American College of Sports Medicine

Manual ACSM para el entrenador personal (Color)


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torácica y la extremidad superior. El hombro presenta un alto grado de movilidad y, como consecuencia de ello, la región que ocupa es muy inestable. Dado que las estructuras óseas del hombro dan lugar a un soporte relativamente escaso, buena parte de la responsabilidad de la estabilidad de esta zona recae en los tejidos blandos, es decir, en músculos, ligamentos y cápsulas articulares. La posibilidad de lesión del hombro es mayor que la de lesión de cadera, que es una enartrosis o articulación esferoidea (3).

      El complejo del hombro es una estructura multiarticular que conforma la unión entre la jaula torácica y la extremidad superior. El hombro presenta un alto grado de movilidad y, como consecuencia de ello, la región que ocupa es muy inestable.

       Estructura

      Huesos Los huesos de la región del hombro comprenden el húmero, la escápula y la clavícula (fig. 3.11). El húmero es un hueso largo, el mayor del brazo. La cabeza humeral es redondeada y se articula con la fosa glenoidea de la escápula. Los tubérculos mayor y menor del húmero son los sitios de inserción de muchos de los músculos que actúan en el hombro. Por su parte, la escápula es un gran hueso triangular que descansa sobre la parte posterior de la jaula torácica, entre la segunda y la séptima costillas en su posición normal. La escápula se dispone sobre el plano de elevación escapular, es decir, inclinada 30° con respecto al plano frontal. La fosa glenoidea de la escápula se enfrenta anterolateralmente. Por su parte, la apófisis acromial se localiza en la cara superior de la escápula y se articula con la clavícula. Esta discurre a unos 60° de la escápula y conforma la unión entre la extremidad superior y el esqueleto de la cabeza y el tronco. La clavícula proporciona protección al haz neuronal denominado «plexo braquial» y al sistema vascular que irriga la extremidad superior, soporta el peso del húmero y ayuda a mantener la posición de la escápula y del propio húmero (36).

      Ligamentos y bolsas Los ligamentos y las bolsas de la región del hombro se muestran en la figura 3.12, y algunas de las estructuras que aparecen en ella se analizan en la presente sección. El ligamento coracohumeral cubre el surco bicipital del húmero (también llamado corredera bicipital) y proporciona estabilidad anteroinferior a la articulación glenohumeral. El ligamento glenohumeral (bandas anterior, media y anteroinferior) refuerza la cápsula anterior y proporciona estabilidad a la articulación del hombro en la mayor parte de los planos de movimiento. El ligamento coracoacromial, localizado en posición superior a la articulación glenohumeral, protege los músculos, los tendones, los nervios y la irrigación de la región, y previene la luxación superior de la cabeza humeral. El ligamento acromioclavicular es el principal ligamento que aporta estabilidad a la articulación homónima. Por su parte, el ligamento coracoclavicular (bandas trapezoide y conoide) evita la luxación superior de la articulación acromioclavicular. Los ligamentos esternoclaviculares (anterior y posterior) ayudan a reforzar la cápsula de la articulación esternoclavicular, en tanto que el ligamento costoclavicular conecta la primera costilla y la clavícula, y el ligamento interclavicular une las dos clavículas y el manubrio. Por último, la bolsa subacromial (subdeltoidea), que se sitúa entre los tendones del supraespinoso y el deltoides, facilita el deslizamiento y el almohadillado de estas estructuras, en especial en la abducción del hombro (4).

      FIGURA 3.11. Huesos y articulaciones de la región del hombro; vista anterior. Tomado de Bickley LS, Szilagyi P. Bates’ Guide to Physical Examination and History Taking. 8th ed. Philadelphia, PA: Lippincott Williams & Wilkins; 2003, con autorización.

      Articulaciones La región del hombro es un complejo que aúna cuatro articulaciones: la glenohumeral (hombro), la acromioclavicular, la esternoclavicular y la escapulotorácica (v. fig. 3.12). La articulación glenohumeral es una enartrosis o articulación esferoidea caracterizada por ser la que más libremente se mueve de todo el cuerpo. Está conformada por la cabeza esférica del húmero, articulada en la fosa glenoidea de la escápula, pequeña, superficial y, en cierta medida, piriforme. El rodete glenoideo de la escápula (compuesto por fibrocartílago) ahonda la fosa y sirve como amortiguación del impacto de la cabeza humeral en los movimientos forzados (4) (fig. 3.13).

      La articulación acromioclavicular es una articulación sinovial plana en la que se articulan el acromion y el extremo distal de la clavícula. Se desplaza en tres planos simultáneamente, con movimiento escapulotorácico. La articulación esternoclavicular, que une la clavícula proximal con el esternón y el cartílago de la primera costilla, es una articulación sinovial en silla de montar. Se desplaza en sincronización con las otras tres articulaciones de la región del hombro y, hecho importante, aporta la única conexión ósea entre el húmero y los huesos del cráneo y el tronco (38).

      La articulación escapulotorácica no es una articulación verdadera, sino fisiológica (funcional). Está constituida por la articulación de la escápula con la jaula torácica. En la cadena cinemática, cualquier movimiento de la articulación escapulotorácica determina movimiento de las articulaciones acromioclavicular, esternoclavicular y glenohumeral. La escapulotorácica proporciona movilidad y estabilidad para la orientación de la fosa glenoidea y la cabeza del húmero en los movimientos del brazo en cualquier plano (31).

      FIGURA 3.12. Ligamentos y bolsas de la región del hombro; vista anterior. Tomado de Hendrickson T. Massage for Orthopaedic Conditions. Baltimore, MD: Lippincott Williams & Wilkins; 2002, con autorización.

      FIGURA 3.13. Cavidad de la articulación del hombro. Ilustración proporcionada por Anatomical Chart Co., con autorización.

       Movimientos

      Dado que la articulación glenohumeral es una enartrosis, hace posible el movimiento en tres planos: abducciónaducción en el plano frontal, flexión-extensión en el plano sagital, y rotación interna-externa y abducción-aducción horizontal en el plano transversal. Por otro lado, el movimiento multiplanar de circunducción es también posible en esta articulación (38). Los movimientos glenohumerales se ilustran en la figura 3.14, en tanto que los valores normales de la ADM para tales desplazamientos se indican en la tabla 3.4.

      FIGURA 3.14. Movimientos del hombro. A. Abducción-aducción. b. Abducción-aducción horizontales. C. Flexiónextensión y circunducción. D. Rotación interna-externa.

      El centro de rotación de la articulación glenohumeral se sitúa en la cabeza humeral introducida en la fosa glenoidea. En una abducción comprendida entre 0 y 50°, la porción inferior de la cabeza humeral se halla en contacto con la fosa glenoidea, en tanto que entre 50 y 90° es la parte superior de la cabeza la que está en contacto con la fosa. Dado que la fuerza de cizallamiento genera fricción entre las superficies, el giro de la cabeza humeral en el interior de la fosa reduce la tensión sobre la articulación (4).

      La articulación escapulotorácica también se puede mover en tres planos. Estos movimientos incluyen la rotación hacia arriba y hacia abajo, la retracción-protracción, la elevación-depresión, la inclinación anterior-posterior y la rotación medial-lateral (4). Los movimientos articulares escapulotorácicos se muestran en la figura 3.15.

      Ritmo escapulohumeral La abducción completa del brazo requiere movimiento