“la torpeza que sabe de la una-equivocación es el amor”, o “el fracaso del inconsciente es el amor”, traducción con la que titulé mi libro, justamente, Fracaso del inconsciente, amor al síntoma; (18) inconsciente porque l’une-bévue equivoca con la palabra Unwebusste, que es inconsciente en alemán. El inconsciente fracasa y tiene que fracasar porque de lo contrario los análisis serían infinitos; es lo que después Miller llamó fracaso del inconsciente transferencial, diferenciando el inconsciente transferencial del inconsciente real, lo que toma de otro escrito de Lacan. Eric Laurent subraya aquí que el analizante sabe, después de haber dado varias vueltas, es decir, las famosas vueltas dichas de “El atolondradicho”, que repite lo mismo con su partenaire independientemente de cómo sea éste; o sea que la repetición está del lado del analizante y de su objeto de goce y no del lado del otro, no del lado del partenaire, por lo tanto, la partida se juega para él independientemente del objeto elegido. Y es aquí donde Laurent destaca que, al contrario de lo que había hecho el primer Lacan, a esta altura de su enseñanza le da mucha importancia a la tercera identificación freudiana, esa en la que el objeto es indiferente, como se puede observar en las muchachas del internado, según la cual todas las colegialas se desmayaban cuando una recibía una carta de amor. En este caso ya no se trata de la primera identificación que era el lazo de amor al padre, porque no hay ninguna garantía del amor al padre ni ninguna garantía del Nombre del padre. Al revés, lo que hay es la identificación a un rasgo particular y a la vez esta indiferenciación del objeto que es lo que hace que el sujeto repita en su fantasma lo mismo, y que aprenda a saber hacer algo con eso mismo que repite en su fantasma y también en su síntoma, repetición que tomará otro sesgo, se inventará algo distinto, no se trata de que cambie el partenaire sino que tendrá que aprender a hacer algo diferente con eso que repite. Por otra parte, esto hace que se produzca una nueva identificación que se sale por completo de la lógica del to have or not to have, se sale del tener y del ser con el que se jugaba la partida cuando se trataba del falo-castración, y que suple la identificación al Nombre del Padre. ¿Qué es entonces lo que suple la identificación al Nombre del Padre, al Otro, al grafo del deseo? Para Lacan lo que la suple es RSI, real, simbólico e imaginario, y dirá “al que considero que es mi nombre propio”, agregando “…no estoy especialmente orgulloso de ello”. (19) Lo cual creo que es un cierto guiño para decirnos que él no se decreta tan bello y que, por ende, ese es su nombre propio, el de él. Cada uno tendrá que elegir el suyo y por eso el recorrido del análisis va de la identificación del comienzo a la nominación del final, a cómo se nomina el sujeto cuando toma su nombre de sínthoma.
Hay otro capítulo que se podría trabajar, que es el primer capítulo del Seminario 23, El sinthome, en el que Lacan hace referencia a Adán y Eva. Es un capítulo hermoso, difícil pero hermoso porque allí plantea que, si bien Eva nace de una costilla de Adán, y si bien es Adán el que lo nombra todo, para Lacan Adán habla en la lengua de Eva. Es decir, que no es sin Eva y sin la serpiente que Adán puede nombrar, y hace un juego de palabras con la lengua de Eva y de la vida, entre Eve y la vie, que resulta en “la lengua de l’Èvie”. (20) No voy a decir más sobre eso pues lo voy a retomar seguramente en alguna otra clase.
He titulado a mi presentación de hoy “Hombres y mujeres en Lacan: del siglo XX al siglo XXI” a partir de una pregunta con la que terminaría, y que es: ¿se puede hablar todavía de hombres y mujeres? ¿Son válidas las fórmulas de la sexuación? ¿El goce del Uno, del último Lacan y del fin de análisis, coinciden con el goce femenino del lado derecho de las fórmulas? Y la más adecuada de todas, para mí, sería: ¿hay más de dos modos de gozar?, por supuesto cualquiera sea el sexo biológico de quien se ubique de un lado o del otro. ¿Hay más de dos modos de gozar o son siempre dos?, por más colectivos y grupos que se formen reivindicando comunidades de goce más y más pequeñas. Eso mismo planteé en el Congreso de París del 2014 y recuerdo que Juan Carlos Indart, que coordinaba la mesa en la que presenté, dijo que para él siempre había dos y solo dos modos de gozar. Entonces estamos aquí seis años después discutiendo estas cosas a las que yo creo que Fabián Fajnwaks tiene mucho que aportar.
DESGRABACIÓN: ILAN BRONSTEIN
*- Trabajo publicado en la revista Enlaces 26, Grama, Bs. As., 2020.
1- Torres M.; Katz, L., Los nudos del amor, Dorrego, Bs. As., 1998.
2- Cf. Capítulo 2 “Más allá del falo” de este libro.
3- Russo, P.; Torres, M., “Lo real del dos y los medio-decires”, Los nudos del amor, op. cit., pp. 143-170.
4- Sánchez, B.; Russo P.; Katz, L., “La comunidad de los amantes”, Los nudos del amor, op. cit., pp. 239-254.
5- Fajnwaks, F.; Torres, M., “El amor como suplencia a la no relación sexual”, El sexo es un decir, Cuadernillo, Bs. As., 1997.
6- Sánchez, B., “El goce en el arte del justo amor”, cap. 2 “Más allá del falo”.
7- Miller, J.-A., “Paradigmas del goce”, La experiencia de lo real en la clínica psicoanalítica, Paidós, Bs. As., 2003, pp. 221-240.
8- Miller, J.-A., “Períodos en la enseñanza de Lacan”, El ultimísimo Lacan, Paidós, Bs. As., 2014, pp. 197-214.
9- Lacan, J., Hablo a las paredes, Paidós, Bs. As., 2012, p. 68 (el subrayado es nuestro).
10- Lacan, J., “Dios y el goce de La (La tachada) mujer”, El Seminario, Libro 20, Aun, Paidós, Bs. As., 1991.
11- Sánchez, B., “El goce en el arte del justo amor”, op. cit.
12- Torres, M., “La ruptura entre la identificación y la nominación”, Lecturas on-line Enlaces 25, en <https://www.revistaenlaces.com.ar/wp-content/uploads/E25-1-la-ruptura-entre-la-identificacion-y-la-nominacion-monica-torres.pdf>
13- Laurent, E., El reverso de la bioplítica, Grama, Bs. As., 2016, pp. 50-53.
14- Lacan, J., “Joyce el Síntoma”, Otros escritos, Paidós, Bs. As., 2012, p. 595.
15- Lacan, J., clase del 16 de noviembre de 1976, Seminario 22, “RSI”, inédito.
16- Laurent, E., El reverso de la biopolítica, op. cit., p. 62.
17- Lacan, J., Seminario 24 “L’insu que sait de l’une-bévue s’aile á mourre”, inédito.
18- Torres, M., Fracaso del inconsciente, amor al síntoma, Grama, Bs. As., 2008.
19-