Jon Kabat-Zinn

La práctica de la atención plena


Скачать книгу

No tengo ni un momento libre

       Llegar al lugar en el que estamos

       Es imposible llegar allí desde aquí

       Desbordados

       Diálogos y discusiones

       Sentados en el estrado

       ¡Usted está loco!

       Cambios de estado

       Tienes lo que haces

       Cualquier idea sobre la práctica es una construcción mental

       ¿Quieres que hagamos algo con ello?

       ¿Quién ganó la Superliga?

       La arrogancia y la complacencia

       La muerte

       Morir antes de morir. I

       Morir antes de morir. II

       Mente no sabe

       De vuelta a casa

       PARTE VII: SANANDO EL CUERPO POLÍTICO

       Sanando el cuerpo político

       Hoy he leído las noticias

       La esterilidad de la indignación

       Una política insólita para el siglo XXI

       Las lecciones de la medicina

       El poder domesticador de lo pequeño

       Atención plena y democracia

       Blues de la meditación sobre Vietnam. Una instantánea del pasado… ¿o es acaso del futuro?

       Cuando la cola menea al perro

       «No sé lo que hubiera hecho sin mi práctica»

       La suspensión de la distracción

       Un minuto de silencio

       La importanccia de la atención plena

       PARTE VIII: DEJA QUE LA BELLEZA QUE AMAS SE MANIFIESTE EN TUS ACTOS

       Diferentes caminos de conocimiento nos hacen más sabios En el umbral: La confluencia del karma y el Dharma.

       Un salto cuántico para el Homo sapiens

       Reflexiones sobre la naturaleza de la naturaleza y el lugar que ocupamos en ella

       El despliegue de las dimensiones ocultas

       Viendo las cosas en perspectiva

       Lecturas relacionadas

       Créditos y permisos

       Material para practicar la meditación de la atención plena

       INTRODUCCIÓN: UN RETO QUE DURA TODA LA VIDA

      Quizás, cuando ya no sepamos qué hacer, emprendamos nuestro auténtico trabajo y, cuando ya no sepamos a dónde ir, iniciemos nuestro auténtico viaje.

      WENDELL BERRY

      No sé lo que, al respecto, pensará el lector pero, en mi opinión, la vida en este planeta está en una encrucijada especialmente crítica y son muchos los caminos que se abren ante nosotros. A veces parece que el mundo está en llamas y que, despojados de convicciones, nuestros corazones están atrapados en la incertidumbre y se ven arrastrados por la pasión y el desatino. La actitud con la que, en esa situación, nos enfrentamos al mundo y a nosotros mismos tiene un efecto muy profundo en el desarrollo de los acontecimientos, razón por la cual lo que el futuro nos depare, tanto individual como colectivamente, dependerá básicamente del uso que hagamos, en este mismo instante, de nuestra capacidad innata de ser conscientes, es decir, de lo que decidamos hacer para aliviar la ansiedad, la insatisfacción y el evidente malestar que aquejan a nuestra vida y a nuestra época o, dicho de otro modo, de la forma en que alentemos y protejamos todo lo que es bueno, hermoso y sano tanto en el mundo como en nosotros mismos.

      El reto al que nos enfrentamos, tanto individual como colectivamente, consiste en restablecer el contacto con los sentidos. Son muchos los arroyos que actualmente afluyen –de manera casi inadvertida y peor entendida todavía– al río cada vez más caudaloso de la atención, la compasión y la sabiduría. Ignoramos hacia dónde se dirige esta corriente en la que individual y grupalmente nos hallamos inmersos pero, en cualquiera de los casos, se trata de un viaje colectivo cuyo destino no está fijado de antemano –es decir, de un auténtico viaje–, de un viaje en el que lo que importa no es tanto la meta como el mismo camino. Por ello el modo en que entendamos y afrontemos