múltiples de las/los sujetos afrolatinoamericanos como sujetos políticos. Afinando en este ritmo, uno de los problemas principales que hemos de abordar en este libro es cómo las historias de acción colectiva y las formas de organización y comunidad política de las/los sujetos afrolatinoamericanos/as arrojan luz para entender la política y lo político en general56.
En lo que resta a esta introducción, presentaremos las cinco partes y sus catorce capítulos.
La primera parte del volumen se titula “ Moyugba”, que es la invocación realizada al iniciar un ritual en la regla de Osha o santería cubana, que corresponde a prácticas rituales análogas en África y Brasil. Como apertura del libro, esa primera parte tiene tres capítulos junto a esta introducción. El primer capítulo, titulado “Arqueologías y genealogías de Nuestra Afrolatinoamérica”, intenta presentar una visión panorámica de las trayectorias históricas de los pueblos y sujetos afrodescendientes en América Latina. El segundo capítulo titulado “Hacia una analítica de formaciones étnico-raciales, racismos y política racial”, esboza un argumento general de carácter teórico e histórico sobre la centralidad del racismo y la cuestión étnico-racial en la Modernidad y la importancia de la política racial para los discursos y proyectos de descolonialidad y liberación de los seres humanos y el planeta en general. El tercer capítulo, “¿Qué hay en un nombre? Lenguajes y discursos de afrodescendencia y negritud en Nuestra Afroamérica” elabora una genealogía de la relación entre categorías étnico-raciales, estigmas y políticas de nombramiento en Nuestra Afroamérica, enfocando en discursos sobre negritudes y afrodescendencia.
La segunda parte la llamamos “ Oro Seco”, que es el toque de tambor batá que abre un bembé, que por su parte significa una ofrenda de tambor a las/los Orishas. Esta consiste de dos capítulos. El capítulo cuatro, titulado “Descolonizar la memoria en aras de forjar futuros de liberación: repensar las independencias a la Luz de la Revolución haitiana”, analiza la relevancia histórico-mundial de la Revolución haitiana, su transcendencia ético-política hasta el día de hoy, y sus implicaciones para la política de la memoria y la resultante subyugación de Haití y la revolución que lo constituyó, tanto en el pasado como en el presente. El quinto capítulo, “Contrapunteos afroamericanos: diásporas entrelazadas, afrolatinidades y feminismos descoloniales”, busca teorizar la diáspora africana enfocando en las diásporas afrolatinoamericanas (o afrolatinas) siguiendo un enfoque antipatriarcal de género y sexualidad, con una lectura contrapuntal entre la perspectiva de colonialidad del poder/saber y el afrofeminismo descolonial.
La tercera parte, que titulamos “ Arrollando”, recoge gran parte de la cartografía política de Nuestra América. Se le llama arrollar a un momento de descarga de percusión, de expresión libre, repliegue de talento, y catarsis emocional emancipadora en un ritmo de rumba. De igual manera, arrollar significa el momento que bailamos con la mayor expresión, virtuosidad y libertad durante una conga de carnaval en Santiago de Cuba. El capítulo seis, “Cartografías del campo político afrodescendiente en América Latina”, presenta los criterios analíticos junto con un recuento histórico del pasado reciente para elaborar cartografía del campo político afrodescendiente en la región. El capítulo siete, “Contrapunteos de política afroamericana en la era del neoliberalismo y la crisis global,” analiza las reconfiguraciones de racismo y los desarrollos, debates y perspectivas dentro del mundo afroamericano en la era del neoliberalismo y de la crisis de la civilización occidental capitalista. El capítulo ocho, titulado “Feminismos negros dando a luz nuevas corrientes políticas y epistémicas” hace un sondeo general del afrofeminismo como fuerza transformativa, tanto en el campo político afrolatinoamericano, como en el pensamiento y la política de la región y del mundo.
La cuarta parte del volumen la denominamos “ Ebbó Bembé”, que es un híbrido de dos términos del lenguaje lucumí de la santería cubana: Ebbó que significa limpieza espiritual, sacrificio y despojo de los males que nos acechan, que se les llama Osogbos, y Bembé que, como ya dijimos, es la fiesta de tambores que se les ofrece a las/los Orishas. Los tres capítulos que componen esta sección presentan perspectivas ético-políticas en clave de africanía. El capítulo nueve, titulado “Genealogías descoloniales: hacia una justicia reparativa en clave de africanía”, hace un recorrido histórico y un análisis teórico y político de la justicia reparativa étnico-racial concerniente a los descendientes de la esclavitud africana en las Américas. El capítulo diez, titulado “Apoderamiento, descolonización y democracia sustantiva: afinando principios ético-políticos para las diásporas afroamericanas”, aborda de forma más directa un marco categorial para elaborar una política descolonial de liberación a partir de la experiencia histórica y los sentipensares afroamericanos. Finalmente, el capítulo once, titulado “Horizontes de esperanza en clave afrocolombiana: concibiendo la construcción de escenarios de justicia y paz en Colombia”, explora la articulación de los principios ético-políticos de justicia y paz en el contexto de los procesos de paz en Colombia, enfocando en la cuestión étnico-racial.
La última parte, inspirada por el mambo entendido como metáfora-concepto, se llama “ Mambos finales”, y está compuesta por tres capítulos titulados “Mambo nº. 1”, “Mambo n.º 5” y “¡Qué rico el mambo!”, en honor a tres creaciones memorables del compositor y pianista afrocubano Dámaso Pérez Prado. El capítulo doce, “Contrapunteo racial cubano: doña Nganga Libertad y don Ajiaco Descolonial”, combina un análisis de la filosofía congo cubana, expresa en la religión del palo monte, a partir de una lectura del libro póstumo de Joel James Figarola sobre el tema; a contrapunto, en la segunda parte se hace un recuento de discusiones claves sobre la cuestión racial en Cuba hoy día. El capítulo trece, “Cimarrón, nación y diáspora: contrapunteo de Estados raciales y movimientos afrodescendientes en Colombia y Cuba”, ensaya una lectura contrapuntal de la formación de Estados raciales en relación a las acciones colectivas de afrocubanos/as y afrocolombianas/os en dos tiempos históricos, el momento de las luchas por la independencia y el presente. El capítulo de conclusión, “ Ubuntu y Uramba: palenques planetarios y futuros descoloniales de liberación”, presenta algunas reflexiones sobre los valores y posibilidades de dar a luz un mundo mejor partiendo de las formas de vida, aspiraciones y perspectivas de futuro de las comunidades y los movimientos antisistémicos abanderados a la tradición del panafricanismo crítico radical y