce a percepciones potencialmente críticas (o incluso al conocimiento), la información implosiona en un conjunto de indiferencias (una situación que posiblemente conduzca a la desaparición de canales como Twitter, ya que prosperan en expresiones, juicios y preferencias individuales).
En estos días, los dogmas institucionales se ocultan dentro del folklore de los medios, cableados en arquitecturas de red, dirigidos por algoritmos. El rechazo mental de la autoridad está ahora tan extendido y se ha hundido tanto en las rutinas y mentalidades diarias que se ha vuelto irrelevante si negamos, respaldamos o deconstruimos una información en particular. Este es el aspecto truculento de la disposición actual de las redes sociales.
Atrincherados en sus habitaciones, los productores de memes se han vuelto inmunes a cualquier crítica por parte de los moralistas liberales de la tercera vía. Su firewall de indiferencia aún no ha sido hackeado. La deconstrucción irónica tampoco está haciendo el trabajo. Tara Burton señala que «dada la anarquía ideológica inherente al shitposting, tiende a desafiar el análisis. Los shitposters, que no están limitados por nada, crean una trampa retórica para sus enemigos, que tienden a estar limitados por tener un punto real»14. «El shitposting no puede ser refutado, solo puede ser repetido», concluye Burton. Esta no es la edad del Hombre/Mujer del Renacimiento; aquí la desilusión es simplemente abrumadora.
Nos encontramos sobrepasados por los eventos de los medios que se desarrollan en tiempo real. ¿Es este espectáculo una cortina de humo para medidas más drásticas a largo plazo? ¿Cuál es nuestro plan? Las estrategias políticamente correctas de la «sociedad civil» son todas bien intencionadas y están relacionadas con temas importantes, pero parecen estar avanzando hacia un universo paralelo, incapaz de responder al diseño de memes cínicos que está tomando rápidamente posiciones de poder clave. ¿Hay formas de no solo devolver el golpe, sino también estar un paso por delante? ¿Qué tenemos en mente?
¿Cómo podemos pasar de Data a Dada y convertirnos en una vanguardia del siglo XXI, una que verdaderamente entienda el imperativo tecnológico y muestre que somos lo social en las redes sociales? En resumen, ¿cómo desarrollamos, y luego ampliamos, los conceptos críticos y juntamos la política y la estética de una manera que hable a los millones en línea? Identifiquemos los obstáculos, sabiendo que es hora de actuar. Sabemos que burlarse del penoso mundo de los xenófobos no está funcionando. Están en la ofensiva; nosotros, no. ¿Qué podemos hacer aparte de unirnos?15 ¿Podemos esperar algo del diseñador como lobo solitario? ¿Cómo puede organizarse el trabajo político contemporáneo fuera de Facebook y Twitter? ¿Necesitamos aún más herramientas para unirnos? ¿Ya ha comenzado a usar DuckDuckGo, Meetup, Diaspora, Mastodon, DemocracyOS o Loomio? ¿Dónde están los sitios de citas colectivas para el activismo político? ¿Cómo podemos diseñar y luego movilizar un deseo colectivo y en red que nos unifique en una «diversidad profunda»? ¿La promesa de redes abiertas y distribuidas va a hacer el trabajo o estás buscando lazos fuertes y todas las consecuencias que vienen con ellos?
Generaciones han estudiado los errores fatales cometidos en el período de entreguerras, pero ¿cuál es la conclusión ahora que nos estamos moviendo hacia una situación similar? ¿Cómo sería una vida no fascista en estos días? ¿Podemos seguir inspirándonos en Los orígenes del totalitarismo de Hannah Arendt (en el que encontramos la cita de David Rousset, «los hombres normales no saben que todo es posible»), la Psicología del Fascismo de Wilhelm Reich, la Dialéctica de la Ilustración de Adorno y Horkheimer, Masa y poder de Elias Canetti y –la obra que definió mi propio destino intelectual– Las fantasías masculinas de Klaus Theweleit? No hace falta decir que esta es una lista subjetiva, ya que hay tantos clásicos en este género16. ¿Nos ayudarán estos autores a descubrir cuáles son las causas definitorias de la regresión? ¿Cómo podemos ubicar los problemas clave, y luego actuar sobre ellos, sabiendo que hemos identificado los factores socio-psicológicos que están causando el punto de inflexión?
1Un borrador previo de este capítulo fue publicado en junio de 2017 en E-flux Journal #83: https://www.flux.com/journal/83/141287/overcoming-internet-disillusionment-on-the-principles-of-meme-design/. La parte correspondiente al diseño de memes ha sido trasladada al capítulo 8.
2El diseñador e investigador Silvio Lorusso (http://silviolorusso.com/), quien proveyó de comentarios valiosos a esta pieza, notó que un relativismo similar se ha asentado en la cultura visual. Esta podría ser la razón por la cual diseñadores gráficos entrenados y profesionales son los menos cualificados para producir memes efectivos. En respuesta, los memes son con frecuencia asociados a una cultura amateur underground. La creación de memes es por tanto descrita como un proceso misterioso, por ejemplo en el documental sobre el «primer meme», el Techno Viking (como se discute en el capítulo