utilidad del trabajo
Hay tiempo para divertirse, cada cosa a su tiempo y ni más ni menos de cada una
Espectáculos públicos y esparcimientos en el perfeccionamiento del individuo
Entretenimiento, esparcimiento y racionalización del tiempo
Archivos y fuentes consultadas
Referencias
LISTADO DE FIGURAS
FIGURA 1. Apuestas del día de San Juan. Ramón Torres Méndez
FIGURA 2. Galleros. Ramón Torres Méndez
FIGURA 3. Cartel de función de ópera, Teatro Maldonado, 1864
FIGURA 4. La montada en corrida de toros, Ramón Torres Méndez. El toro embiste por igual a todas las clases sociales de Bogotá
FIGURA 5. Fachada posterior de la Gran Ópera de París
FIGURA 6. Regatas estudiantiles en Inglaterra
FIGURA 7. Tienda de vender chicha. Ramón Torres Méndez
FIGURA 8. Una mesa de juegos. Ramón Torres Méndez
FIGURA 9. El bambuco. Ramón Torres Méndez
FIGURA 10. Teatro Municipal
FIGURA 11. Cartel publicitario de la empresa Zenardo y Lambardi, 1891 [fragmento]
FIGURA 12. En el hipódromo de La Gran Sabana
FIGURA 13. Fachada del Teatro Maldonado
FIGURA 14. Teatro Colón
FIGURA 15. Vista de la parte central del Teatro Colón
FIGURA 16. Plaza de toros. Aviso publicitario
FIGURA 17. Plaza de toros de Los Mártires
FIGURA 18. Plaza de toros de Los Mártires
FIGURA 19. Palcos en el hipódromo de La Gran Sabana
FIGURA 20. Iglesia de San Francisco y ciclista bogotano
FIGURA 21. Bicicletas Columbia. Aviso publicitario
FIGURA 22. Plaza de toros de Los Mártires y torero en bicicleta
FIGURA 23. Velocípedos. Aviso publicitario
FIGURA 24. Velocípedos. Aviso publicitario
FIGURA 25. Plaza Mayor, Bogotá. Edward Walhouse Mark
FIGURA 26. Camellón de Las Nieves
FIGURA 27. Catedral de Bogotá y parque de la Plaza de Bolívar
FIGURA 28. Plazuela de Las Nieves
FIGURA 29. Inauguración del Parque del Centenario
FIGURA 30. Parque del Centenario
FIGURA 31. Parque de Los Mártires
FIGURA 32. Acera norte del Parque de Santander
FIGURA 33. Parque de la Plaza de Bolívar
FIGURA 34. Acera norte de la Plaza de Bolívar. Los visitantes al parque disfrutando de un rato de solaz
FIGURA 35. Ciclistas. Aviso publicitario
Se han difundido muchos conceptos erróneos sobre la naturaleza del fastidio. Se cree que la novedad y el carácter interesante de su contenido “hacen pasar” el tiempo, es decir, lo abrevian, cuando, en realidad, aunque la monotonía y el vacío alargan sin duda algunas veces el instante y la hora y los hace “fastidiosos”, abrevian y aceleran, hasta reducirlas casi a la nada, las grandes y vastas cantidades de tiempo. […] Los grandes espacios de tiempo, cuando su curso es de una monotonía ininterrumpida, llegan a reducirse en una medida que espanta mortalmente al corazón.
Thomas Mann, La montaña mágica
Los hombres, como los niños, tienen necesidad de jugar, es decir, de periodos de actividad sin más propósito que el goce inmediato. Pero si el juego sirve su propósito, ha de ser posible hallar placer e interés en asuntos no relacionados con el trabajo.
Bertrand Russell, Conocimiento inútil
La publicación de este trabajo ha sido posible gracias a la Editorial de la Pontificia Universidad Javeriana de Bogotá, entidad que confió en las posibilidades de la historia de las diversiones y del ocio para comunicar aspectos de la vida social y cultural del país, que de otra manera no podrían ser contados, y terminarían, entonces, ocultos bajo la idea común de que esos asuntos que forman parte del diario vivir de las personas no tienen un papel importante en la historia de las sociedades.
La investigación se hizo dentro del programa de Doctorado de Investigación en Ciencias Sociales con mención en Sociología de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso) con sede en México. El apoyo financiero brindado por esta entidad y por el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) durante el transcurso del programa permitió culminar un proyecto que en otras circunstancias habría encontrado numerosos obstáculos.
El resultado tiene la impronta del Seminario de Tesis de Sociología e Historia Cultural, dentro del cual se discutieron los primeros trazos para la definición de una línea de partida segura. Debo a sus coordinadores, Santiago Carassale, Liliana Martínez y Nelson Arteaga, un reconocimiento por sus consejos y orientaciones.
Las dudas y dificultades que surgieron durante el periodo de investigación se resolvieron y alivianaron por las amables palabras y reflexiones de los profesores que acompañaron el proceso como directores y evaluadores. Estoy en deuda con mi director de tesis, Santiago Carassale, por su amistad y orientación, por la sinceridad, por las extensas y numerosas charlas; sus consejos, sin duda, definieron buena parte del derrotero que tomó la argumentación. También debo gratitud a mi codirector, Max Hering, quien amablemente aceptó ser parte de este proyecto y cuyos comentarios precisos y críticos permitieron afinar muchos de los argumentos. Christianne Luce Gomes y Renán Silva, evaluadores de la investigación, fueron un grato soporte en diferentes momentos del proceso, me ofrecieron su