de origen (van Eemeren & Garssen, 2010, 2011).27
Un amplio proyecto de Houtlosser y mío acerca de la influencia de las precondiciones institucionales sobre el maniobras estratégicas de confrontación en el dominio político ha sido llevado a cabo por un equipo de investigadores. El fin de Yvon Tonnard (2011) fue dar cuenta de las tácticas de presentación que los políticos pueden usar para que los temas prioritarios de sus partidos se discutan en el debate parlamentario holandés cuando resulta que tales temas no están en la agenda. Dima Mohammed (2009) examinó las respuestas que los miembros de la oposición hacen al primer ministro en la “hora de las preguntas al primer ministro” en la cámara británica de los comunes. Corina Andone (2013) se planteó dar una explicación argumentativa de la forma en que los políticos reaccionan en las entrevistas políticas cuando el entrevistador los acusa de haber adoptado una postura inconsistente con puntos de vista ofrecidos anteriormente. En un proyecto relacionado, enfocado esta vez a la cuestión de cómo es que las condiciones contextuales de los foros de discusión política en internet afectan la manera en que los participantes reaccionan críticamente, Marcin Lewinski (2010) examinó la manera en que las tecnologías en línea crean nuevas posibilidades para el debate público.
En el dominio médico también ocurre que el maniobrar estratégico debe cumplir con las convenciones institucionales (Snoeck Henkemans, 2011). Los médicos tienen la obligación de aclararles a los pacientes que van a consultarlos de que su juicio y sus consejos con sólidos; pero el hecho de que en general doctores y pacientes difieren considerablemente en conocimiento y experiencia médica es una precondición institucional que los doctores necesitan tomar en cuenta en su maniobrar estratégico, por ejemplo cuando aplican su autoridad (Labrie, 2012; Pilgram, 2015).28 La relación entre maniobrar estratégico y precondiciones institucionales se ha examinado también para el caso de los “prospectos y folletos de salubridad” cuyo fin es lograr que el auditorio al que se dirigen coma menos, haga más ejercicio, o haga otras cosas que promueven la buena salud (van Poppel, 2013); y otro tanto se ha hecho, concentrándose también en la argumentación de autoridad, con los anuncios que —sobre todo en Estados Unidos— promueven medicamentos (Wierda, 2015).
La investigación pragma-dialéctica dirigida a determinar las precondiciones institucionales que un contexto académico impone al maniobrar estratégico que tiene lugar en el discurso argumentativo está todavía en pañales. En un primer esfuerzo por adaptar los instrumentos teóricos para implementarlos en este tipo de investigación, Wagemans (2011) propone herramientas para reconstruir y evaluar la argumentación que parte de la opinión de expertos.
Los tipos de actividad comunicativa que han surgido en los diversos dominios comunicativos para cumplir con las exigencias del macro-contexto institucional giran en torno a diferentes tipos de diferencia de opinión, y los tipos de punto de vista en disputa varían desde puntos de vista evaluativos y prescriptivos hasta puntos de vista descriptivos e híbridos que combinan elementos descriptivos, evaluativos y prescriptivos. En combinación con los puntos de partida específicos que caracterizan un tipo o un clúster de tipos de actividad comunicativa, las características específicas de la situación inicial llevarán tanto a clases específicas de intercambios argumentativos en la contraparte empírica de la etapa de argumentación de una discusión crítica como a clases específicas de resultados.
Las diferencias entre las clases de intercambios argumentativos que se desarrollan o es probable se desarrollen en los diversos tipos de actividad comunicativa no son causadas solamente por las diferencias entre tal o cual clase de diferencia de opinión a la que responden, a los tipos de puntos de vista que están en disputa, y a los puntos de vista procedimentales y materiales que se usan. Son causadas también por los requerimientos específicos propios de tal o cual dominio comunicativo, requerimientos que atañen la manera en que ha de tener lugar el intercambio entre argumentación y crítica, así como a las clases de resultados que han de alcanzarse. Dependiendo de las preguntas críticas propias de cada tipo de esquema argumental empleado en la argumentación principal en apoyo del punto de vista en disputa, es necesario anticipar y responder a clases específicas de reacciones críticas dentro de los intercambios argumentativos que tienen lugar en tal o cual tipo de actividad comunicativa.
Al conducir un intercambio argumentativo, se supone que los argumentadores tomarán en cuenta las precondiciones institucionales del tipo comunicativo y las reacciones críticas que son pertinentes cuando se usa tal o cual esquema argumental. Hacerlo resultará en la creación de lo que he llamado un patrón argumentativo específico en el discurso (van Eemeren, 2015). Tal patrón argumentativo se caracteriza por una constelación de jugadas argumentativas en las que, a fin de hacerse cargo de una clase particular de diferencia de opinión, y para defender un tipo particular de punto de vista, se utiliza un esquema argumental particular o una combinación de tales esquemas, dentro de una argumentación que tiene una clase particular de estructura.
Aunque algunos patrones argumentativos que ocurren pueden ser accidentales, hay ciertos patrones argumentativos que pueden ser típicos de la manera en que el discurso argumentativo se conduce en general dentro de un tipo específico de actividad comunicativa o un clúster de tipos. Esto es el caso en principio si el patrón argumentativo de que se trata está inmediatamente vinculado con las precondiciones institucionales del maniobrar estratégico propias del tipo de actividad comunicativa que se esté examinando. Tales patrones argumentativos “estereotípicos”, cuya existencia puede explicarse por las condiciones vigentes en los tipos de actividad comunicativa en que ocurren (van Eemeren & Garssen, 2014), tienen un interés especial para el investigador en pragma-dialéctica que se enfoque en determinar la dependencia respecto del contexto que tiene el discurso argumentativo.29 Los patrones argumentativos estereotípicos por los que se interesa un pragma-dialéctico resultan de usar modos de maniobrar estratégicamente que sirven (1) para alcanzar el propósito institucional de acuerdo con las precondiciones institucionales de un cierto tipo de actividad comunicativa, y (2) para responder a las preguntas críticas específicas que son pertinentes a la luz de las convenciones institucionales del tipo de actividad comunicativa.
En la práctica, puede haber diversos patrones argumentativos que son estereotípicos de tal o cual tipo particular de actividad comunicativa. Algunos de estos patrones argumentativos pueden ocurrir con mayor frecuencia que otros y en casos específicos un patrón puede ser dominante. La investigación pragma-dialéctica sobre el maniobrar estratégico apunta actualmente a la detección de patrones argumentativos que emergen como consecuencia de aquellas precondiciones institucionales para el maniobrar estratégico que son estereotípicas de las diversas clases de prácticas argumentativas en los dominios jurídico, político, médico y académico. Al descubrir tales patrones argumentativos funcionales que ocurren en la realidad argumentativa mediante investigación empírica cualitativa, los investigadores pueden hacer uso de los diversos instrumentos teóricos desarrollados en la pragma-dialéctica, tales como tipologías de puntos de vista, diferencias de opinión, esquemas argumentales y estructuras de argumentación (van Eemeren & Grootendorst, 1992). Los patrones argumentativos que se manifiestan en constelaciones específicas de jugadas argumentativas se describen en términos de las categorías que tales tipologías distinguen.
En la investigación empírica cualitativa sobre patrones argumentativos estereotípicos que hemos llevado a cabo Corina Andone, Eveline Feteris, Bart Garssen, Francisca Snoeck Henkemans, Jean Wagemans y yo, se identifican patrones argumentativos que son funcionales en tipos específicos de actividad comunicativa dentro de los dominios jurídico, político, médico y académico, y se hace claro cómo y por qué ocurren. Esta investigación cualitativa será seguida más tarde por investigación empírica cuantitativa de corpora representativos del discurso argumentativo en los que determinemos las frecuencias con que ocurren los diversos patrones argumentativos esterotípicos y hagamos comparaciones entre los varios tipos y dominios de actividad comunicativa. Documentar la diversificación institucional de las prácticas argumentativas de esta manera sistemática proporciona una comprensión basada empíricamente en la proliferación de prácticas argumentativas. Prepara también el camino para una explicación de la relación entre dependencia e independencia del contexto que tiene el discurso argumentativo que resulte más completa que la que han dado otros teóricos de la argumentación (por ejemplo, Toulmin, 2003).