a escribir él solo, y a gran velocidad, a los 7 años, con todos los dedos y sin mirar el teclado.
Desgraciadamente ese texto se perdió, pero los conceptos quedaron en su memoria.
Descubrió que su vocación no era tocar en público (lo que llama “onanismo emocional”) sino investigar lo que hoy llamaríamos la neuropedagogía del aprendizaje. Había nacido un docente fuera de todo contexto, autodidacta como Edison, económicamente ambicioso como él para poder financiar más investigaciones. Inventó un completo y autárquico sistema pedagógico gracias a la colaboración experimental de los cientos de alumnos de guitarra que tuvo en esa época. Y pudo ayudar a su familia a salir de la miseria. Tal vez haya sido un error haber abandonado sus estudios y no haber compartido el esfuerzo que hacían sus amigos para alcanzar el bachillerato. Pero estaba demasiado ocupado ganándose la vida, investigando el cerebro de sus alumnos y redactando libros como para ponerse a estudiar.
J: Seguramente, pero ¿están de acuerdo conmigo en que es un ejemplo de inteligencias múltiples? Fíjense en todo lo que hizo: los muebles que diseñó, las pinturas, las poesías surrealistas en prosa, los estudios de planes de marketing que escribió, su conocimiento jurídico comercial, su construcción de estrategias de comunicación y su facilidad, desde muy joven, para dictar conferencias y para hablar en las radios.
Y su habilidad para convencer a los demás para que realizaran sus proyectos: a los 16 años, logró convencer al director de la Ópera de Marsella para que organizase un concierto en el ChateauD´If.
También convenció a un grupo de marineros para que ayudasen con el traslado de todo lo necesario desde el viejo puerto hasta la isla.
Y estuvo a punto de lograr que un agente local de seguros hiciese un contrato con la Lloyd Company para asegurar el concierto contra el mal tiempo y que una periodista de una radio marsellesa lo entrevistase en directo.
El concierto nunca tuvo lugar... pero poco importa.
Eran sus inicios de negociador. Lo importante es que logró convencer a todo el mundo, hasta que él mismo empezó a dudar de la factibilidad de su proyecto. Todavía no tenía verdadera experiencia empresarial y ojalá que nunca la tenga.
C: Perdón, pero a mí, particularmente, no me importa si es un superdotado o una reencarnación viviente. Lo que me importa es saber cómo llegó a descubrir sus poderes personales, cómo logró tener esos conocimientos terapéuticos, cómo se entrenó, (o cómo fue iniciado), cómo creó la escuela más avanzada de hipnotismo con la que revolucionó toda la pedagogía demostrándole a toda Francia que, en estado hipnótico, se aprende hasta 40 veces más rápido. Y no podemos dudar de todo esto porque hay archivos que lo confirman. Hay hasta una grabación que hizo NHK TOKYO televisión de sus alumnos manejando autos en estado hipnótico y una emisión especial de ANTENNE 2, televisión nacional, que le dedicó en la noche de un 31 de diciembre. Esto es lo que me interesa. Quiero saber si la medicina puede explicar cómo alguien con sólo 27 años pudo crear tal revolución.
R: Vuelve a leer la introducción del libro el Nuevo Humano y encontrarás esta aclaración de Eric:
Ahora debo contarles lo que nunca conté.
Cuando tenía 7 años, apenas llegado de Argelia como refugiado político, encontré en una vieja enciclopedia un grabado que me impresionó. Me dormí mirándolo y soñé que debía activar algo de fuego en mi columna vertebral.
Impresionado por los colores del sueño, empecé a buscar alguna información en la extensa (y disparatada) biblioteca que había acumulado mi madre y encontré información sobre la Kundalini. Fue una verdadera conmoción. Eso quería decir que, entonces, mi sueño me hablaba de algo que existía, no era simplemente un sueño, ¡era un mensaje!
Quise dormirme rápido al día siguiente y lo hice mirando el mismo grabado
Y, entonces, vi mundos y espacios desconocidos, viajé más allá que todo lo que se puede imaginar.
R: Esto me parece claro. Desde esa edad, la conciencia especial que dormía en Barone comprendió que necesitaba una energía especial para fomentar su propio desarrollo y esa energía fue su kundalini. Supe que, desde esa época, nunca dejó de trabajarla diariamente y que, gracias a ella, llegó a escribir libros en una semana, pudo atender quinientos pacientes por mes, efectuar sanaciones. etc.
J: De acuerdo, aquí tenemos su fuente energética. Él mismo afirma que nada resiste a ‘buena estrategia más una gran fuente energética y que, si se le agrega una gran disciplina, es un éxito seguro. Pero no me convencerán de que es esa sola energía lo que utiliza.
C: Bueno, en esa época, no se hablaba todavía de multiverso. Barone se sincronizó con un concepto milenario: los Registros Akáshicos. Actualmente incorpora nociones modernas del multiverso en muchos de sus escritos más recientes.
Sigamos leyendo lo que él nos cuenta:
Acababa de descubrir mi primera puerta hacia los Registros Akáshicos.
En “EL TERCER OJO” de Lobsang Rampa, un libro desacreditado pero que hizo correctamente su trabajo espiritual, leí una definición sobre estos registros. Esa definición nunca me dejó conforme porque yo no aceptaba que fueran solamente «registros del pasado». Años después pude demostrar que, en realidad, son «la memoria central del universo» y que en ellos se encuentra en forma energética, como en los programas de computación actuales, el modelo de todos los patrones sobre los cuales se construye el universo, las moléculas, nuestro código genético, las estructuras de las sociedades, de la familia. Todo está dentro de la memoria de estos Registros Akáshicos. Por eso podríamos llamarla «la memoria del futuro».
Pero eso lo sé ahora, en ese momento quería saber cómo descifrarlo y hubiera acompañado a Dante al infierno si hubiese sido necesario para que me revelase esos secretos.
(¡Décadas después lo hice!).
Descubrí que las puertas hacia los Registros Akáshicos son muy numerosas y que el problema no es ir allá y regresar mentalmente sano, sino poder leer y decodificar lo que se encuentra para así poder transmitirlo.
Si alguien lo intenta sin tener una sólida cultura o una especialidad, lo enviarán a un lugar parecido a un jardín de juegos infantiles y no traerá nada importante.
J: Observen su mecánica de inducción, reflexión y descubrimiento. Eric aprendió con el mismo mecanismo que utiliza la inteligencia artificial en este momento. Trata grandes acumulaciones de conocimientos desordenados y encuentra patrones que nadie ha visto. Supongo que Barone los compara con esa memoria central del universo que llama los Registros Akáshicos, y deduce, escribe, verifica con experimentación y enseña. Carlos y yo hemos estudiado todo esto con él.
C: Con el riesgo de volverme cargoso, vuelvo a mi preocupación inicial. ¿Cómo pudo Eric llegar a crear un sistema de “Medicina Akáshica” capaz de sacudir nuestros monolíticos conocimientos médicos? ¿Cómo pudo tender ese puente invisible, que sólo él parece ver, entre las medicinas orientales y las occidentales? Esto es lo que busco y quiero comprender en esta biografía. Eso es lo que le dará el carácter epistemológico y marcará, para mí, el descubrimiento del eslabón faltante entre la psique y el soma, entre la psico-inmuno-neuroendocrinología y las medicinas orientales.
J: Si continúas leyendo el Nuevo Humano empezarás a vislumbrar la respuesta:
No pude evitar fascinarme más todavía cuando leí sobre el mundo egipcio. Construí una pirámide destruyendo un mueble que creía que mi abuela no utilizaba. Me dolió mucho comprobar que ella no pensaba lo mismo, pero tuve mi pirámide (y las nalgas doloridas). Experimenté con mi pirámide y descubrí que, cuando ponía carne en ella, la carne se momificaba. A esa misma abuela le hice beber mucha agua que, sin que ella lo supiese, había cargado en la pirámide. Y ella mejoró rápidamente de sus sufrimientos estomacales.
¿Qué pensar de una civilización que practicaba cirugía craneal, (en una tumba se descubrieron cráneos prolijamente operados y aparatos de trepanación), que podía conservar miles de años semillas de trigo en estado de vida suspendida,