sonrisa traviesa aparece en sus labios. “Entonces… ¿por qué no te saltas la parte de la cita y le pides que tengan sexo?”
“Te refieres a… ¿procrear?” pregunto yo.
“Sí, ¿por qué no? Podrías decirle o no.” Olive pausa. “Es una sugerencia.”
Pongo mis ojos en blanco. Milo comienza a retorcerse, así que lo suelto. “Tendría que decirle al padre de mi bebé que estaba intentando embarazarme. Es algo decente que debería hacer, Olive.”
Ella se encoge de hombros. “Si eso piensas.”
“Tengo que hacerlo, creo. Personalmente, eso pienso. Pero… ¿cómo puedes pedir eso? ¿Hey, hombre sexy, ¿estaría bien si no usamos protección? Quiero salir embarazada.”
Olive se ríe. “Solo lo emborracharía un poco y le contaría todo. Probablemente ayudaría si te vistes sexy…”
“Aj, no lo sé. Probablemente escuche la palabra bebé y salga huyendo.”
Olive comenzó a pensar. “Muéstrame una fotografía de él”
Yo sacudo mi cabeza. “No tengo una.”
“¿Sabes su nombre?”
“Sí, Jett James.”
“Suena conocido. Hmmm…” Ella saca su teléfono y escribe algo, luego revisa las páginas. “Espera… ¿es él?”
Olive voltea la pantalla de teléfono y Jett está ahí.
“Sip, es él”, digo yo.
“¡Amiga! ¡Está muy caliente! Y era un jugador de béisbol, por eso su nombre suena conocido. Oooh, ¡apuesto a que tiene buenos genes!”
Yo suspiro. “Olive…”
“En serio, ¿es más alto que tú? Dice que mide metro noventa.”
“Sí, bueno… es bastante alto…”
Olive se endereza en su asiento, como si hubiera tomado una decisión.
“De acuerdo, dame tu teléfono.”
Yo la miro de reojo. “¿Para qué?”
“Vas a salir en una cita con este tipo. Si no pasa nada, puedes follártelo y nunca volver a verlo.”
“Oh, no lo sé…”
“¿En serio? Teléfono, ahora”, ordena Olive.
Suelto un sonido de exasperación, luego voy a mi dormitorio por mi teléfono. Ya hay un mensaje de Jett esperándome cuando levanto el teléfono.
Creo que deberíamos salir pronto. Por nuestra relación. ;)
Seguido de, P. D. Te veías increíble en esa falda anoche.
Me sonrojé demasiado, estoy segura de que mis mejillas estaban encendidas. Llevé el teléfono a la cocina.
“Me escribió”, dije yo, ofreciéndole el teléfono a Olive.
Ella lee sus textos y suelta chillidos de alegría. “¡Sí! Vas a salir con él, cien por ciento segura.”
Después de un segundo, ella le escribe solo dos palabras.
¿Esta noche?
Quiero golpearla por enviar sin que yo aceptara, pero luego aparecen tres puntos, indicando que me estaba contestando.
“No puedo creer que hayas hecho eso”, dije yo.
“De nada”, dice Olive, estaba claramente orgullosa de sí misma.
Cuando Jett responde casi salto de la emoción.
Hoy no. Pero estoy libre pasado mañana. Después de las 8. ¿Te parece bien, princesa?
Le quito el teléfono a Olive y muerdo mi labio con preocupación. ¿Ya me está llamando diferente? No puedo decidir si eso es caliente o si se está sobrepasando.
“¿En serio? Este tipo súper caliente te está garantizando que va a aparecer y te dará su regalo. ¡Solo di que sí!” dijo Olive prácticamente gritando. Después de que pasaron algunos segundos y seguía sin decidirme, ella agarra mi teléfono.
Estaré ahí, papi. 😘
“Dios mío, ¿en serio?” chillo yo. “Demonios. ¡No puedo creer que hayas enviado eso!”
“¿Qué es lo peor que puede pasar?” dice Olive. “Ya vas a tener un bebé sola. Además, esto nos lleva a una pregunta muy importante.”
“¿Qué cosa?” pregunto yo.
“Sí. ¿Qué vas a usar? Debe ser algo que diga, tengo clase, pero fóllame, por favor.”
“Oh, cristo…” protesto yo, pero Olive no me está escuchando. Está demasiado ocupada llevándome a mi closet.
Supongo que tendré una cita con Jett James y pronto.
3
Jett
Me despierto temprano, justo antes de que salga el sol. No importa si está lloviendo, nevando o granizando. No importa a la hora que me acosté. Si no estoy en el hospital, yo voy a ejercitarme.
Empujo el cobertor de lino negro y me estiro, totalmente desnudo. A Emily no le gustaba que durmiera desnudo. Pero después de que Emily me dejó hace poco más de un mes, yo volví a intentarlo. Se siente tan bien, solo tu piel y el cobertor, sin ropa que me molestara.
Me levanto y me dirijo al baño, sin preocuparme en encender las luces. En el baño, la luz comienza a encenderse; el inteligente arquitecto colocó tragaluces en toda la casa. El baño cuenta con vigas de cedro desnudas y simples paredes blancas, una temática común en toda la casa. Todo el lugar fue hecho por alguien con mejor gusto y más tiempo libre que yo y era algo mínimo.
Me limpié los dientes en frente del espejo gigante y me inspeccioné. Mi barba estaba muy larga, así que tal vez la corte hoy o mañana. Pauso al mirar el doble lavabo.
No es su lavabo, me recuerdo. Le pertenece a quien tome su lugar.
Me apresuro a buscar mi ropa de gimnasio y luego bajo al sótano. Terminaré mi ejercicio con algo de cardio, pero ahora es momento de levantar algo de peso en el gimnasio de mi casa. Enciendo la luz y toco un botón en la pared para encender la música. El rap comienza a sonar por los parlantes incorporados, fuerte y rápido.
Perfecto.
Empiezo a moverme entre las máquinas, intentando decidir por dónde comenzar. Comienzo fácil con pectorales y luego con trapecio.
Después de mi primera repetición, comienzo a pensar en Emily de nuevo. Tengo muchos sentimientos encontrados sobre ella y sobre el final de nuestra relación. Fue tanto que me tomé un largo fin de semana del trabajo y me fui a acampar solo para intentar descifrar qué es lo que sucedía.
Acampé bajo las estrellas, intentando pensar qué había salido mal exactamente.
Primero que todo, Emily probablemente estaba enojada porque me rehusé a que se mudara conmigo. En realidad, yo había rechazado varias cosas que significaban un compromiso a largo plazo: criar un perro juntos, planificar vacaciones que eran muy lejanas, incluso pedir un plan familiar en el gimnasio que ambos frecuentábamos era mucho para mí.
Era cierto, ella nunca se enojó cada vez que yo rechazaba planes a largo plazo. Su boca se fruncía, sus ojos se entrecerraban, pero nada que me afectara directamente. Así fue como logré ignorar su comportamiento iracundo por tres años: siendo sordo y haciéndome el tonto.
Así que, si iba a aprender algo de mi relación fallida,