de tu sistema reproductor. Al conocer y comprender tus cualidades, podrás adaptar todo el material de este libro a tus necesidades individuales.
Mujeres que toman anticonceptivos. Si tomas algún tipo de anticonceptivo que suprime el ciclo hormonal natural, te verás limitada respecto al trabajo posible. Si deseas conectar con la energía de tu útero, te recomiendo que en algún momento consideres suspender los anticonceptivos por un tiempo para que puedas reencontrarte con tu cuerpo y fluir con él. Si no deseas hacerlo o no es lo recomendado por tu médica/o, igualmente puedes leer el libro y evaluar si existe en ti la necesidad de conectar con la naturaleza cíclica energética de tu cuerpo.
Mujeres en búsqueda de un embarazo de manera natural. Puedes iniciar este camino y, si quedas embarazada, deberás redireccionar tus energías hacia tu bebé. Hay un capítulo dedicado al embarazo en el que detallo cómo funciona la energía del útero en ese momento particular de la vida femenina.
Mujeres en búsqueda de un embarazo a través de reproducción asistida. Si te encuentras realizando un tratamiento de fertilidad, te recomiendo esperes a finalizarlo para realizar el trabajo que te propone el libro. Los suplementos hormonales funcionan similares a los anticonceptivos, en el sentido de que te alejan de tu ciclo energético natural. Cuando lo finalices, puedes iniciarte en el proceso de tu útero energético y seguramente te será de utilidad. No influirá en el objetivo de lograr un embarazo, pero sí te brindará mucha información sobre ti que probablemente te servirá para comprender las causas de tu imposibilidad.
Mujeres embarazadas. Este es el único caso en el que no recomiendo iniciar un trabajo energético con el útero. Estás excepcionalmente al margen de tu ciclo natural y al servicio de tu bebé, en cuerpo, energía y alma. Eso hace imposible todo trabajo sobre el útero energético. Espera a dar a luz, transita el puerperio, amamanta a tu bebé y, luego, recién considera la propuesta de este libro. En el capítulo dedicado al embarazo encontrarás información al respecto.
Cómo leer este libro
Puedes leer el libro como quieras, pero te recomiendo que lo hagas muchas veces. Si la primera vez lo lees de corrido, luego considera releerlo siguiendo las siguientes pautas.
SEGUIR EL TIEMPO DEL CUERPO
El camino del despertar del útero se trata principalmente de abrir conocimientos y experimentarlos a medida que el cuerpo lo habilita. Eso significa leer este libro respetando los tiempos del cuerpo, de acuerdo con cada momento del ciclo que se va describiendo.
Respetar el tiempo de tu útero es el primer desafío. Estamos desacostumbradas a fluir con el cuerpo. Prácticamente no lo sentimos. Adormecemos nuestros dolores femeninos con calmantes, ignoramos la menstruación sin detenimiento, solo consideramos la ovulación cuando estamos buscando un hijo. El resto de las veces nuestra mente nos lleva de aquí para allá, según un mandato externo, el deber ser y la culpa.
Esta desconexión con el cuerpo femenino es una de las causas de la desarmonía. Si conectamos con el cuerpo y escuchamos lo que nos dice, recordamos y aprendemos. A medida que leas este libro déjate llevar por lo que tu cuerpo te va relatando. Detente si necesitas, vuelve a experimentar. Permite que lo que leas despierte el conocimiento que ya está en tu interior. No te quedes con mis palabras, experimenta, vive lo que aprendes y crea tu propia versión.
HACER TIEMPO Y ESPACIO PARA TI
Para encontrarte con tu útero necesitarás tiempo y espacio disponible solo para ti. Ese es el siguiente desafío: aprender a disponer de recursos para nutrirte a ti misma.
Deberás encontrar espacio en tu agenda semanal para leer y experimentar lo que vas aprendiendo. Tú decides cuánto tiempo. A medida que te adentres en el camino, irás conectando con lo que necesitas desarrollar, comprender o profundizar, y fluirás con eso. Algunas veces necesitarás más tiempo; otras, no tanto. Lo importante es respetar tu propia propuesta, que es la de tu cuerpo, la de tu útero. No te apresures, permítete el tiempo necesario para completar lo que necesitas.
Si vives en pareja y/o tienes hijos, cuéntales brevemente sobre el camino que inicias. A tus hijos enséñales a respetar el espacio y tiempo que necesitas a solas. A tu compañero/a también y ayúdalo/a a comprender que este espacio es personal y que no pone en riesgo a la pareja.
En el trayecto de la práctica con tu útero te encontrarás con emociones, memorias y energías nuevas para ti, y otras antiguas que necesitan ser observadas y depuradas. Así como te abres y recibes a tu cuerpo físico, haz lo mismo con tu cuerpo emocional. No evites sentirte triste, introspectiva, pensativa, abierta, amorosa, sonriente, oculta, misteriosa. Cuando no bloqueamos las emociones que surgen naturalmente, fluyen y se disuelven sin causar sufrimiento.
Si en algún momento necesitas acompañamiento emocional, no dudes en pedirlo a tu pareja, a una amiga o a un profesional.
FINALMENTE, CUIDA TU ENERGÍA
El camino que iniciarás es un recorrido en espiral. A medida que desenrolles la información que te brinda el libro y la correlaciones con tu cuerpo, este camino se irá expandiendo, así como tu energía y tu ser.
No permitas que esta energía se disperse, mantente conectada con el centro, con tu intuición, voluntad y compromiso. Para ello, te recomiendo que este proceso sea personal, único y resguardado. Aprovecha el tiempo para ti. Algunas de las cosas que aprenderás pueden parecerte novedosas y/o aplicables a una amiga o familiar. No corras a contarles tus descubrimientos; capitaliza, primero, la energía en ti, aprópiate del conocimiento a través de la experiencia para luego compartirlo desde el centro de tu ser hacia otras mujeres.
No fuerces a nadie a iniciar este camino, aunque creas que pueda serle de gran ayuda. Respeta los tiempos de cada mujer. Ofrece el camino y permite que cada una tome lo que pueda en cada momento. No te compares, no te expongas ni critiques. Recórrelo con amor hacia ti misma y cuídate mientras transitas tu vulnerabilidad y cambio.
Si en algún momento este recorrido te representa un desafío muy grande o que no puedes afrontar, detente, descansa, regenérate. Tú tampoco debes forzarte a hacer nada, ya has conectado con la posibilidad de despertar y podrás manifestarla cuando sea el tiempo correcto.
Ahora, juntas, comencemos a conocer nuestros úteros.
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La primera vez que consideré a mi útero como un componente de mi cuerpo fue cuando quedé embarazada. Antes de eso, el útero había pasado desapercibido en mi vida. Si bien tuve una educación sexual bastante completa, no fui educada en lo que respecta a la energía del útero.
Al principio de mis veinte años, tenía una idea general de la anatomía del sistema reproductor, sabía muy poco sobre las hormonas femeninas y mi ciclo no me molestaba, siempre y cuando la menstruación llegara. Cuando eso no pasó, me preocupé y cuando, luego del parto, tomé consciencia de mi útero destruido, comencé a ocuparme.
Como yo, muchas mujeres conectan con su útero a través de un embarazo o, por el contrario, cuando el embarazo tan deseado no llega. La infertilidad es la principal causa que trae a las mujeres a mi consulta, la segunda es el dolor menstrual y la tercera, el deseo de poder lograr una sexualidad plena.
Pocas mujeres se acercan a este camino por mera curiosidad. El despertar, generalmente, sucede a través de un catalizador, que en muchos