«Me pregunto cómo pueden haber recibido la información tan pronto», el malhechor respondió: «Lo que pasa es que el médico que ha examinado al paciente ha emitido un informe directamente a las autoridades de la Ocupación» / «El equipo de desinfección llegará pronto —continuó el villano—, y entretanto todos ustedes tienen que tomarse esta medicina que nos dan las autoridades de la Ocupación. Es una medicina tan potente y eficaz que, si la toman, los hará completamente inmunes a la disentería». Y diciendo eso, sacó unas ampollas, una grande y una pequeña, de su botiquín (un cofrecito metálico como el que usan los médicos, descrito más arriba) / las víctimas, sin sospechar nada de la intención diabólica del autor del crimen, cuya perfecta compostura, así como la verosimilitud de sus explicaciones y su brazalete de la Oficina Metropolitana de Tokio, los habían llevado a otorgarle total credibilidad a sus palabras, formaron un círculo alrededor del hombre, un círculo de desdichadas víctimas, dieciséis en total / a continuación el diablo les dijo: «Esta medicina les dañará el esmalte de los dientes, de manera que yo les enseñaré cómo tragarla. Hagan lo mismo que voy a enseñarles. Hay dos tipos de medicina. Tómense la segunda un minuto después de la primera. Asegúrense de tomarla al cabo de un minuto, o les hará un mal efecto» / después de esa explicación sirvió en las tazas de las víctimas sendas medicinas líquidas, una transparente y otra no, que había sacado de las ampollas con una jeringa para rellenar estilográficas, llenando una jeringa por cabeza / a continuación cogió una taza él también y, diciendo «Hay que beberla así», se tragó su contenido dejándolo caer gota a gota sobre su lengua, que había sacado ahuecada / de manera que las pobres víctimas, sin excepción, se tragaron el líquido letal siguiendo el ejemplo de aquel diablo / el líquido en cuestión quemaba el paladar, y las víctimas tuvieron la sensación de haber tomado un whisky muy fuerte / al cabo de un minuto, el taimado villano les mostró cómo beber la segunda medicina, y nuevamente los pobres inocentes siguieron su ejemplo, sin sospechar para nada que se estaban matando a sí mismos / el villano tuvo el descaro de aconsejarles que se enjuagaran la boca para no dañarse los dientes, y ellos se fueron a beber agua al grifo, que estaba entrando unos metros por el pasillo / fue en aquel momento cuando se vieron invadidos por un letargo repentino y se desplomaron uno a uno en la sala de oficinas, en el pasillo, en la sala de estar, etcétera, quedando sumidos en un estado comatoso / como resultado natural, nadie —más que el diablo y Dios— sabe qué hizo el autor del crimen después de que sus víctimas perdieran el conocimiento / REGLAS QUE HAN DE SEGUIR LOS AGENTES DE LA INVESTIGACIÓN CRIMINAL: (1) Mandar advertencias sin tardanza a bancos, oficinas de correos y otros lugares donde se manejan grandes sumas de dinero, a fin de que no caigan víctimas fáciles de intentos similares. Instituir al mismo tiempo una investigación minuciosa para averiguar si se han hecho otros intentos así en el pasado. (2) Emprender una investigación inmediata para averiguar dónde se imprimió la tarjeta de visita del malhechor, llevando esa búsqueda hasta el último rincón de la Metrópolis donde algún impresor de tarjetas de visita haya podido imprimir dichos artículos. (3) Emprender una investigación inmediata para averiguar si dentro de la zona que se le ha asignado a cada detective vive alguna persona sospechosa que se parezca en algo a la descripción que se ha ofrecido del diabólico autor del crimen. Prestar una atención especial a los empleados de banco, a los oficiales de desinfección y sus ayudantes, y a quienes tengan en su historial el haber sido empleados en el trabajo sanitario de las autoridades de la Ocupación. (4) Examinar a cualquier persona mínimamente sospechosa, con mayor rigor que nunca, prestando una atención especial a su tarjeta de visita, ampollas y botiquín hecho de metal. (5) Intentar recoger pistas relacionadas con todo aquel que haya podido tener negocios u otras conexiones con el banco en cuestión. (6) Rebuscar en la memoria y en los memorandos a cualquier persona con antecedentes criminales (sobre todo de fraude), que guarde algún parecido con el diabólico malhechor antes descrito, ya sea en su fisionomía o en su peculiar forma de cometer crímenes. (7) Emprender una vigilancia secreta de los hábitos diarios y rasgos característicos de todos los oficiales sanitarios metropolitanos, así como de otra gente que lleve a cabo trabajos sanitarios en la Metrópolis. / Insertar: Memorando del Director del Departamento Criminal de la Policía Metropolitana, dirigido a los jefes de todas las comisarías, Tema: Instrucciones relativas al caso del asesinato de los miembros del Banco Teikoku: Aproximadamente a las 15.30 de hoy, un hombre que se ha identificado como miembro de la Sección Sanitaria de la Oficina Metropolitana de Tokio les ha pedido a los dieciséis empleados de la sucursal de Shiinamachi del Banco Teikoku, situado dentro de la jurisdicción de la Comisaría de Mejiro, que se tragaran un veneno líquido que llevaba consigo, diciéndoles que era un remedio preventivo contra la disentería y que debían tomárselo por orden de las Fuerzas de Ocupación, como resultado de lo cual diez de las víctimas han muerto en el acto y dos más en el hospital, y las cuatro víctimas restantes están recibiendo atención médica aunque su destino todavía está en el aire. Este crimen, que se ha cometido a la hora del cierre del banco y usurpando el nombre de las Fuerzas de Ocupación, es uno de los más raros y osados que hemos visto en toda la historia del crimen. En vista de la tremenda repercusión que está teniendo el caso entre la opinión pública, nos vemos obligados, por medio de la cooperación de todas las fuerzas policiales, a llevar a cabo todos los esfuerzos posibles por detener al autor. Por esta razón se les pide que reconozcan la importancia extraordinaria de este caso, que den instrucciones exhaustivas a sus oficiales subordinados acordes con las siguientes reglas de la investigación y que se presenten de inmediato en la sede de la investigación en cuanto obtengan cualquier dato que ayude a la investigación, teniendo siempre cuidado especial de mantenerlo en el más estricto secreto. Se adjunta información sobre los detalles y el lugar del crimen, las víctimas, el autor y una breve crónica del caso. / Nota: en cuanto completen sus tareas, se esperan con impaciencia en la Sede de la Investigación sus informes escritos con presteza / Fin del memorando / se asignan cien detectives al caso / se confirma que mi unidad, la Unidad n.º 2 (Unidad de Asesinatos) de la Primera División de Investigaciones de la Policía Metropolitana de Tokio, está a cargo de la investigación del caso, a las órdenes de mi jefe, el detective inspector Minegishi / Minegishi responderá ante el inspector jefe Suzuki, jefe de la Primera División de Investigaciones, que a su vez responderá ante el jefe Kita de la Policía de Tokio / los detectives de la Unidad de Robos ayudarán en la investigación / divididos en tres equipos de investigación ji-dori / mi pareja será el detective Fukushi / me han asignado la Nagasaki 2-chome / empezamos a interrogar a los vecinos al alba.
27-1-1948; 06.00: Buen tiempo, con vientos del noroeste / interrogatorios calle a calle y puerta a puerta por el vecindario de la Nagasaki 2-chome, en compañía de Fukushi-kun / establecer los nombres y las ocupaciones de todos los residentes / establecer y verificar el paradero de todos los residentes en el momento del crimen / repetir la descripción del sospechoso basada en las declaraciones de los supervivientes / apuntar cualquier posible avistamiento de individuos que encajen con la descripción del sospechoso / apuntar cualquier sugerencia de la identidad del sospechoso que puedan hacer los vecinos basada en la descripción que se les ha proporcionado / 18.00: se nos pide que regresemos a la Sede de la Investigación Especial para una reunión de emergencia / se ha recibido aviso de dos casos parecidos / ha dado aviso del primer caso en la Comisaría de Marunouchi a las 15.30 de esta tarde Taizo (o Yasuzo) Ogawa, director de la sucursal de Nakai del Banco Mitsubishi / el caso se produjo aproximadamente a las 15.20 del 19 de enero del presente año, en la sucursal de Nakai del Banco Mitsubishi, situada en el chome-4, Shimo-ochiai, Shinjuku-ku / de acuerdo con la declaración de Ogawa, llegó un hombre al banco justo cuando estaban cerrando y presentó la misma tarjeta de visita: «Dr. Jiro Yamaguchi, técnico médico adjunto a la Sección Anti-Epidémica del Ministerio de Bienestar» / el visitante le dijo a Ogawa que lo mandaba un tal teniente Porter o Parker para desinfectar toda la sucursal porque aquel mismo día había hecho un depósito allí un hombre llamado Otani de la Compañía Industrial Kinuhara situada en el chome-4, Shimo-ochiai / Ogawa investigó en los registros de la sucursal y encontró un depósito hecho por un hombre llamado Otani de la Compañía Industrial Kinuhara / sin embargo, el depósito no había sido una cantidad en metálico, sino un giro postal de 65 ¥ / Ogawa le mostró el giro postal al visitante / el visitante se sacó del maletín un frasco de líquido transparente e incoloro / el hombre roció el giro postal y el libro de contabilidad con una pequeña cantidad del líquido / Ogawa le preguntó si quería