Edgar Redondo Ramírez

Un mensaje de @Dios para ti


Скачать книгу

construirle una mejor vivienda y crearle un negocio donde pudieran trabajar para ganar su sustento.

      Los resultados fueron sorprendentes y generaron una reacción positiva en la comunidad. «Si tenemos la verdadera religión de la Biblia, sentiremos que es un deber de amor, bondad e interés el que hemos de cumplir para Cristo en favor de sus hermanos; y no podemos hacer nada menos que mostrar nuestra gratitud por su incomparable amor manifestado hacia nosotros mientras éramos pecadores indignos de su gracia, revelando un profundo interés y un amor abnegado por aquellos que son nuestros hermanos, y que son menos afortunados que nosotros» (El ministerio de la bondad, p. 39). Joven que me lees, tú y yo podemos iniciar un proceso para restaurar a aquellos que lo necesitan. @Dios te dice hoy: «No tienes que ser millonario, basta con renunciar a un poquito de lo que tienes y compartirlo con otros».

      Él pelea por ti

      «El Señor su Dios marcha al frente de ustedes y combatirá por ustedes, tal como vieron que lo hizo en Egipto». Deuteronomio 1: 30

      Moisés estaba llegando al final de su vida. Este pasaje forma parte del primer discurso de despedida del gran líder. Les dice que no deben temer nada porque con ellos está un Dios que es mayor que cualquier problema que pueda presentárseles. ¿Y sabes algo? Ese Dios continúa siendo el mismo hoy.

      Después de diez años de violencia en Colombia, el general Gustavo Rojas Pinilla dio un golpe de Estado a Laureano Gómez. Pero la violencia continuó, y nuestros hermanos y pastores vivieron momentos muy difíciles. Luis Flórez, un colega que vivió durante esa época, me contó que se encontraban en la iglesia de Los Naranjos, en la Bricha Santander. Durante dos semanas habían realizado reuniones para reorganizar las iglesias esparcidas por la cruenta violencia. Él y el pastor Roy Hennberg se hospedaban en la casa de un hermano.

      Después de las labores de la mañana, que incluyó una ceremonia bautismal, estaban recostados en su habitación tomando un descanso para continuar en la tarde. Repentinamente se escuchó a una joven gritando:

      —Huyan, pastores, que los vienen a matar.

      Los dos pastores salieron hacia el templo y en el camino encontraron a los soldados, quienes por orden del comandante los encañonaron y detuvieron. Revólver en mano y bajo el efecto del alcohol, el comandante los sentenció:

      —Ustedes no valen lo que vale una bala. No voy a desperdiciarlas. Si tienen propaganda religiosa nadie los salvará.

      Acto seguido ordenó a uno de sus soldados que revisara el cuarto donde se hospedaban.

      El pastor Flórez pensó en la caja de literatura con temas bíblicos que tenía en el cuarto. Pero el soldado, después de varios minutos, regresó diciendo que no había encontrado nada. Así que después de varias horas de retención les cobraron una multa y los liberaron. El pastor Flórez regresó a la habitación y allí estaba la caja, debajo de tres bultos de maíz que le habían colocado encima y que la ocultaban de la vista. Aquel día el pastor entendió que Dios pelea por sus hijos.

      No sé si estás enfrentando persecución o algún otro tipo de batalla, pero hoy @Dios te dice: «Yo marcho al frente de la juventud, yo pelearé por ti».

      A menos que olvidemos

      «El Señor y Dios de ustedes los ha bendecido en todo lo que han hecho; durante estos cuarenta años ha estado con ustedes y los ha cuidado en su marcha por este inmenso desierto, sin que nada les haya faltado». Deuteronomio 2: 7

      En el libro de Deuteronomio, Moisés les recuerda a los israelitas la providencia divina que experimentaron durante su largo peregrinaje rumbo a la tierra prometida. Hoy deseo transmitirte la misma seguridad que Moisés le transmitió al pueblo. Dios siempre ha estado con nosotros, por eso no tenemos nada que temer al futuro.

      El panorama se hace más oscuro cuando consideramos el alcance global de las redes terroristas. Inquietan las tensiones entre la Unión Europea y Rusia, el rearme de China y sus roces con Japón por el control del espacio marítimo y el empeoramiento de la situación en Oriente Medio. A esto se le suma la falta de credibilidad en las instituciones, tanto públicas como privadas. Podríamos decir la famosa frase del show de Chespirito: «Y ahora, ¿quién podrá defendernos?».

      Es en este contexto que las palabras del versículo de hoy cobran valor. Elena G. de White realizó una declaración muy similar: «Como he participado en todo paso de avance hasta nuestra condición presente, al repasar la historia pasada puedo decir: “¡Alabado sea Dios!”. Al ver lo que el Señor ha hecho, me lleno de admiración y de confianza en Cristo como director. No tenemos nada que temer del futuro, a menos que olvidemos la manera en que el Señor nos ha conducido, y lo que nos ha enseñado en nuestra historia pasada». (Eventos de los últimos días, p. 64). Un famoso dicho dice que «recordar es vivir». Hoy @Dios desea invitarte a recordar, a recordar que él ha estado contigo, que te ha cuidado, protegido y defendido siempre. Si es así, ¿no es lógico suponer que lo hará también en el futuro?

      1 https://ethic.es/2014/11/los-10-grandes-desafios-a-los-que-se-enfrenta-el-mundo/

      No les tengas miedo

      «Si al salir ustedes a combatir a sus enemigos ven que ellos cuentan con caballería y carros de guerra, y con un ejército más numeroso que el de ustedes, no les tengan miedo, pues ustedes cuentan con el Señor su Dios, que los sacó de Egipto». Deuteronomio 20: 1

      Adriana Vega Forero se inscribió para presentar los exámenes de admisión en la Universidad Nacional, programados para los días 29 de abril o 21 de octubre, ambos sábados. Como ella es adventista, presentó ante el departamento de admisiones una petición escrita, donde explicó que «es miembro fiel y activo de la Iglesia Adventista del Séptimo Día», y solicitando la oportunidad de presentar el examen un día diferente al sábado, o por lo menos en un horario diferente, pues «guardamos y consagramos el día sábado a la adoración del Señor desde la puesta del sol del día viernes hasta la puesta del sol del sábado, en conformidad con el mandato bíblico».

      La universidad rechazó la petición. Así que Adriana y su familia decidieron llevar la batalla a las cortes de aquel país. Dado que ella era menor de edad tuvo que recurrir a un proceso que en aquel país se llama «tutela». No obstante, el fallo fue adverso, ya que el tribunal juzgó que «resulta improcedente la tutela teniendo en cuenta que el padre de la accionante funge como agente oficioso de su hija quien está en capacidad física y mental de acudir por sí misma en defensa de sus derechos fundamentales». En vista del resultado, la familia decidió apelar, argumentando que la ley establece que los padres ejercen la patria potestad y representación legal sobre sus hijos hasta que ellos lleguen a la mayoría de edad, siempre y cuando no se hayan emancipado ni suspendido tales facultades.

      En esta segunda instancia lograron que se revocara el fallo anterior y se le diera al padre la facultad de representar a su hija. La universidad impugnó el veredicto y después de mucha lucha, el caso llegó hasta el tribunal constitucional, donde los jueces fallaron: «Se ordena a la Universidad Nacional que efectúe la reprogramación