del Riñón empieza en las plantas de los pies, serpentea alrededor del tobillo y sube por la cara interna de la pierna. Pasa por la zona de la ingle, asciende por el abdomen y el pecho y termina justo debajo de la clavícula.
El canal del Riñón (derecha)
Las principales funciones de los Riñones son:
• almacenar Qi;
• producir médula y mantener los huesos fuertes;
• mantener el oído en buen estado;
• conservar la fuerza y el color del pelo;
• regular los órganos sexuales y el útero.
Los síntomas comunes de unos Riñones desequilibrados incluyen: problemas urinarios; pérdida de audición e infecciones de oído; problemas de rodilla y en la zona lumbar; problemas en los dientes; alteraciones respiratorias, en particular dificultad al inhalar, y un exceso de energía sexual.
Vejiga
El canal de la Vejiga recorre todo el cuerpo. Nace cerca de los globos oculares, entre los ojos, y zigzaguea por la cabeza. Luego baja recto por la espalda dos veces, continúa por las nalgas y por el centro de la cara posterior de las piernas, y sigue por el lateral externo del pie para terminar en el dedo pequeño.
El canal de la Vejiga (izquierda)
Las principales funciones de la Vejiga son:
• almacenar y liberar líquidos que le envían los Riñones;
• estabilizar tejidos y órganos del cuerpo.
Algunos de los síntomas habituales de una Vejiga desequilibrada son: lumbalgia; ciática; problemas urinarios, como la cistitis; trastornos oculares, y problemas genitales y reproductores.
Los órganos madera
Hígado
El canal del Hígado empieza en el dedo gordo y gira para subir por la cara interna de la pierna, pasa por la ingle y finaliza cerca de la base de la caja torácica.
Las principales funciones del Hígado son:
El canal del Hígado (derecha)
• mover y almacenar sangre;
• garantizar que el Qi discurre de forma fluida por el cuerpo;
• alimentar los tendones y prevenir puntos débiles y calambres.
Son síntomas habituales de un Hígado desequilibrado, entre otros: cefaleas (en particular en las sienes y detrás de los ojos); dolores en el cuello y los hombros; hinchazón; trastornos oculares; depresión; irritabilidad; náuseas; gases; nudos en la garganta; problemas para tragar; uñas quebradizas y períodos dolorosos e irregulares.
Vesícula biliar
El canal de la Vesícula Biliar parte de la sien, cerca del rabillo del ojo. A continuación va y viene por la parte superior de la cabeza, y desciende por el cuello y el hombro para luego bajar por un costado del cuerpo hasta llegar a la ingle. Da la vuelta por la cadera y baja por el lado externo de la pierna para terminar en el cuarto dedo del pie.
El canal de la Vesícula Biliar (izquierda)
Las principales funciones de la Vesícula Biliar son:
• almacenar y excretar bilis para contribuir a la digestión;
• asegurar que los tendones están nutridos;
• ayudar en la toma de decisiones.
Algunos de los síntomas frecuentes de una Vesícula Biliar desequilibrada son: ciática; dolor en el pecho, el cuello y los hombros; cefaleas (en particular en un lado de la cabeza); incapacidad para digerir las grasas; mareos; suspiros y falta de valor.
Los demás canales
Además de los doce canales asociados a órganos, existen varios canales más que no lo están. Los más importantes de ellos, para el propósito de este libro, son el canal de la Concepción, o Ren, y el canal del Gobernador, o Du. Ambos son fáciles de localizar en cualquier gráfico de medicina oriental. El canal Ren asciende por la línea central del cuerpo, pasa por el cuello y termina en la boca. El canal Du sube por la línea central de la espalda, pasa por la cabeza, baja hacia la nariz y finaliza encima del labio superior.
El canal Ren (centro)
El canal Du (derecha)
Ambos son cruciales para tratar desequilibrios y problemas de salud, en general, pero el canal Du incide de forma determinante en los problemas asociados con la espalda, y el canal Ren siempre está relacionado con problemas abdominales, ginecológicos y de pecho.
Capítulo 5
Uno de los aspectos más importantes de los cinco elementos en relación con la salud son nuestros sentimientos; lo que sentimos puede realmente hacernos enfermar.
Cada elemento y órgano asociado pueden resultar sumamente afectados por un sentimiento en particular. Normalmente, en personas sanas el efecto sólo es a corto plazo, pero si el sentimiento no se expresa durante mucho tiempo, puede causar toda una serie de problemas de salud.
Con frecuencia, las personas se quejan de molestias que han empezado al poco de haber sufrido un trastorno emocional: un problema cutáneo tras la muerte de un ser querido; trastornos intestinales cuando una hija única muy amada se va a estudiar a la universidad; tortícolis o dolor en un hombro tras una semana particularmente estresante y frustrante en el trabajo. No siempre percibimos la relación existente entre estos hechos y las alteraciones de la salud resultantes, y en caso de que la percibamos, a menudo lo consideramos una coincidencia, dado que no tiene explicación en términos convencionales.
A muchas personas les parece más fácil tratar un eczema con una pomada de esteroides que verlo como un efecto de la pena: la pena ha destruido el equilibrio en el elemento metal y sus dos órganos, los Pulmones y el Intestino Grueso. El desequilibrio en los Pulmones se ha extendido a la piel porque, en medicina oriental, este órgano tiene la función de regular la piel. Una de las facetas clave del tratamiento del eczema sería reforzar el metal, de modo que se pueda tratar la pena y lograr así que la piel mejore.
Del mismo modo, unas pastillas pueden atenuar la ansiedad y la preocupación de una madre durante un tiempo, pero la causa de su problema de ansiedad es que su elemento tierra está débil, y reforzar su Estómago y su Bazo mediante una dieta y un tratamiento es preferible al daño que la medicación puede causar en la pared del estómago.
Un tortícolis y un dolor en el hombro también se pueden aliviar temporalmente con pastillas e inyecciones. No obstante, si no se reconoce que la frustración frena el flujo del Qi en los canales del cuello y los hombros y lo bloquea debido a un desequilibrio en el Hígado, y se aplica un tratamiento oriental adecuado, es posible que el problema no llegue a desaparecer nunca.
En muchas personas, los sentimientos van y vienen, no sufren problemas emocionales