y los dioses modernos: Historia del protestantismo en el Ecuador (Quito: Corporación Editora Nacional, 1989).
17 Juan Pablo Somiedo García, «La influencia de la geopolítica estadounidense en la teología de la liberación latinoamericana en el periodo 1960-1990», Geop 5/1 (2014): 87.
18 Ibíd.
19 Documento de Santa Fe ([12 junio 2020]); disponible en http://www.offnews.info/downloads/santafe1.PDF.
20 Sagrada Congregación para la doctrina de la fe, Instrucción sobre algunos aspectos de la «teología de la liberación» (6 de agosto 1984 [12 de junio 2020]); disponible en http://www.vatican.va/roman_curia/congregations/cfaith/documents/rc_con_cfaith_doc_19840806_theology-liberation_sp.html.
21 Milton Mejía, «Una aproximación a la forma de hacer teología protestante reformada», en Teología reformada y desafíos contemporáneos, ed. César Carhuachín y Milton Mejía (Barranquilla: Corporación Universitaria Reformada y clai, 2017), 178.
22 Ibíd.
23 Ibíd., 180.
24 Milton Schwantes, «Anotaciones sobre la teología luterana en América Latina», en Acción Social, Obra de la iglesia luterana. Informe del ii Seminario-Taller, Lima 7 al 13 de julio de 1985, (Lima: Lutheran World Relief, 1985), 150.
25 Sidney H. Rooy, Lutero y la misión: Teología y práctica de la misión en Martín Lutero (Saint Louis: Concordia, 2005), 91.
26 Federico R. Meléndez, Ética y economía: El legado de Juan Wesley a la iglesia en América Latina, (Buenos Aires: Kairos, 2006), 104.
27 Ibíd., 136.
28 Miguel Núñez, El poder de la Palabra para transformar una nación: Un llamado bíblico e histórico a la iglesia latinoamericana (Medellín: Poiema, 2017), 5-17.
29 Para un recuento de la historia de Europa medieval ver, Justo L. González, Historia del Cristianismo, vol. 1 (Miami: Spanish House, 1994), desde el capítulo 29 hasta el final.
30 José Miguez Bonino, La fe en busca de la eficacia (Salamanca: Sígueme, 1977), 39-40.
31 Tim Marshall, Prisoners of Geography: Ten Maps that Tell You Everything You Need to Know about Global Politics (London: Elliot and Thomson, 2016), particularmente las páginas 89-113.
32 Esto lo explico detalladamente en, Latin American Evangelical Theology in the 1970’s: The Golden Decade (Leiden: Brill, 2009), capítulo 2.
33 Pablo Moreno, «Reforma de Reformas», en 500 años de las reformas protestantes, 1517-2017: Discusiones interdisciplinarias, ed. Atahualpa Hernández M. y Fernando A. Sanmiguel M. (Bogotá: Corporación Honorable Presbiterio Central, Iglesia Presbiteriana de Colombia e Iglesia Luterana de Colombia, 2017), 142.
Capítulo 2
Imágenes de Dios en América Latina
Nelson Morales Fredes
La América de finales del siglo quince vio llegar a marinos en carabelas y junto con ellos una cruz. Pronto, nuevas oleadas de europeos traerían consigo su fe y su concepción de Dios. Como resultado de aquella peregrinación de europeos, gran parte de la imagen de Dios que nos hemos forjado por estas latitudes ha sido moldeada profundamente por un diálogo entre las ideas que ellos traían y las que existían ya en el continente. Con los siglos, nuevos visitantes en barco y avión arribaron desde Europa y Norteamérica con nuevas ideas e imágenes de Dios, que de alguna u otra forma echaron raíces en nuestras tierras. Paralelamente, se fueron cultivando otras imágenes de Dios producto de la reflexión y vivencias propias de nuestra región. De esta manera resulta difícil hoy —si no imposible— dibujar una sola imagen de Dios en América Latina.
Naturalmente, una imagen vital en el cristianismo latinoamericano es la del Dios creador de los cielos y la tierra, que expresa su amor a su creación por medio de la obra redentora de su Hijo, que murió y resucitó, que ascendió a los cielos y que desde allí gobierna y desde ahí volverá. Ese Dios creador es un Dios que reparte sus dádivas a su pueblo por medio de su Espíritu. Al mismo tiempo, es un Dios que tiene control de la historia y la conduce hacia su meta. Esta historia culmina con cielos nuevos y nueva tierra, el juicio de los impíos, la vindicación de los justos, y la instauración de un reino eterno, en el que mora la justicia. Esa imagen de Dios ha acompañado al cristianismo desde su irrupción en estas latitudes. Sin embargo, a lo largo de la historia, junto con ella han coexistido otras imágenes que a veces han opacado u ocultado de nuestros ojos al Dios de las Escrituras.
Lastimosamente, el espacio nos limita para ser exhaustivos en la información. En las siguientes líneas, se trata de dar un panorama de algunas imágenes que se repiten en los distintos grupos cristianos a lo largo y ancho del continente y el Caribe. Lo que se hará es un esbozo tipológico de algunas de las imágenes de Dios recurrentes dentro de cada grupo descrito, sin ánimo de caricaturizar o desdibujar la variopinta imagen de Dios presente en América Latina. Sin duda, ayuda en esta tipología el precedente de las imágenes de Jesús que Emilio Antonio Núñez reflejara en El Cristo de Hispanoamérica (1979) o aquellas que Juan A. Mackay plasmara en El otro Cristo español: Un estudio de la historia espiritual de España e Hispanoamérica (1991). A continuación, se presenta un esbozo de las imágenes de Dios en el catolicismo romano clásico, en el pensamiento de la teología de la liberación, la Fraternidad Teológica Latinoamericana, el evangelicalismo tradicional, el neopentecostalismo y la Coalición por el Evangelio.
Imágenes en el catolicismo romano clásico
Partimos con el catolicismo romano, pues sigue siendo el mayor y más antiguo representante del cristianismo en América Latina. Un par de décadas después de la llegada de Colón al Caribe, los españoles comenzaron a usar el Requerimiento de Juan López de Palacios Rubios. En aquel escrito, Dios es presentado como Señor único y eterno, el creador de cielo y tierra y de los seres humanos. Él ha delegado su autoridad a la Iglesia Católica, al papa y a los reyes españoles. Se usaba el requerimiento para obligar a los pobladores de estas tierras a someterse al dominio del papa y de los reyes españoles. No lejos de esos años, en 1524 doce frailes franciscanos llegan a evangelizar la ya maltrecha tierra mexica. En la recopilación del fraile Sahagún de las conversaciones que habrían tenido estos frailes con líderes indígenas, se muestra una imagen de Dios que seguirá aflorando hasta hoy, no solo en la teología popular católica sino también evangélica. Este coloquio dice en su segundo capítulo: «no conocéis al solo verdadero Dios por quien todos vivimos, ni le teméis ni acatáis, mas antes cada día y cada noche le ofendéis en muchas cosas, y por esto habéis incurrido en su ira y desgracia, y está en gran manera enojado contra vosotros. Por esta causa envió delante a sus siervos y vasallos los españoles, para que os castiguen y afligiesen por vuestros