adquisición de (auto)conocimiento. En realidad, Pym lleva a cabo un viaje iniciático, un rito de paso en el que acumula experiencia. La bodega del Grampus es para él una suerte de útero del que «renacerá» para continuar con su travesía vital, que terminará por llevarle a los confines del mundo conocido, después de completar un segundo ciclo de enterramiento-renacimiento en la oscuridad de la caverna, seno de la madre tierra, y la navegación por las aguas cálidas que representan, según esta lectura, una suerte de líquido amniótico. Algunos críticos han querido ver en el «enterramiento» de Arthur y Peters en la caverna y su posterior salida de las «entrañas de la tierra» después de tres días un trasunto de la muerte y resurrección de Cristo. En consonancia con dicha interpretación, se ha entendido que la helada imagen gigantesca con la que se cierra la narración podría representar a una figura divina o angelical. ¿Se trata, pues, de un ser benéfico que garantiza un significado de futura felicidad y libertad? Es una de las posibles hipótesis relativas a la identificación de dicho ente o visión, garantizada quizá por el hecho de que tanto Pym como Peters sobreviven al incidente, pero no existe una certeza de ello. La narración de Poe resiste toda exégesis: el relato es enigmático y cualquier intento de esclarecerlo en su significado último resulta vano, al igual que es imposible discernir el sentido de los jeroglíficos y las extrañas palabras de los nativos de Tsalal, sobre las que cualquier aproximación filológica, por muy erudita y sesuda que parezca, resulta fallida. De igual manera, no hay modo de descifrar el balbuceo de Augustus poco antes de enfrentarse a la muerte, la más misteriosa de todas las experiencias.
El texto es un epítome de incertidumbre e indecisión. En consecuencia, evidencia los posibles efectos de la locura, reflejando una vacilación constante entre el sueño y la vigilia, entre la «realidad» y la ficción, urdida por los estados distorsionados de la mente, una constante en la narrativa poeniana. Las situaciones límite que sufren los personajes ‒Pym sobre todo‒ les hacen traspasar los umbrales de la insania. Mucho se ha debatido por parte de la crítica especializada acerca de las inconsistencias y errores narrativos de la obra, por lo general atribuidos a la supuesta prisa o el descuido con los que Poe la escribió: la repentina y nunca esclarecida desaparición de Tiger, el perro de Pym; el hecho de que este señale que su amigo Augustus le contó todo lo sucedido en el motín del Grampus muchos años más tarde, cuando en realidad muere unos pocos capítulos después; el papel en blanco que Pym cree que es un mensaje de Augustus, y que luego resultará que está escrito por la cara posterior... estos y otros elementos han determinado para algunos la falibilidad última del texto. Sin embargo, dejando aparte que no intervienen para nada en el disfrute de la obra por parte del lector, también son indicio de los mecanismos de la mente trastornada del narrador, acuciado por sucesos extremos que le hacen ver la realidad a través de un espejo deformado, fluctuando entre la realidad y lo que él cree percibir. Mediante este aspecto fundamental, una vez más, se subraya la indeterminación del texto poeniano, que desafía todo intento de desentrañarlo de manera convencional.
En última instancia, Pym es una magnífica novela de aventuras que capta desde el primer momento la atención del lector, que asiste intrigado a la fabulosa concatenación de peripecias en las que se ve envuelto el personaje principal: la odisea marítima en el Grampus, preludiada por la del Ariel[17]; las penalidades ocurridas en el barco (enclaustramiento y aprisionamiento, motín, lucha, heridas, hambre y sed, desamparo y desesperación, espantosas tormentas, encuentro con la embarcación colmada de cadáveres, canibalismo); la salvación a bordo del Jane Guy y la exploración de evocadores territorios por los mares del Sur; el periplo hacia el Polo Sur, y el infausto encuentro con los nativos de Tsalal; y, por último, el final abierto y sobrecogedor, culminado por la nota final, que aún introduce mayor perplejidad en cuanto a la expectativa de una resolución de los enigmas planteados, subrayando la consiguiente alienación mediante los criptogramas o jeroglíficos, y el lenguaje ignoto de los nativos. Y todo ello acompañado de un uso asombroso del lenguaje narrativo preciso, evocador y flexible, que tanto sirve para referir con aterradora crudeza los sucesos más impactantes y violentos, como para ofrecer al lector portentosas descripciones de la naturaleza y sus elementos característicos en sus estados más extraordinarios, bellos y sublimes. La narración de Arthur Gordon Pym de Nantucket es sin duda una muestra prodigiosa del arte literario de Edgar Allan Poe y de su pasión por contar.
Antonio Ballesteros González
Bibliografía selecta
Ediciones en inglés de The Narrative of Arthur Gordon Pym (por orden cronológico):
Original: Nueva York, Harper and Brothers, 1838; Londres, Wiley and Putnam, 1838.
Kaplan, Sidney (ed.), Nueva York, Hill & Wang, 1960.
Beaver, Harold (ed.), Nueva York, Penguin, 1986.
Kopley, Richard (ed.), Nueva York, Penguin, 1999.
Kennedy, J. Gerald (ed.), Nueva York, Oxford University Press, 2008.
Nuestra edición se basa en el texto original editado por Richard Kopley. Siguiendo su criterio, análogo al de la gran mayoría de editores, se utiliza la numeración corrida de los capítulos, en lugar de aparecer dos de ellos bajo el número XXIII. Véase la «Introducción» al respecto.
Ediciones relevantes de antologías y obras completas (por orden cronológico):
Mabbot, Thomas Olive (ed.), Collected Works of Edgar Allan Poe, 3 vols., Cambridge, Harvard University Press, 1969-1978.
Thompson, G. R. (ed.), Poetry and Tales, Nueva York, Library of America, 1984.
—, Essays and Reviews, Nueva York, Library of America, 1984.
Piñero, Eulalia (ed.), Narraciones extraordinarias, traducción de Julio Cortázar, Barcelona, Octaedro, 1999.
Poe, Edgar Allan, Todos los cuentos, traducción de Julio Cortázar, Barcelona, Círculo de Lectores, 2004.
Thompson, G. R. (ed.), The Selected Writings of Edgar Allan Poe, Nueva York, Norton, 2004.
Biografías
Allen, Hervey, Israfel: The Life and Times of Edgar Allan Poe, 2 vols., Nueva York, George H. Doran, 1926.
Ackroyd, Peter, Poe: A Life Cut Short, Londres, Vintage, 2009.
Bloomfield, Shelley Costa, The Everything Guide to Edgar Allan Poe. The Life, Times and Work of a Tormented Genius, Avon, Mass., F+W Publications, 2007.
Bonaparte, Marie, The Life and Works of Edgar Allan Poe: A Psychoanalytic Interpretation, traducción del francés al inglés de John Bodker, Londres, Imago, 1949 (1934).
Hammond, J. R., An Edgar Allan Poe Chronology, Nueva York, Macmillan, 1998.
Ingram, John H., Edgar Allan Poe: His Life, Letters and Opinions, Londres, John Hogg, 1880.
Jones, John Isaac, A Quiet Madness: A Biographical Novel of Edgar Allan Poe, Nueva York, John Isaac Jones, 2020.
Kennedy, J. Gerald (ed.), A Historical Guide to Edgar Allan Poe, Nueva York, Oxford University Press, 2001.
Ketterer, David, Edgar Allan Poe: Life, Work and Criticism, York, York University Press, 1989.
Lenning, Walter, E. A. Poe, traducción de Juan Conesa, Barcelona, Salvat, 1988.
Meyers, Jeffrey, Edgar Allan Poe. His Life and Legacy, Londres, John Murray Publishers, 2000 (1992).
Miller, John C., Building Poe Biography, Baton Rouge, Louisiana State University, 1977.
Ocker, J. W., Poe-Land: The Hallowed Haunts of Edgar Allan Poe, Vermont, Countryman Press, 2014.
Ostrom, John (ed.), The Letters of Edgar Allan Poe, Cambridge, Harvard University Press, 1948.
Peeples, Scott y Van Parys, Michelle, The Man of the Crowd: Edgar Allan Poe and the City, Princeton, Princeton University Press, 2020.
Phillips, Mary Elizabeth, Edgar Allan Poe, the Man, Chicago, John C. Wiston, 1926.
Poe, Edgar Allan, Cartas de un poeta (1826-1849), Bárbara Lanati (ed.), traducción