de esta Provincia de San Antonino del Nuevo Reyno de Granada. Santafé, 19 de febrero de 1793. En Archivo General de la Orden de Predicadores (Roma), XIII, n.° 017025, fol. 10r.
96 Representación dirigida al maestro general de la Orden de Predicadores. Santafé, ¿1809? En Archivo General de la Orden de Predicadores (Roma), XIII, n.° 017025, fol. 7r.
97 MOYA René Rafael. “Las autoridades supremas de la orden y la evangelización de América”. En Actas del I Congreso… Op. cit., pág. 858.
98 ARIZA Alberto. Los dominicos... Op. cit., t. 2, págs. 1036-1037.
99 DE ZAMORA Alonso. Historia de la Provincia... Op. cit., libro IV, cap. I, pág. 261.
100 Carta de Fr. Bartolomé de las Casas al Consejo de Indias. Valladolid: marzo de 1551. Citado en ARIZA Alberto. Los dominicos... Op. cit., t. 2, pág. 1040.
101 El nombre de la provincia se tomó de San Antonino de Florencia (+1459), fundador del famoso Convento de San Marcos, y quien encomendó a fray Angélico la realización de sus célebres pinturas en las paredes del claustro. Después fue nombrado arzobispo de Florencia, pues era muy popular en su época entre los fieles y autoridades por su caridad y su don de consejo. En tiempos de la organización de la provincia dominicana en la Nueva Granada, Antonino era el fraile dominico más recientemente canonizado (1523).
102 ARIZA Alberto. Los dominicos… Op. cit., t. 2, págs. 1043-1044.
103 Ibid., pág. 1072.
104 Ibid., pág. 1139.
105 DE ZAMORA Alonso. Historia de la Provincia… Op. cit., cap. IV, pág. 157.
106 La Sabana de Bogotá es una gran explanada ubicada a más de 2.600 metros sobre el nivel del mar, con temperaturas entre los 5 y 20 grados centígrados. Como todo territorio situado en inmediaciones al Ecuador posee dos estaciones: una de lluvias y otra de tiempo seco, con una duración de tres meses cada una. Próxima a los páramos, en tiempos coloniales la Sabana de Bogotá poseía gran cantidad de humedales, lagunas, pequeños ríos y arroyos. Esto hizo que la región tuviera reputación de ser muy húmeda.
107 DÍAZ DÍAZ Rafael Antonio. Esclavitud, región y ciudad. El sistema esclavista urbano-regional en Santafé de Bogotá. 1700-1750. Bogotá: Universidad Javeriana, 2001, pág. 29. ISBN: 9789586833301.
108 El título de ciudad fue otorgado por el rey en 1548. Ese mismo año le concedió escudo de armas para ella y su provincia, la famosa águila negra, con granadas en las patas. En 1550 fue la sede de la Real Audiencia y Obispado, y en 1567, Arzobispado. El rápido sometimiento de la numerosa población indígena fue clave en la decisión de hacer de Santafé la capital de la Audiencia: LEÓN-PORTILLA Miguel et al. América Latina en la época colonial 1. España y América de 1492 a 1808. Barcelona: Crítica, 2003, pág. 138. ISBN: 9788484324072.
109 BORGES Pedro. Historia de la Iglesia en hispanoamérica y Filipinas (siglos XV-XIX). Madrid: Biblioteca de Autores Cristianos, 1992, vol. 1, pág. 341. ISBN: 978-84-7914-054-0.
110 DÍAZ DÍAZ Rafael Antonio. Esclavitud, región… Op. cit., pág. 49.
111 Frank Safford dice que esta región, «conformada por los actuales deparamentos de Cundinamarca y Boyacá, ha estado integrada, cultural y políticamente desde los tiempos precolombinos hasta el presente». PALACIOS Marco y SAFFORD Frank. Colombia. País fragmentado, sociedad dividida. Su historia. Bogotá: Grupo Editorial Norma, 2002, pág. 19. ISBN: 9789580465096.
112 VARGAS LESMES Julián. La sociedad de Santa Fe colonial. Bogotá: Cinep, 1990, pág. 4. ISBN: 9789586440028.
113 PALACIOS Marco y SAFFORD Frank. Colombia… Op. cit., pág. 21.
114 ARIZA Alberto. Los dominicos... Op. cit., t. 1, pág. 376.
115 La tradición bajomedieval mandaba que los conventos de las órdenes mendicantes se establecieran en las periferias de las ciudades, donde la demanda espiritual no podía ser cubierta por las escasas parroquias existentes en esas zonas. También se ubicaron allí por la presión de las autoridades locales, que no habían aceptado de buena gana la fundación de los conventos mendicantes (IZQUIERDO MARTÍN Jesús y LÓPEZ GARCÍA José Miguel. Así en la Corte como en el cielo. Patronato y clientelismo en las comunidades conventuales madrileñas. Siglos XVI-XVIII. Hispania: Revista Española de Historia, 1999, vol. 59, n.° 201, pág. 158. ISSN: 0018-2141). Esta tradición se rompió en América en muchas ocasiones, y lo hicieron especialmente los dominicos, los franciscanos y los agustinos. A diferencia de Europa, donde los conventos urbanos llegaron cuando ya las ciudades estaban creadas y tenían su dinámica propia, en América muchos conventos (masculinos especialmente) nacieron junto con las ciudades, en condiciones de protagonismo, y, por ende, tenían la oportunidad de convertirse (y así lo hicieron) en reguladores de estas.
116 DE ZAMORA Alonso. Historia de la Provincia... Op. cit., pág. 158.
117 Ibid., pág. 158.
118 ARIZA Alberto. Los dominicos... Op. cit., t. 1, págs. 371-372.
119 RUEDA Jorge. “La ciudad en la Colonia”. En SALVAT Manuel, MARTÍN Ricardo y FERNÁNDEZ Amancio (Eds.). Historia del arte colombiano. Vol. III. Barcelona: Salvat Editores, 1986, pág. 858.
120 Ibid., págs. 860-871.
121 LORETO LÓPEZ Rosalva. Los conventos femeninos y el mundo urbano de la Puebla de los Ángeles del siglo XVIII. México: Colegio de México, Centro de Estudios Históricos, 2000. pág. 33. ISBN: 9789681208790.
122 VARGAS LESMES Julián. La sociedad de Santafé... Op. cit., pág. 3.
123 ARIZA Alberto. Los dominicos... Op. cit., t. 1, pág. 370.
124 DE ZAMORA Alonso. Historia de la Provincia... Op.cit., libro II, cap. VII, pág. 176.
125 VARGAS LESMES Julián. La sociedad de Santafé... Op. cit., pág. 3.