contenido de las acusaciones de Grant contra el don profético de Elena de White fue tomado primero de otros oponentes. En 1871 Grant publicó un artículo recurriendo al libro de Carver. Acusó a Elena de White de ser un oráculo para los adventistas del séptimo día y la comparó con Ann Lee y los Shakers.364 Este y otros altercados culminaron en su publicación de 1874.
La oposición de Grant se enfocaba casi exclusivamente en la cuestión de la puerta cerrada. Él incluía una cantidad de testimonios de personas que habían estado asociadas con Elena de White durante los primeros años de experiencia de ella. Al igual que Snook, Brinkerhoff, Sheldon y Carver, él argumentaba que las visiones de Elena de White enseñaban que la gracia o la “puerta de la misericordia” se había cerrado al mundo. Estas acusaciones provocaron una respuesta de Elena de White. Ella escribió: “Junto con mis hermanos y hermanas, después del tiempo pasado en 1844, yo creía firmemente que no se convertirían más pecadores. Pero nunca tuve una visión de que no se convertirían más pecadores”.365
Durante 1874, Isaac Wellcome publicó una extensa historia del adventismo millerita temprano. Siguiendo el estilo de las publicaciones en contra de Elena de White, Wellcome la presentó como una partidaria clave del punto de vista de la puerta cerrada. D. M. Canright cuestionó algunas de las afirmaciones de Wellcome, incluyendo su declaración de haber visto a Elena de White en visión.366 El 14 de abril de 1874, la Review and Herald Extra presentó la historia de las interacciones entre Miles Grant y los adventistas del séptimo día.367 Este importante ejemplar también tenía un artículo sobre la base bíblica de la perpetuidad de los dones espirituales.368 Los artículos y las referencias negativas continuaron en el World’s Crisis, Voice of the West y otros periódicos durante la última mitad de la década de 1870.
Publicaciones adventistas del séptimo día de la década de 1870 acerca del don de profecía
Durante la década de 1870, los adventistas del séptimo día prepararon nuevas publicaciones presentando el punto de vista adventista sobre el don de profecía. En 1877, J. H. Waggoner publicó The Spirit of God: Its Offices and Manifestations, to the End of the Christian Age, que trazaba las actividades proféticas y sobrenaturales en la era postapostólica y, en particular, durante los siglos XVIII y XIX.369 Los adventistas, además, continuaron reeditando y expandiendo Miraculous Powers de M. E. Cornell,370 pero se le sacó el nombre de Cornell, quizá porque también contenía material escrito por otros. En 1878, James White publicó otro folleto significativo, titulado Spirit of Prophecy.371 Después, fue ampliado levemente y revisado con el título The Spirit of Prophecy or Perpetuity and Object of the Gifts.372 Las dos ediciones de este folleto cubrían un terreno similar al de los escritos por Cottrell, por Cornell y por Waggoner. Incorporaba una nueva frase general para designar los escritos de Elena de White –“Espíritu de Profecía”– que también aparecía en el título de la serie, de múltiples tomos, que ella escribió sobre el gran conflicto entre Cristo y Satanás.
Acusaciones de supresión y la reedición de Primeros escritos
En el otoño de 1882, apareció Primeros escritos como respuesta a los muchos pedidos que los creyentes hacían de los primeros materiales de Elena de White y para acallar la acusación de supresión.373 El libro se publicó como la segunda edición de Christian Experience and Views, el folleto de 1851, aunque tenía material adicional, incluyendo el tomo 1 de Spiritual Gifts. El prefacio declaraba que “no se realizó ningún cambio de la obra original”.374 G. I. Butler, al dar aviso en la Review and Herald de la publicación de Primeros escritos, quizá con imprudencia, desafió a los oponentes diciendo que ahora los adventistas del séptimo día no podrían ser acusados de suprimir los primeros escritos de Elena de White.375
La Facción Marion tomó el prefacio y la declaración de Butler como un desafío, lo que condujo a una nueva ronda de intercambios. Se retomó la acusación de supresión con nuevo vigor al comparar las declaraciones de Elena de White hechas en A Word to the “Little Flock” (1847) y en Christian Experience and Views (1851) con la edición de 1882 de Primeros escritos. Esta vez, A. C. Long realizó el ataque a través de un artículo en Advent and Sabbath Advocate, que después fue publicado en un folleto de 16 páginas, titulado Comparison of the Early Writings of Mrs. White With Later Publications. Long declaró que se quitaron 59 líneas de texto de la edición de 1851 de Experience and Views, aunque reconocía que la edición de 1882 era una “reedición correcta” del folleto de 1851.376
Como en publicaciones previas de Marion, Iowa, el foco central era la puerta cerrada. La suposición crucial del folleto de Long era la de una visión verbal de la inspiración. Él negaba la naturaleza dinámica del proceso de inspiración y acusaba que, para ser inspirados, los escritos de Elena de White no podían ser alterados. Según su opinión, que ella cambiara u omitiera algo del contenido era “suprimir porciones de la palabra de Dios”.377 A Long se le unieron J. S. Green, abogado adventista del séptimo día de Battle Creek; y Alexander McLearn, el reciente expresidente del Colegio de Battle Creek. McLearn había participado en el conflicto que había llevado a la clausura del Colegio de Battle Creek en 1882.378 Una actividad adicional de la Facción Marion fue la publicación, en 1884, de la tercera edición del folleto de Brinkerhoff en contra de Elena de White.379
En respuesta a la acusación de Long, Butler dijo que la razón por la cual el material antiguo no había sido publicado era porque no estaba disponible para los editores.380 En 1883, agregó que solo recientemente había sabido de la existencia de A Word to the “Little Flock”.381 Elena de White misma, al responder en privado a las acusaciones de Long, escribió que ella había “[perdido] toda huella” de sus “primeras obras publicadas”. Ni siquiera tenía una copia personal de su Experience and Views de 1851. Entonces, ella dijo que quien tuviera “un ejemplar de cualquiera de mis primeras visiones o de todas ellas tal como se publicaron antes de 1851, me haría un gran favor si me los envía sin demora” para que ella pudiera hacer una copia.382 Butler informó también que una reedición de las visiones de Elena de White en A Word to the “Little Flock” estaba disponible para los que estuvieran interesados.383 Cabe señalar que ni siquiera Long, cuando escribió su folleto de 1883, tenía copia de los artículos originales de Day-Star o de las primeras circulares.384 Hoy los investigadores pueden leer con detenimiento todos los documentos originales.
Review and Herald Supplement de 1883
Las publicaciones tempranas más importantes que respondían a los oponentes de Elena de White y presentaban una posición sobre cómo interpretar sus escritos son el cuadernillo de 1866 The Visions of Mrs. E. G. White por Uriah Smith y el Review and Herald Supplement del 14 de agosto de 1883. Este suplemento de 16 páginas tiene muchos artículos significativos, incluyendo dos escritos por G. I. Butler y uno por W. H. Littlejohn. Dos de estos tres artículos –“The Visions” [Las visiones], de Butler, y el de Littlejohn– iban más allá de la apología. El artículo de Butler ocupaba seis columnas y abordaba cómo veían los adventistas las visiones de Elena de White. Él argumentaba que las personas que aceptaban las visiones manifestaban buenos frutos en su vida. Además, argumentó que los adventistas mantenían la Biblia como la “autoridad más alta” para juzgar si un profeta era verdadero o no. Él concluía negando que las “visiones” fueran “una condición para la admisión de los miembros”.385 El breve artículo de Butler “Testimonies Public and Private” [Testimonios públicos y privados] definía la diferencia entre los testimonios públicos y los privados.386 El artículo de nueve columnas escrito por Littlejohn quizá sea el más importante. Él desarrolló un argumento bíblico para los profetas modernos más allá del ampliamente promovido argumento de la “perpetuidad de los dones espirituales”. En un estudio exegético que usaba Apocalipsis 12:17, 14:9 al 12, y 19:10, él concluía que “la última generación de cristianos debe tener el espíritu de profecía”. Además, conectaba Apocalipsis 12:17 con los Mandamientos de Dios y el