Aina Ramis

Cómo formar una banda de rock


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en el que podréis evolucionar como banda y como músicos.

      ¡Felicidades! Si has llegado hasta aquí es que ya tienes un grupo consolidado de gente que quiere empezar un proyecto contigo. Ahora viene la hora de la verdad: el compromiso. Ya tienes grupo de música, habéis probado un par de canciones, os habéis decidido a coger el mismo camino todos juntos y adoptar un compromiso. Os gusta cómo sonáis, os habéis visto un par de veces, vivís relativamente cerca y el rock os corre por las venas. Hora de buscar vuestra sala de ensayo definitiva, donde os veréis los días que elijáis y practicaréis para convertiros en un grupo capaz de llevar a cabo vuestros conciertos. En este capítulo hablaremos sobre cómo podemos encontrar este espacio físico que necesitamos para ensayar, qué opciones tenemos en cuanto a alquiler o a compartir una sala de ensayo y cómo podemos colocar los diferentes instrumentos para sonar bien, además de la insonorización de la sala. Ya te habrás dado cuenta de que en este manual partimos siempre desde cero pero siempre puede pasar que, por ejemplo, a la hora de publicar anuncios para buscar a tus músicos, se pongan en contacto contigo personas que ya tienen un proyecto empezado y una sala de ensayo fija. Si pruebas con este grupo de personas, te sientes a gusto y finalmente te decides a unirte a ellos, créeme que te has saltado algunas de las partes más complicadas y con más quebraderos de cabeza. Es una bendición, porque te habrás ahorrado buscar la sala de ensayo, buscar personas que quieran adoptar un compromiso, comparar precios, pagar señales, negociar con el dueño, adecentar la sala, colocar los instrumentos y muchas cosas más. Es todo un trabajo previo al ensayo por el que necesariamente hay que pasar y tú te lo habrás saltado. Si tu grupo de música ya tiene una sala tal vez no necesites leerte del todo este capítulo. De todas formas, te recomiendo leerlo, ya que es posible que aprendas cosas que te sean útiles en un futuro.

      Compartir, alquilar a solas o adecentar un espacio: ventajas y desventajas

      Primero es necesario que nos planteemos si queremos pagar una sala de ensayo o podemos adecentar una sala o sótano al que alguno de nosotros tenga acceso y fabricarnos así nuestra propia sala de ensayo. Otra opción que existe es compartir la sala que alquilemos con otro grupo. Esta es una práctica muy común entre los grupos que no quieren o no pueden permitirse pagar el alquiler de una sala para ellos solos. De esta manera, os coordinaríais con el otro grupo para que ellos ocupen la sala los días que vosotros no la uséis. Es una opción viable, pero hay que tener en cuenta que también trae sus desventajas. Para ver todas las opciones que tenemos disponibles de una manera más visual, fíjate en esta comparativa:

      Opciones para conseguir local de ensayo: ventajas y desventajas

VentajasDesventajas
Adecentar sala propia, no profesional- No gastamos dinero en el alquiler- Podemos colocarlo todo a nuestro gusto y decorarla como nos plazca- Se puede ir a todas horas(*)- Probablemente no estará insonorizada ni tampoco sonorizada- Nos puede faltar equipamiento necesario- La localización puede ser una desventaja
Compartir un espacio profesional con otro grupo- No hay que dedicar mucho dinero al alquiler, es una opción muy económica- Son salas que suelen estar bien equipadas y bien insonorizadas, no molestamos a nadie- La relación entre el dinero que gastamos y el espacio que tenemos es casi inmejorable- Hay que ponerse de acuerdo con el otro grupo con los días de ensayo- Hay que gastar dinero en el alquiler, aunque no mucho- No la podemos decorar a nuestro gusto- Dependemos del otro grupo. Si se va, tenemos que buscar sustituto
Alquilar un espacio profesional para nosotros solos- Total libertad para ir cuando nos plazca (dentro de las horas de apertura si las hubiera)- Total libertad para decorarla a nuestro gusto- Son salas que suelen estar bien equipadas y bien insonorizadas- Salas con buena sonorización- El espacio es enteramente nuestro- La mayor desventaja es económica. Es la opción más cara de las tres- Puede requerir una fianza para cubrir posibles desperfectos, como cuando se alquila una casa o una habitación en un piso compartido
* Esto depende de la propiedad de la sala y de lo que diga el dueño.

      Es el momento de la verdad. Tenemos que sentarnos los miembros del grupo y hablar, de manera sincera, abierta y honesta, sobre si estamos dispuestos entre todos a hacer una inversión económica para ensayar en condiciones en caso de no tener ninguna sala que podamos adecentar. Si uno de tus miembros tiene una casa en el campo y tocando ahí no molestáis a nadie, eso puede ser una maravilla. Os libráis de tener que pagar nada y ensayáis cuando os apetezca de manera libre y sin ataduras. Un sótano o una habitación insonorizadas en casa de alguno de vosotros también puede servir. El problema con las salas de ensayo que no se encuentran en un centro especializado es que podéis molestar. Y no, no se arregla «tocando más bajito».

      El día en el que os preparéis para un concierto tenéis que estar acostumbrados a tocar alto, a escuchar al otro a través de un volumen que luego no os puede impresionar en mitad del concierto. Tenéis que saber lo que es tocar a un volumen de concierto pequeño normal, como si tocarais en una cafetería o una sala de conciertos muy pequeña. No podéis tocar siempre en acústico a menos que os consideréis un grupo en acústico. Lo más importante es que, si la batería no es electrónica, que no molestéis a los vecinos o a la gente que viva cerca con ese instrumento, que es, por regla general, el que más se oye y el que más suele molestar. De todas formas, como ya hemos dicho, las guitarras, el bajo, la voz, los teclados, la flauta travesera... todo tiene que poder tocarse a un volumen relativamente alto para prepararnos bien para los conciertos. Y para qué vamos a mentir... el rock se escucha mejor a un volumen más alto, ¿no?

      Para elegir la opción que mejor se adapte a las necesidades de nuestro grupo primero tenemos que saber cuánto espacio necesitamos. Obviamente, no es lo mismo que nuestro grupo lo compongan cuatro personas que siete u once. El espacio tiene que ser lo suficientemente amplio como para no estar chocándose con los codos. Antes que buscar una sala de ensayo profesional y estar más apretados que en el metro, mejor ahorrar un poco y buscar una sala más espaciada. Cuando empecéis a reconocer el olor a sudor de vuestros compañeros agradeceréis este sabio consejo, y más si vuestra sala de ensayo tiene una ventana, porque el olor a persona haciendo música durante horas no es que sea del todo agradable. Por todos estos motivos y todas estas cuestiones, para tomar esta decisión, os tenéis que sentar y hablar libremente de cuánto dinero podéis o estáis dispuestos a poner cada uno, y establecer una serie de prioridades, teniendo en cuenta el equipo de cada uno y la dimensión de los amplificadores, la batería y el espacio personal que necesita cada uno. Pongámonos manos a la obra pues.

      Salas de ensayo profesionales

      Llamamos salas de ensayo profesionales a las salas situadas en centros especialmente preparados para que los músicos ensayen. Son salas por las que se paga un dinero por su alquiler (a veces simbólico si son de gestión pública, del Ayuntamiento por ejemplo), y puede cobrarse por horas, por días, o mediante un pago fijo al mes. Estas salas están bien insonorizadas y aunque a veces es posible que escuches a los grupos de tu alrededor, al menos no molestarás a nadie. Si no están bien insonorizadas del todo suelen colocarse en polígonos industriales lejanos a la ciudad, de modo que no molestan al resto de mortales.

      La disponibilidad de salas de ensayo profesionales o preparadas depende de la demanda. Cuantos más músicos haya en tu ciudad, más demanda de salas de ensayo habrá, y por consiguiente, más afluencia de músicos y menos salas disponibles. Es todo un equilibrio que se organiza según la oferta y la demanda. Lo mejor que os podría pasar es que la escena musical estuviera lo suficientemente activa en vuestra área como para que hubiera un par de salas libres a un precio no muy elevado. ¿Y cómo podemos localizar esas salas de ensayo? Pues muy sencillo, aquí tienes varias opciones muy sencillas:

      Estas opciones varían según la zona en la que queráis ensayar. Si lo queréis hacer en el centro de una ciudad con mucha vida a lo mejor os abruma la cantidad de ofertas que podéis encontrar. Sin embargo, la oferta y la demanda jugarán a vuestro favor y podréis encontrar, probablemente, alguna opción más barata de lo habitual. Ya lo hemos dicho antes, dependerá de la oferta y la demanda. Si por el contrario vivís en un pueblo, localidad o zona donde no hay mucho movimiento y menos en el ámbito musical, tal vez os es muy fácil encontrar salas de ensayo (habrá una, a lo sumo) pero el precio puede que sea más elevado. Teniendo en cuenta esta serie de factores, lo mejor que podéis hacer es elaborar una tabla