Dr. Sam Waldron

El fin de los tiempos


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voluntad de la carne” y es característico de “los hijos de ira”.

      1 Timoteo 6:17-19: A los ricos de este siglo manda que no sean altivos, ni pongan la esperanza en las riquezas, las cuales son inciertas, sino en el Dios vivo, que nos da todas las cosas en abundancia para que las disfrutemos. Que hagan bien, que sean ricos en buenas obras, dadivosos, generosos; atesorando para sí buen fundamento para lo por venir, que echen mano de la vida eterna.” Aquí tenemos el contraste entre las riquezas y la vida de “(ahora) este siglo (y) …lo por venir. La vida venidera es “lo que en verdad es vida” [LBLA].

      Tito 2:12: enseñándonos que, renunciando a la impiedad y a los deseos mundanos, vivamos en este siglo sobria, justa y piadosamente.” El siglo presente (ahora) ha de vivirse con un ojo puesto en la bendita esperanza de la gloriosa manifestación de Cristo mencionada en el versículo 13. Esta esperanza bienaventurada culmina este siglo. No obstante, el versículo 11 enseña que la gracia de Dios que trae la salvación a todos los hombres también se ha manifestado en este siglo.

      Hebreos 6:5: y asimismo gustaron de la buena palabra de Dios y los poderes del siglo venidero.” Los poderes del siglo venidero ya están vigentes en el mundo. Con toda probabilidad esto es una referencia a los dones milagrosos del Espíritu de los cuales los apóstatas “fueron hechos partícipes” en el tiempo de su conversión. Estos poderes sobrenaturales o milagros son una proyección de la edad futura sobrenatural sobre la edad presente.

      La terminología del Nuevo Testamento íntimamente relacionada con la fraseología de los dos siglos es revelada por la perspectiva general anterior. Juan en todos sus escritos del Nuevo Testamento nunca usa siglo ( aion) de la manera descrita anteriormente. En su lugar usa mundo (cosmos). Mientras que este mundo es sinónimo de este siglo, mundo (cosmos) nunca se usa para el siglo venidero por Juan. La razón es probablemente que el término “mundo” para él conllevaba una connotación negativa (Juan 12:25, 31 y 16:11). Este tiempo es sinónimo de el tiempo presente (Mar. 10:30; Rom. 8:18). El tiempo presente de Romanos 8:18 se contrasta con la gloria venidera.

      El mundo (la economía) venidero también tiene su paralelo en Hebreos 2:5: “Porque no sujetó a los ángeles el mundo venidero, acerca del cual estamos hablando”. El reinado de Cristo ya está inaugurado, pero aún no está consumado en Hebreos 2:8-10. La frase, el fin del siglo, es paralela (Mat. 13:22, 39, 40, 49; 24:3; 28:20). Hay variantes textuales en Mateo 13:22, 40 que dicen “el fin de este siglo”, en lugar de “el fin del siglo”. Esto y conceptos que se encuentran en Mateo 13 son paralelos a Lucas 20:34-36 (véase el capítulo siguiente) confirman que esta terminología también es paralela.

      Tanto este siglo como el siglo venidero están compuestos de muchas edades menores que no deben confundirse con los dos siglos. Las muchas edades que componen este siglo son mencionadas en 1 Corintios 10:11 y Hebreos 9:26; y las muchas edades que componen el siglo venidero se mencionan en Efesios 2:7. La identidad exacta y los límites de esas edades menores permanecen sin identificar en esos pasajes y no parecen ser de importancia para la enseñanza bíblica.

      Hay tres conclusiones prácticas garantizadas por este repaso general de la terminología de los dos siglos en el Nuevo Testamento.

      Primera, este repaso de la terminología de los dos siglos y la terminología relacionada manifiesta claramente cómo esta terminología impregna el Nuevo Testamento. La fraseología explícita es frecuente y se extiende a lo largo de la mayoría de los escritores del Nuevo Testamento. La terminología íntimamente relacionada complementa esta terminología en los otros escritores del Nuevo Testamento. En esta terminología, por lo tanto, tenemos un aspecto realmente básico de la enseñanza del Nuevo Testamento. Aquí estamos tocando el corazón latente del esquema bíblico de la historia de la redención y la escatología.

      Segunda, los pasajes considerados anteriormente no se consideran normalmente como pasajes proféticos. No obstante, son unos de los pasajes más claros y literales del Nuevo Testamento. Está claro, pues, que no es necesario desentrañar los misterios de Daniel y Apocalipsis para obtener una comprensión básica de la doctrina bíblica de las últimas cosas. Los pasajes claros, literales y generales, considerados aquí nos proveerán los planos básicos de la escatología.

      Tercera, el lenguaje de los dos siglos (tan crucial para la profecía bíblica) impregna la enseñanza del Nuevo Testamento sobre casi todo. Esta es la razón por la que es tan importante un estudio de la escatología. Nos ayuda a entender más claramente la enseñanza de la Biblia sobre muchas otras cosas.

      El Propio Sistema de la Biblia

      - El Esquema Básico

      EL ESQUEMA BÁSICO de los dos siglos puede explicarse simplemente por medio de tres afirmaciones o proposiciones.

      Proposición 1:

      Este siglo y el siglo venidero tomados juntamente engloban todo el tiempo, incluyendo el tiempo sin fin del estado eterno.

      La manera más simple de poner de relieve la verdad de esta proposición es comparar dos pasajes paralelos en los evangelios: Mateo 12:32 y su paralelo Marcos 3:29. Mateo 12:32 usa la terminología de los dos siglos. Marcos 3:29, el pasaje paralelo, usa un lenguaje diferente pero sinónimo para transmitir el mismo significado. Observa las palabras enfatizadas en ambos pasajes más abajo:

      Mateo 12:32 “A cualquiera que dijere alguna palabra contra el Hijo del Hombre, le será perdonado; pero al que hable contra el Espíritu Santo, no le será perdonado, ni en este siglo ni en el venidero.”

      Marcos 3:29 “pero cualquiera que blasfeme contra el Espíritu Santo, no tiene jamás perdón, sino que es reo de juicio eterno.”

      No es necesario para nuestros propósitos discutir los difíciles asuntos relacionados con el pecado imperdonable. Lo importante para el propósito presente es simplemente que es imperdonable.

      El carácter imperdonable de este pecado se deja claro en ambos pasajes, pero en maneras diferentes. Mateo dice que este pecado no será perdonado ni en este siglo ni en el siglo venidero. Marcos especifica este mismo punto cuando transmite lo que Jesús quiere decir con las palabras: “no tiene jamás perdón, sino que es reo de juicio eterno.” Por lo tanto, aprendemos que un pecado que no es perdonado ni en este siglo ni en el siglo venidero no es perdonado nunca, sino que es un pecado eterno. Claramente, los dos siglos son equivalentes a todo el tiempo. Los dos siglos juntos engloban todo el tiempo incluyendo el tiempo sin fin del estado eterno.

      La misma idea la sugiere Marcos 10:29-30.

      29Respondió Jesús y dijo: De cierto os digo que no hay ninguno que haya dejado casa, o hermanos, o hermanas, o padre, o madre, o mujer, o hijos, o tierras, por causa de mí y del evangelio.

      30 que no reciba cien veces más ahora en este tiempo; casas, hermanos, hermanas, madres, hijos, y tierras, con persecuciones; y en el siglo venidero la vida eterna.”

      La frase, en el siglo venidero la vida eterna, sugiere claramente que la edad que sigue al siglo presente – el siglo venidero – es tan eterna como la vida recibida en él. Si la vida eterna se recibe en el siglo venidero, la implicación es que el siglo venidero es en sí mismo eterno.

      Otro pasaje importante es 1 Timoteo 6:17-19.

      17A los ricos de este siglo manda que no sean altivos, ni pongan la esperanza en las riquezas, las cuales son inciertas, sino en el Dios vivo, que nos da todas las cosas en abundancia para que las disfrutemos.

      18 Que hagan bien, que sean ricos en buenas obras, dadivosos, generosos.

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